Comprendido como un disco que representa la promesa que Ricardo Montaner le hizo a su padre y abuelo, “Tango” trae de vuelta las memorias de su niñez en Argentina, tierra de ese género musical que da título a su nuevo álbum, en el cual Héctor Eduardo Reglero Montaner -verdadero nombre del cantautor- decide viajar al pasado y honrar sus raíces, concebido en el legendario Estudio ION, emplazado en una vieja casona en el barrio de Balvanera, en la Capital argentina.
“Sin lugar a dudas es el reencuentro con mi ADN, volver a la esencia, orígenes, raíz, y es una manera de cumplirle a mi abuelo y padre una promesa. El gran reto es que el tango vuelva a ser un género de carácter universal, elegante, clásico, y poner en el oído de la gente que me escucha desde hace 30 años, la música de donde vengo, que ha ido quedando en el olvido, por lo que me permito compartir parte de esa libertad y expresión musical que ahora tengo para hacer llegar este sonido tan rico, cultural y lo reconozcan”, expresó Montaner.
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Como viajero inalcanzable, el cantante se adentró a sus raíces respetando el legado de aquellos que escribieron la historia de este género, con temas como “Cuartito azul”, “Nada”, “Nostalgias”, “Uno”, “El día que me quieras” y “La última copa”.
“Los intérpretes asumimos la música de diferentes maneras, lo que tengo en común con el tango es que nos atraemos, somos románticos, pero nunca me había tomado tan en serio hacer un disco de tango con la orquesta del maestro Andrés Linetzky. Me alegra haber esperado el tiempo suficiente como artista libre para poder hacer esta producción, encarando un proyecto que me llamó la atención toda mi vida”, precisó el naturalizado venezolano, quien junto a su familia, pronto estrenará el reality “Los Montaner” para Disney Plus.
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