El Gobierno de Estados Unidos admitió, este viernes 17 de septiembre, haber cometido un “trágico error” al perpetrar en Kabul, capital de Afganistán, un ataque con drones en el que murieron 10 civiles, entre ellos 7 niños, el pasado 29 de agosto.
Así lo indicó el jefe del Mando Central de Estados Unidos, general Kenneth F. McKenzie, en declaraciones a los periodistas en el Pentágono. Mientras que el propio secretario de Defensa, Lloyd Austin, se disculpó después por el error.
“Ofrezco mi más sinceras condolencias a los familiares supervivientes de aquellos que fueron matados […] Nos disculpamos y nos esforzaremos por aprender de este terrible error”, dijo a través de un comunicado el jefe del Pentágono.
El ataque militar estadounidense -que presidente del Estado Mayor Conjunto, el general Mark Milley, había llamado como “justo”- tenía como objetivo al conductor y un vehículo, quienes, ahora se sabe, no eran una amenaza asociada al grupo terrorista Estado Islámico Jorasán (ISIS-K, por sus siglas en inglés).
“Este ataque se realizó con la convicción de que evitaría una amenaza inminente para nuestras fuerzas y los evacuados en el aeropuerto, pero fue un error y ofrezco mis más sinceras disculpas”, abundó Mckenzie.
“Ahora estoy convencido de que hasta 10 civiles, incluidos hasta siete niños, murieron trágicamente en ese ataque […] Además, ahora evaluamos que es poco probable que el vehículo y los que murieron estuvieran asociados con ISIS -K, o una amenaza directa a las fuerzas estadounidenses”, agregó el el jefe del Mando Central de EE.UU.
En el período previo al ataque, los operadores de los drones de EE.UU. vigilaron un patio durante 4 a 5 minutos. En ese momento, un conductor masculino abandonó el vehículo. Un niño estaba el vehículo y otros niños estaban presentes en el automóvil y en la vivienda, según lo indicó la cadena CNN.
“Los militares se basaron en un estándar de certeza razonable para lanzar el ataque contra el vehículo. Trágicamente, era el vehículo equivocado, dijo el funcionario, añadiendo que ninguna certeza razonable es una certeza del 100 por ciento”, indicó la misma cadena estadounidense.
“El funcionario estadounidense dijo que en el tiempo previo al ataque, Estados Unidos tenía al menos 60 informes de inteligencia diferentes sobre amenazas hacia las fuerzas estadounidenses en el Aeropuerto Internacional Hamid Karzai”, agregó CNN.
El 29 de agosto, el Ejército de EE.UU. realizó un ataque con un dron contra un vehículo en una zona habitacional de Kabul. El Pentágono aseguró que fue un operativo contra un integrante del ISIS-K, quien presuntamente planeaba un atentado contra las tropas estadounidenses en el aeropuerto internacional Hamid Karzai. Sin embargo, una investigación del diario The New York Times reveló que se trataría de un trabajador humanitario.
TALIBANES ANUNCIAN FIN DE LA GUERRA EN AFGANISTÁN; DICEN CONTROLAR TODO EL TERRITORIO
Zabiullah Mujahid, portavoz de los talibanes, declaró, el pasado 6 de septiembre, que dicho movimiento tomó el control del valle del Panjshir, la única de las 34 regiones afganas que no había caído en manos insurgentes.
“La última fortaleza del enemigo mercenario, la provincia de Panshir, fue completamente conquistada”, aseguró, en un comunicado, el principal portavoz de los talibanes.
Según Mujahid, “la provincia de Panshir ha quedado bajo el control total del Emirato Islámico [como se autodenominan los talibanes]”, después de intensos días de combates.
“Algunos de los rebeldes de la provincia fueron derrotados y el resto huyó, liberando al pueblo oprimido y honorable de Panjshir”, añadió el portavoz talibán.
“Con esta victoria, nuestro país ha sido sacado completamente del atolladero de la guerra y tendrá una vida pacífica y próspera en un ambiente de libertad, independencia y prosperidad”, anunció el vocero. Sin embargo, el Frente de Resistencia Nacional declaró que la afirmación de los talibán es “falsa”.
“Las fuerzas del Frente de Resistencia Nacional están presentes en todas las posiciones estratégicas en el valle para continuar combatiendo”, afirmaron, agregando que “la lucha contra el [movimiento] talibán y sus socios continuará hasta que la justicia y libertad prevalezcan”.
Por su parte, el portavoz del Frente, Ali Maisam Nazary, escribió en su cuenta de la red social Twitter, que el líder de la fuerza de resistencia, Ahmad ShahMasud, “está a salvo y pronto dará un mensaje”.
Un día antes, el domingo 5 de septiembre, el Frente de Resistencia Nacional dijo que “propone que los talibanes detengan sus operaciones militares en Panshir […] y retiren sus fuerzas. A cambio, orientaremos a nuestras fuerzas a abstenerse de realizar acciones militares”.
En otro tuit, el FNR dijo que su otro portavoz, Fahim Dashty, un conocido periodista afgano, y el general Abdul Wudod Zara, habían muerto durante los últimos combates.
El valle de Panjshir -al norte de la capital Kabul- es el lugar de concentración de las fuerzas lideradas por Masud, formadas en su mayoría por exintegrantes del Ejército afgano y de servicios especiales constituidos durante la ocupación estadounidense.
La región fue antes bastión de los combatientes que, bajo la dirección del héroe nacional Ahmad Shah Masud —padre del actual líder del Frente—, se opusieron a los militares soviéticos en la década de 1980 y luego a los talibanes antes del 2001.
