18.8 C
Tijuana
viernes, octubre 4, 2024
Publicidad

Cómo un funcionario de alto nivel puede hacer limpia de sus subalternos

Cuando un gobierno municipal, estatal o federal entra a funcionar para el puesto al que ha sido electo, empieza desde antes, como al integrar su equipo de trabajo; y muchas veces ignoramos cómo se van incrustando gentes que le van a servir y gentes que van a ser un dolor de cabeza, sobre todo cuando se eligen amigos o recomendados por políticos o por familiares del gobernante. A la hora de integrar su equipo, se van dando cuenta de que la elección fue inadecuada, y en algunos de los casos vamos a ver cómo esos subalternos escogidos no son de la talla para un gobierno puro. Y hagamos hincapié, por más puro que sea el funcionario en turno, siempre va a tener que lidiar con los incompetentes, los corruptos, los aduladores, los retrógradas.

Ahora imaginemos a un presidente municipal escogiendo a su equipo, si no existe escuela formativa de subalternos; y no solo se necesitan regidores, tesoreros, policías, jueces y los ya heredados por un sindicato, que fomenta la corrupción. Y como tal, vamos a tener subalternos que jamás conocemos, y que ya con un 40 por ciento de la gente escogida sea la adecuada para el puesto que se le otorga, incluso hasta el menor de los puestos de policía, como son los de intendencia.

En los gobiernos de los estados hemos visto que por más capaz que el gobernador sea, habrá dentro de su gente quienes lo tilden de inepto, incapaz y se dedican a medrar con el puesto otorgado; y en algunos casos llevamos al puesto menos indicado a “n” corrupto o tranza de gobiernos anteriores.

En la presidencia de la República vemos lo mismo: son los ministros, los 32 gobernadores, las más de cinco mil presidencias municipales… y de ellos toda la gente que depende de un gobierno municipal, estatal o federal, de lo cual la lista es grandísima.

Y a la hora de hacer limpia, en cualquiera de las esferas de la política habrá sus detractores, mentirosos, engañadores y estafadores que se van a dar toques de pureza; y para un botón basta: cuántos de los subalternos salen, al dejar el puesto, más ricos que el mismo Jefe de Gobierno.

Señores presidentes, gobernadores, y hasta señor Presidente de la República: tienen que luchar día a día con la ineptitud, antagónicos o ideales de sus jefes, y por tanto, es cuento de nunca acabar (y si no, hagamos recuento de presidencias municipales, gubernaturas y presidencias republicanas).

Quién limpia a quién antes de dar limpieza a uno mismo; el mejor juez por su casa empieza. Cuándo hacerlo: al inicio de su mandato, o en cuanto se detecte la falla, ya que ellos no han sido electos por el pueblo, sino por el propio gobernante.

 

Atentamente,

Dr. José Fernando Jaramillo Cisneros.

Tijuana, B.C.

Correo: drferja@hotmail.com

Autor(a)

- Publicidad -spot_img

Puede interesarte

-Publicidad -

Notas recientes

-Publicidad -

Destacadas