Inaugura el FICG su trigésima séptima edición con charlas y exposiciones sobre la industria cinematográfica en Latinoamérica.
Con la oportunidad de encontrarse, entenderse y acercarse, el Festival Internacional de Cine en Guadalajara da paso a su trigésima séptima edición desde el Auditorio Telmex, con goce para la comunidad cinéfila y público en general que disfruta del cine mexicano, iberoamericano y del mundo.
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De la voz de su directora general, Estrella Araiza Briseño, el FICG 37, el cual en esta edición tiene como invitado de honor a Polonia, es señalado particularmente como significativo. “Es el momento del reencuentro, es el momento de mostrar que nuestra fiesta trae las mejores propuestas cinematográficas a nuestra ciudad, es el momento de reafirmar por qué somos el festival más grande de Latinoamérica y un semillero de proyectos y encuentros extraordinarios”, precisó.
Asimismo, se señaló que el encuentro fílmico es un mercado e industria donde se siembran semillas de grandes historias, pero también se pone la mesa para concretar otras. Es el espacio para los acuerdos, formación, profesionalización y negocios, un lugar con el que pocos festivales cuentan.
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Para esta edición se hizo hincapié en cuanto al número de mujeres que participan en el encuentro fílmico, contando tan solo en la sección de competencias con 36 directoras, al igual que en jurado. Por otro lado, siendo insignia del encuentro, se celebró que el Premio Maguey da espacio a todas las voces y propuestas fílmicas de todo el mundo, y reiteró que La Universidad de Guadalajara se enfoca en la educación, es por ello que en el encuentro hay un espacio para crear, aprender y hacer cine.
El Mayahuel de plata de este año le fue otorgado a la directora polaca Małgorzata Szumowska, quien subió al escenario del Auditorio Telmex a recibir dicho reconocimiento, destacando la cultural fílmica de México, al parque de dedicaba su galardón a Ucrania y a los migrantes ucranianos alrededor del mundo. Cerrando la velada de inauguración se proyectó la cinta “Elvis”, del director Baz Luhmann.
Dentro de la charla se señaló como punto positivo que en México se filmaron el año pasado 259 películas, sin embargo, como negativo se indicó que la mayoría de producciones se retrata a hombres blancos, y a estereotipos en donde las minorías no se ven reflejadas, incluso, donde los “prietos” sólo tienen poca injerencia y en su mayoría, con roles negativos.
“Estamos encerrados en papeles racistas y es tal el racismo que colegas morenos deciden renunciar al cine porque nunca tendrán un papel”, explicó Ianis Guerrero, quien con un estudio de las cintas que Netflix compró en 2019 de cine mexicano, el actor dejó en claro que, de las 11 películas, sólo en 7 hay actores “prietos”, y en dos ni siquiera existen los morenos, y en las cintas que sí los hay, en su mayoría son personas sin profesión, son maleantes o viven de actividades ilícitas. Solo en un caso es un papel positivo.
Como parte de las exposiciones se inauguró en la edición 37 el trabajo “Ansiedad”, de Alberto Montt, diseñador y artista plástico, de nacionalidad ecuatoriana-chilena. En la exposición se cuenta con más de 50 ilustraciones que muestran cómo la ansiedad ha acompañado al humano a lo largo de la vida, escondiéndose a través del amor, miedo y esperanza, mostrándose en el pasillo central del Conjunto de Artes Escénicas.
En la Master Class, el director y productor de cine mexicano, Manolo Caro, dio a conocer que su carrera la inició asistiendo al Festival de Cine en Guadalajara y viendo películas en Cineforo, sumando anécdotas a la charla y producciones que fueron fundamentales en su paso como director, entre ellas, “No sé si cortarme las venas o dejármelas largas”, el cual se filmó cuando tan solo tenía 19 años, “Amor de mis amores” y “La casa de las flores”.
Para finalizar, el productor de 37 años de edad platicó sobre cómo fue el proceso de selección del guion para su convocatoria “Toast for a cause: Un brindis por las nuevas historias” en colaboración con Moët & Chandon, pues no todo está́ contado como se cree. Manolo, en conjunto con el grupo de jueces de la convocatoria, se dieron a la tarea de buscar escrupulosamente el guion perfecto, mientras que con algunos guiones se divertían y con otros se sintieron identificados.
El Festival Internacional de Cine en Guadalajara, edición 37, continúa sus actividades hasta 18 de junio.
