Ciudadanos preocupados por aumento en robos a negocio, violencia familiar, violación y narcomenudeo, además de robo a casa habitación en los primeros lugares nacionales. Estremece a la comunidad de Villa Ignacio Zaragoza el crimen de José Alfredo “El Topo” Mendoza
Desde la pasada administración de Walter Valenzuela en Comondú, sus habitantes enfrentaron el aumento de inseguridad, robos a casa habitación, a negocio, violencia doméstica y venta de droga.
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Según Semáforo Delictivo, en los últimos meses de 2021, Comondú mantuvo en Rojo el robo a negocio, violencia familiar, violación y narcomenudeo, y en cifras internas de la Mesa de Seguridad, figura en los primeros lugares a nivel nacional en robo a casa habitación.
“Una de las estrategias es que no falten insumos a las patrullas para aumentar el número en las calles, y mover mandos para tener elementos de confianza y acabar con las viejas prácticas de andar cazando ciudadanos, extorsionando transportistas, franeleros. Sentimos que nos ha funcionado, aún hay temas pendientes, Comondú es uno de los primeros lugares a nivel nacional en robo a casa habitación, en violencia doméstica también somos de los primeros lugares a nivel nacional, así recibimos y desgraciadamente así continuamos”, reconoció Humberto Arce Cordero, secretario general de Gobierno de ese municipio.
Las malas condiciones económicas en que recibió la administración Iliana Talamantes Higuera, actual presidente municipal, con el adeudo de alrededor de 18 millones de pesos por concepto de la nómina a trabajadores, además de las deficiencias en equipo de trabajo y unidades, desvío de recursos y la corrupción entre el personal, generó una percepción de inseguridad, pues los ciudadanos temían más a los policías que a los maleantes.
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“El Ayuntamiento en general lo recibimos en ruinas, por ejemplo, Servicios Públicos lo recibimos con un solo compactador funcionando, actualmente ya con siete funcionando; Seguridad Pública no es la excepción, recibimos muy descuidada y con mucha corrupción, lo que hicimos a la llegada es revisar los mandos y las unidades, encontramos varias patrullas no pintadas como patrullas, asignadas a funcionarios públicos. Esos carros los regresamos a Seguridad y ya hay más patrullas circulando”, declaró Arce.
En su opinión, la falta de unidades en las calles, se debe a la insensibilidad política, ya que por muchos años los ciudadanos dejaron de recibir recorridos de vigilancia en las colonias, lo que llevó al incremento de la violencia y la delincuencia.
La instrucción de la alcaldesa es que haya más contacto con la población, ya que “ahí está el termómetro de inseguridad, los que conocen qué está pasando”, expresaría el funcionario.
Por ello se trabaja en programas de atención al delito con participación ciudadana, aunque es vital la presencia de las unidades de seguridad en las calles para inhibir el delito.
Los cambios en los mandos serán permanentes, sobre todo si hay señalamientos de corrupción y malas prácticas.
“A la anterior administración le daban 20 litros de gasolina al día, nosotros le llenamos el tanque a las patrullas todos los días, no tienen límite, hemos aumentado los patrullajes, hemos aumentado también los puntos de revisión, se implementó el programa Cero Tolerancia, buscando estrategias para evitar el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública; hicimos cambios en todos los mandos de la Policía, en Subdirección Operativa, Dirección Administrativa, Dirección de Tránsito, Comandancia General, comandancias en algunas delegaciones, removiendo mandos, algunos por señalamientos de corrupción”, reconoció Humberto Arce Cordero.
Incluso ha habido ataques en redes sociales por parte de elementos de seguridad que fueron removidos, y es que se está erradicando la corrupción y malas prácticas, como la extorsión a la ciudadanía, mordidas y el trabajo con delincuentes.
Es un trabajo difícil, pero que se está haciendo, aunque genere molestia en los trabajadores, “ha habido resistencia en cuanto a los cambios de mandos, los que estaban en Tránsito y otras partes han estado haciendo ataques en redes sociales, porque al hacer los cambios, quitamos privilegios, quitamos a gente que ya tenía señalamientos, prácticas y vicios que no estaban llevando a nada bueno y daban muy mala imagen ante la ciudadanía”, lanzó el secretario de Gobierno.
Tal y como lo han establecido el Gobierno Federal y la anterior administración estatal, la Mesa de Seguridad se mantiene de manera diaria para conocer los problemas y atenderlos de manera estratégica entre los tres niveles de gobierno.
“La Mesa de Seguridad es diario a las 8 de la mañana, pero de manera presencial solo días lunes y jueves, aquí se ve en conjunto Comondú y Loreto, un día es aquí y otra allá, normalmente está presente la presidente, el secretario general y el director de Seguridad y Tránsito”, expresó el titular de la Secretaría General de Gobierno comundeña.
