Melanie Montserrat Pérez / Especial para ZETA.
Ciudad de México.- A pesar de incluir agrupaciones y propuestas sonoras consolidadas como Tame Impala, Twenty One Pilots, Disclosure, The Bravery, el festival Corona Capital apostó por nuevos ritmos y proyectos musicales de recién edificación, y de la escena alternativa global para su décima primera edición, donde no todo el cartel fue conformado por los llamados headliners.
La sorpresa de los fans no se hizo esperar cuando en el roster anunciado el pasado 13 de noviembre aparecieron nuevos nombres, muchos de ellos, de la corriente del hip hop, rock alternativo, y psicodélico que llegan a los diferentes escenarios del magno evento desarrollado en dos jornadas, en las que destacan esas bandas y músicos que apenas comienzan a darse paso entre el gusto del público.
Uno de ellos es Hamzaa, la joven artista de R&B procedente de Londres que no sólo fue la encargada de abrir el escenario Bosque sino también la primera voz de este sábado, donde puso a vibrar al público con su peculiar interpretación; seguida por el cantautor Elliot Moss, de 22 años, otro joven voz que se sumó a los escenarios de Corona Capital, luego de sorprender al mundo con su característica música hipnotizante, y mezcla de todo.
Indudablemente, la apuesta por los artistas emergentes de esta edición fue de las sucesos más esperados por el público que, se mostró emocionado y se abandonó al disfrute de los ritmos de Turnstile, la banda de hardcore punk oriunda de Baltimore, dueña de cinco EP y tres álbumes de estudio con los que esta tarde/noche prendieron el escenario Corona Cero a base de pesados ritmos que cimbraron el Autódromo Hermanos Rodríguez a la par de sus fans que bailaron y aplaudieron eufóricos.
La cantante de folk indie, originaria de Atlanta Georgia, Faye Webster, llegó al festival con su más reciente álbum, “I Know I’m Funny jaja” (liberado el 25 de junio de 2021), convirtiéndose hasta el momento en otra de las grandes propuestas alternativas que colorean el escenario Bosque, en el que se dejó disfrutar de su voz y deleitar con su guitarra; mientas Tsus música, invitó a la relajación al ritmo del folk.
Sin duda, Corona Capital sigue posicionándose como uno de los festivales musicales más importantes de México, y resulta un gran acierto el que se de la oportunidad a artistas que construyen de a poco su camino y se hacen de un nombre en la escena musical y gusto del público.