Aduana de Tijuana comienza a regularizar unidades en fase de prueba
El gobierno de Baja California prevé que 200 mil vehículos usados de procedencia extranjera, también conocidos como autos “chocolate,” que se encuentran en la entidad se acojan al decreto de regularización. Esta cantidad sería inferior a los 500 mil que existen, según estimaciones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) federal.
“Dependerá lógicamente de la decisión de los propietarios de los vehículos de adherirse al decreto, pero tenemos identificados un volumen inicial que se va a dar con toda certeza y estaremos esperando otro tanto”, señaló Marco Moreno Mexía, secretario de Hacienda del estado, quien apuntó que se tiene registrados 80 mil unidades susceptibles a beneficiarse con el decreto.
Actualmente un equipo de trabajadores del Instituto de Identidad Vehicular (Invec) están siendo capacitados en áreas de recaudación, y se está identificando la logística para establecer diversos puntos de emplacamiento para los vehículos que sean regularizados. Lo cual permitirá dar agilidad a ese proceso, “entendiendo que el volumen pudiera superar con creces la capacidad instalada que tienen actualmente todas las oficinas de recaudación”.
En entrevista con ZETA, el funcionario estatal dijo que el futuro del Invec “va a depender de ritmo, del proceso de regularización y de una eventual prórroga al decreto, en caso de que no se logren regularizar toda la masa de vehículos que son sujetos del decreto”.
En función de eso, una vez que concluya el decreto, “estaremos determinando cuál sería el futuro del Invec”. Igualmente, vislumbró que cuando haya concluido el programa de regularización la federación y el estado se coordinarán para tomar las medidas que establece la ley en cuanto a la permanencia de vehículos que no son regulares; posteriormente procederá la confiscación, “pero es un tema que esteremos revisando con la federación en su momento”.
El viernes 28 de enero, extraoficialmente se informó que se había regularizado el primer auto “chocolate” en la Aduana de Tijuana, mediante el agente aduanal Adolfo Ayala Bejarano, representante del Grupo Aduanal Ayala y Asociados, y presidente de la Asociación de Agentes Aduanales de Tijuana y Tecate.
Esto a unas horas de que Fernando Martínez García asumiera la titularidad de la Aduana de Tijuana, en sustitución del General Diplomado de Estado Mayor Aéreo, Julián Martín Corona Rincón, quien fue enviado a la Aduana de Mexicali; recinto del que procede Martínez García.
Lo que llamó la atención es que la primera regularización de un auto “chocolate” en Baja California no fue informada por la Agencia Nacional de Aduanas de México, su director Horacio Duarte, o por el Servicio de Administración Tributaria (SAT), pese a que el programa ha sido una promesa del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Se sabe que este viernes 4 de febrero, al menos 15 autos “chocolate” serán presentados a la Aduana de Otay para su regularización mediante agencias aduanales de Tijuana en una fase de prueba; en tanto el SAT publica las reglas definitivas de comercio exterior en el DOF.
“Nosotros iniciamos el proceso considerando las reglas anticipadas, y la aduana de Tijuana nos notificó el 2 de febrero que nos iba a dejar a los agentes aduanales los pedimentos de estos vehículos a regularizar y que ellos nos van a despachar en aduana como periodo de prueba”, dijo Kathya Torres, gerente de importación de vehículos en la Agencia Aduanal Grupo Logix.
Expuso que luego de recibir la documentación de los propietarios de los vehículos, consultar el VIN de las unidades que son aptas para la importación definitiva, un proveedor certificado por la Semarnat les hizo la verificación ambiental.
En total el trámite de regularización cuesta seis mil 778 pesos como mínimo. De esta cantidad, dos mil 778 corresponden al aprovechamiento (dos mil 500 pesos más el IVA del pedimento, 278 pesos) que se paga a la federación. Mientras que los cuatro mil pesos restantes son de honorarios de la agencia aduanal, que incluye la consulta del VIN, la verificación ambiental, así como la validación del pedimento, detalló.
A esta suma se debe agregar o no, el costo del catalizador y el seguro (en caso de que el vehículo no cuente con él) y el emplacamiento con la autoridad estatal. Así como la inscripción del Registro Público de la Propiedad (Repuve); que si se hace en la Aduana de Tijuana mediante Banjército, cuesta 60 dólares (mil 200 pesos). Pero esto último es opcional, según lo manifestó el director general del Repuve, Eduardo Bonilla quien señaló que se puede hacer de forma gratuita en el módulo de subrecaudación de rentas de la colonia 20 de Noviembre.
Jesús Leonardo Ortiz, comerciante y propietario de una camioneta Jeep Liberty 2013 presentará este viernes su vehículo en la Aduana de Tijuana para terminar el proceso de regularización. Dijo que el vehículo lo tiene desde hace un año “Primeramente lo puse en el programa del gobierno en el que lo censaron, pero no me sirvió de nada para este proceso de regularización”.
“No pensaba hacer el gasto de regularizar el vehículo y seguir con la carta del censo, pero al final es una oportunidad porque representa un ahorro”, añadió.