EL CRIMEN DE “EL TOPO”
El 16 de enero, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) dio a conocer la captura de José Miguel Martínez Espinoza, alias “El Miguelito”, imputado por homicidio calificado con saña en contra de José Alfredo Mendoza Morales, de 29 años y originario de La Bocana en Mulegé.
La PGJE anunció la captura por hechos registrados la madrugada del 1 de enero:
“Fue vinculado a proceso penal por homicidio calificado con saña y se encuentra en prisión preventiva, el hecho ocurrió el sábado 01 de enero de 2022 en un domicilio que se ubica en el poblado de Ignacio Zaragoza, municipio de Comondú, a donde llegó el imputado discutió con la víctima para después lanzarle combustible y prenderle fuego; José Alfredo ‘N’, de apodo ‘El Topo’, sufrió quemaduras de segundo grado que le provocaron la muerte”.
Según los hechos, justo después de la celebración de Año Nuevo, “El Miguelito” acudió hasta el domicilio de “El Topo”, ubicado en Villa Hermosa y Ciudad Morelia en el poblado de Villa Ignacio Zaragoza. En notorio estado de ebriedad, golpeó la puerta en repetidas ocasiones hasta que José Alfredo salió, eran las cinco de la mañana cuando “El Miguelito” empezó a reclamar y gritar, de un momento a otro la discusión subió de tono, con algunos empujones.
El imputado, según causa penal: J01/2020 y carpeta INS/02/2022, sacó de entre sus ropas una botella de plástico con alguna sustancia inflamable y roció a “El Topo”, inmediatamente le prendió fuego y lo dejó tendido en el suelo, en llamas, así fue descrito en el juicio llevado a cabo el 15 de enero.
“Comienza a discutir, para posteriormente arrojarle la sustancia inflamable que llevaba consigo en la superficie corporal (en el cuerpo), iniciando una combustión, es decir, fuego producido en la ropa y diferentes partes del cuerpo de la víctima, ocasionando lesiones en su humanidad”.
Martínez Espinoza huyó del sitio mientras “El Topo” se revolcaba en el suelo, tratando de sofocar las llamas, sin embargo, su esfuerzo fue en vano, su agresor le había dejado heridas graves. El fuego le ocasionó lesiones en el 90% de su cuerpo, por lo que inmediatamente fue trasladado por unidades de emergencia, la valoración médica indicó “lesiones de tipo quemaduras de segundo grado profundo de su superficie corporal”.
José Alfredo fue trasladado de urgencia hasta las instalaciones del Hospital Juan María de Salvatierra en La Paz, pero las quemaduras en segundo grado le ocasionaron un shock hipovolémico con fallo multiorgánico, perdió demasiada sangre y perdió la vida aproximadamente a las 18:30 horas del 2 de enero.
Una vez escuchadas las partes, la Jueza de Control, Silvia Irlanda Pérez Núñez, dictó auto de vinculación a proceso y como medida cautelar la privación de la libertad, así la PGJE esclarecer el atroz homicidio 13 días después.
“Se vincula a proceso a José Miguel ‘N’ alias ‘El Miguelito’, por el hecho con apariencia de delito de homicidio calificado con ventaja y saña. Se impone medida cautelar de prisión preventiva de manera oficiosa, por ello se ordena ser trasladado al Cereso de San José del Cabo”, determinó la juzgadora.
El Agente del Ministerio Público de la Unidad de Investigación y Judicialización del Delito de Homicidio Doloso, llevó a cabo la integración de la investigación, vinculando la participación del imputado en el atentado que privó de la vida al joven.
A través del Código Penal de Baja California Sur se acreditó:
“Artículo 128. Homicidio simple. A quien prive de la vida a otra persona, se le impondrán de doce a veinte años de prisión.
“Artículo 132. Homicidio calificado. Cuando el homicidio sea calificado se impondrán de veinticinco a cincuenta años de prisión.
“Artículo 144. Circunstancias calificativas. El homicidio y las lesiones son calificadas cuando se cometen con premeditación, ventaja, traición, alevosía, retribución, por el medio empleado, saña o en estado de alteración voluntaria.
“II. Existe ventaja:
“c) Cuando el sujeto activo se vale de algún medio que debilita la defensa del sujeto pasivo.
“VI. Por los medios empleados: Se causen por inundación, incendio, minas, bombas o explosivos, o bien por envenenamiento, asfixia, tortura o por medio del suministro de cualquier otra sustancia nociva para la salud.
“VII. Existe saña: Cuando el sujeto activo actúa con crueldad o bien aumente deliberadamente el dolor o sufrimiento de la víctima”.
DESPUÉS DEL ATENTADO
A 37 horas después del atentado, José Alfredo Mendoza Morales no pudo soportar las quemaduras en segundo grado en el 90% de su cuerpo, médicos que participaron en las curaciones evidenciaron que “El Topo” luchó por permanecer con vida, a pesar de los pronósticos nada favorables.
Día y medio soportando las quemaduras hasta que su humanidad no pudo más, el acelerador que “El Miguelito” le roció, evitó que el fuego se pudiera apagar a tiempo y así el daño no fuera mortal.
