Elementos de la Guardia Nacional que patrullan Tijuana no tienen en dónde dormir ni descansar, y están en búsqueda de lugares deshabitados o en abandono para montar campamentos en diferentes zonas de la ciudad. Eso fue lo que ocurrió durante la tarde del viernes 25 y sábado 26 de marzo en Colinas de Agua Caliente, en donde el abogado de la Casa Club se hizo presente para negar el acceso a los agentes, a pesar de que el inmueble está en abandono y en franco deterioro.
El abogado de la Casa Club de Colinas de Agua Caliente pidió a ZETA reservar su identidad, aseguró que desde el viernes hubo movilización de un grupo de 12 elementos de la Guardia Nacional que intentaron internarse en la Casa Club ubicada en calle Fresno y Colinas de Agua Caliente. Los vecinos del fraccionamiento Bosques impidieron que los agentes hicieran el campamento y esperaran el diálogo con el apoderado legal del espacio.
“Luego de dos minutos se logró el entendimiento”, explicó el abogado a ZETA. El grupo de militares desistió de entrar a la Casa Club ya que no hay interés de la Asociación Civil Casa Club Colinas de Agua Caliente de prestar, rentar o donar el espacio. El abogado advirtió que ingresar a la fuerza sería violar el derecho a propiedad privada, lo que provocó que los agentes subieran sus maletas a la patrulla.
“Estaban buscando otro espacio, venían de una escuela pero con el ingreso a clases se las pidieron y ahora deben ver dónde dormirán y descansarán”, explicó el abogado.
“Esto ya es otro problema, porque vienen refuerzos, ayer 400 más y está bien, los necesitamos… pero ¿dónde y cómo descansarán y atenderán sus necesidades?”, cuestionó.
Fue cerca de las tres de la tarde de este sábado 26 de marzo cuando se registró el reporte sobre la patrulla de la Guardia Nacional.
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