Un juez de control sentenció a 25 años de prisión a Brandon Alexis Rodríguez Domínguez por su responsabilidad en el homicidio de su sobrino, Brian Efrén Cortéz Rodríguez, de 13 años.
La sentencia -que también determinó que Rodríguez Domínguez deberá pagar 2 millones 159 mil 508 pesos como reparación del daño- fue tras la carpeta de investigación presentada por la Fiscalía General del Estado (FGE) y después de que se hizo un acuerdo entre las partes para la realización de un procedimiento abreviado.
El homicidio del menor sucedió el 25 de abril de 2021, a la orilla del arroyo – ubicado en el Rancho Huacatay, a espaldas de la Quinta Cortéz-, cuando el hoy sentenciado atacó a la víctima con un objeto punzocortante lesionándola en varias partes del cuerpo.
Posteriormente, Rodríguez Domínguez golpeó con una piedra la cabeza del menor, causándole múltiples lesiones que posteriormente le provocaron la muerte por traumatismo craneoencefálico severo.
Durante las pesquisas ministeriales, elementos de la Agencia Estatal de Investigación identificaron varias cámaras de video vigilancia, lo que permitió conocer la ruta que siguieron la víctima y Rodríguez Domínguez el día que ocurrieron los hechos.
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Asimismo, se encontraron inicios periciales que implican a Brandon Alexis en el homicidio, ya que durante un cateo a su domicilio se localizaron ropas con manchas de sangre, que resultó genéticamente compatible con la de la víctima. Además se contó con testimoniales que ubican a ambos en el lugar de los hechos, apuntó la FGE.
En un comunicado, difundido este 18 de marzo de 2022, la FGE recordó que se cumplimentó la orden de aprehensión en contra el implicado, a quien se le inició el proceso judicial.
El 28 de abril de 2021, el entonces fiscal central, Hiram Sánchez Zamora, adelantó como móvil del asesinato el que el hoy sentenciado, Brandon Alexis Rodríguez Domínguez tenía celos de la relación familiar que tenía su pareja sentimental (una joven de 16 años) y el niño.
“Este sujeto había manifestado cierto celo respecto del menor, había necesariamente un rencor grave hacia el niño. El móvil sería problemas que tenía con el menor, problemas que no están justificados; no había razón para ellos, pero bueno… existía un tema familiar, una problemática familiar con el menor y una violencia que fue escalando hasta este grado, que terminó con la vida de Brian”, dijo el fiscal central.