Sus padres, Manuel Mendoza Gómez y Juana Morales Mendoza, exigen justicia por la pérdida irreparable de José, que a decir de muchas personas que le conocían en la localidad, era amable, ayudaba a todos, vivía trabajando en tareas que la comunidad le encomendaba.
“No le hacía daño a nadie, dep (sic) el compa topo, espero y se haga justicia, porque la persona que le hizo ese daño puede volver a matar a alguien de la misma forma”, lamentaría en rede sociales José Flores, quien conoció a la víctima.
“De todo corazón le deseo descanse en paz, pero con más ganas deseo se haga justicia en la tierra, si alguien es capaz de hacer eso seguro lo volverá a hacer”, externó Diana Ávila, habitante de la localidad.
Desde Ciudad Constitución y hasta Villa Ignacio Zaragoza ha retumbado el apodo de “El Topo”, un personaje muy querido, todos los comentarios van dirigidos a que se haga justicia, que el agresor no quede en libertad y elevar oraciones por el eterno descanso del joven Mendoza.
Temen que personajes como “El Miguelito” estén sueltos y sean un peligro para la comunidad, pues se trataría de un ataque de miembros de la delincuencia organizada, pero simplemente un individuo tenía resentimiento contra José Alfredo, ya que Martínez Espinoza es desconocido para todos.
Muchos de los que atestiguan las cosas buenas que “El Topo” hacía por su comunidad, señalan que hace más de ocho años que salió de Chiapas, donde se encuentra la mayoría de su familia, probando suerte en su tierra natal en Vizcaíno y llegó hasta Ciudad Constitución.
“Quisiera creer que existe un cielo a donde van las buenas personas, sé que él estaría ahí. La vida no fue justa contigo, la muerte tampoco. Descansa en paz, Topo, gracias por todo, Camarada amigo mío, como tú decías”, manifestó Raúl Lozano, amigo de la víctima.
BCS EN ROJO
La asociación civil Semáforo Delictivo hizo públicos los principales delitos que aquejan a los pobladores, colocando en Rojo la incidencia por secuestro, extorsión, robo a negocio, violencia familiar y feminicidio; y en Amarillo el delito de lesiones dolosas, según el último informe hasta noviembre de 2021.
Preocupantes son los números del municipio de La Paz que administra Milena Quiroga Romero, los indicadores salieron elevados en secuestro, extorsión, narcomenudeo, robo a negocio y violación; mientras que en Amarillo se encuentran el robo a casa habitación, lesiones dolosas y violencia familiar.
La Paz también aparece con preocupación entre las ciudades que incrementó la percepción de inseguridad, para el mes de septiembre de 2021, el último mes de la administración de Rubén Muñoz Álvarez, la Capital sudcaliforniana se colocaba en segundo lugar nacional con menor percepción de inseguridad (27.2%).
Apenas en el primer mes de Milena Quiroga Romero, La Paz subió casi cinco puntos de percepción de inseguridad (32%) y cayó hasta el sexto lugar, así lo señala el Centro de Investigación y Competitividad Turística Anáhuac, que se dedica específicamente a la revisión y análisis de datos en los principales destinos turísticos del país.
Los registros fueron tomados de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) correspondiente a diciembre de 2021, incluso el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) añade que en septiembre de 2020, La Paz mantenía uno de los índices de inseguridad más bajos (21 puntos) y ahora es de 11 puntos más.
En cuanto a advertencias de viaje del Gobierno de Estados Unidos vinculadas con seguridad a través del Departamento de Estado, a la última actualización del 8 de diciembre de 2021, BCS tiene alerta preventiva de “Aumente sus precauciones”, derivado de los incidentes en secuestro, hechos violentos y hallazgo de cuerpos enterrados.
Los Cabos es actualmente el destino turístico del país, así como la ciudad con la menor percepción de inseguridad, con 20.2%; siendo las principales preocupaciones, la falta de agua, vivienda e inseguridad.
De acuerdo a los indicadores de Semáforo Delictivo, el feminicidio es uno de los delitos de mayor preocupación. En 2020, en comparación con los últimos meses de 2021, hay cifras en Rojo que deben atenderse. En 2020 el Estado cerró con cuatro asesinatos de mujeres, y en el año que concluyó, alcanzó los nueve.
El secuestro en 2020 cerró con cinco, para 2021 incrementó uno por encima del año anterior; los delitos que atentan contra la libertad y la seguridad sexual hasta noviembre de 2021, ya superan al año pasado y falta el registro de diciembre.
Y qué decir de la violencia familiar, donde siguen creciendo los indicadores. En 2020 se registraron 3 mil 420 delitos que atentan contra la familia, mientras que a noviembre de 2021 eran 3 mil 214 y diciembre es de alta incidencia.
Por último, el narcomenudeo se ubicó en cifras levemente por encima de 2020.