Panshir era hasta ahora la única de las 34 provincias afganas que no había bajo el control de los talibanes, después de que el grupo islamista capturó las 33 regiones restantes en menos de dos semanas, culminando el logro con la toma de Kabul el pasado 15 de agosto.
FOTO DEL ÚLTIMO SOLDADO ESTADOUNIDENSE EN SALIR DE AFGANISTÁN, TRAS 20 AÑOS DE GUERRA
El mayor general Chris Donahue, comandante de la 82 División Aerotransportada del Ejército de Estados Unidos -con sede en Fort Bragg, Carolina del Norte-, se convirtió en el último soldado estadounidense en abandonar Afganistán, luego de 20 años de guerra. Minutos antes lo había hecho el embajador Ross Wilson, según reveló, el pasado 31 de agosto, el Departamento de Defensa de EE.UU.
Su partida marcó el fin de una misión de casi dos décadas que comenzó poco después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, en Nueva York. Durante 20 años, más de 800 mil miembros del Ejército de EE.UU. prestaron servicios en el país asiático. La guerra cobró la vida de 2 mil 461 militares estadounidenses, incluidos los 13 miembros del servicio que murieron la semana pasada en un ataque fuera del aeropuerto de la capital afgana.
El Pentágono publicó en su cuenta de la red social Twitter una fotografía del soldado estadounidense, poco antes de abordar un C-17, el avión militar que despegó del Aeropuerto Internacional Hamid Karzai de Kabul, el pasado 30 de agosto, a las 15:29 horas de la costa este de Estados Unidos, y con el que EE.UU. puso fin a la guerra más larga de su historia.
Tomada con un dispositivo de visión nocturna desde una ventanilla lateral del avión de transporte C-17, la imagen color verde y negra del general avanzando a grandes zancadas hacia la aeronave que esperaba en la pista del aeropuerto internacional Hamid Karzai de Kabul.
La 82 División Aerotransportada es parte del XVIII Cuerpo Aerotransportado del Ejército, con paracaidistas, que según su página web, han combatido durante la primera y segunda guerra mundial. El 15 de agosto de 1942, se convirtió en la primera en saltar en Normandía, en Francia, en el llamado “Día-D”.
Además, han combatido en la Guerra del Golfo que duró dos años (de 1990 a 1991). También lucharon durante la invasión de Estados Unidos a Panamá (del 20 de diciembre de 1989 al 3 de enero 1990) y en la guerra en Irak (del 2003 al 2011), entre otras.
“Asombrados por nuestros soldados Sky Drafon. Esta fue una misión increíblemente dura, de presión, llena de múltiples complejidades, con amenazas activas todo el tiempo. Nuestras tropas mostraron valentía, disciplina y empatía. Aquí, una foto del último soldado en abandonar Afganistán”, indicó la 82 División Aerotransportada, en su cuenta de la red social Twittter.
Según la página del Ejército de Estados Unidos, Donahue ha sido desplegado 17 veces en apoyo de operaciones en Afganistán, Irak, Siria, el Norte de África y el este de Europa. En Afganistán fungió como comandante de la Fuerza de Trabajo Conjunta de Operaciones Especiales, en respaldo de la Operación Centinela de la Libertad, la misión posterior a la Operación Libertad Duradera.
In awe of our Sky Dragon Soldiers.
This was an incredibly tough, pressurized mission filled with multiple complexities, with active threats the entire time. Our troops displayed grit, discipline and empathy.
Below is a picture of the last Soldier to leave Afghanistan. pic.twitter.com/LnhBGHUf0M
— XVIII Airborne Corps (@18airbornecorps) August 30, 2021
JOE BIDEN CALIFICA LA EVACUACIÓN DE AFGANISTÁN DE “EXTRAORDINARIO ÉXITO”
Por su parte, el presidente Joseph Biden consideró, el pasado 31 de agosto, la evacuación de más de 124 mil personas como “un extraordinario éxito”. Sin embargo, indicó que quedan de 100 a 200 estadounidenses en el país, a los que su Gobierno está decididos a sacar de Afganistán.
“El 90 por ciento de los estadounidenses que querían irse pudieron hacerlo. [Ahora] no hay fecha límite para salir”, recalcó el mandatario estadounidense, quien luego recalcó que la evacuación fue una “misión de piedad y no de guerra”, en favor de miles de afganos vulnerables y “en medio de una situación llena de riesgos”.
“Solo había una opción, salir del país o una escalada militar […] La decisión de la retirada fue consecuencia de la unánime recomendación de los altos mandos militares y los altos funcionarios del Gobierno, así como de los comandantes sobre el terreno. Abandonar Afganistán fue la mejor decisión posible para Estados Unidos”, señaló.
“No creo que la seguridad y la salvaguarda de Estados Unidos fueran a verse reforzadas por una presencia continuada de nuestras tropas. EE UU ha logrado hacer en Afganistán lo que nos propusimos [neutralizar a Al Qaeda y a Osama Bin Laden]”, enfatizó Biden.
“La decisión sobre Afganistán significa también el fin de una era de grandes operaciones militares para reconstruir otros países […] Me niego a continuar una guerra que no contribuye al interés general de los estadounidenses”, señaló el presidente de EE.UU.
Además, Biden lanzó una clara advertencia al grupo terrorista Estado Islámico de Jorasán (ISIS-K, por sus siglas en inglés9, autor del atentado acontecido el pasado jueves 27 de agosto. “No hemos acabado aún con vosotros”. “Mi decisión es garantizar que Afganistán no vuelve a ser usado como plataforma para lanzar un ataque contra Estados Unidos”, concluyó.
ÚLTIMO AVIÓN MILITAR DE ESTADOS UNIDOS SALE DE AFGANISTÁN, TRAS 20 AÑOS DE GUERRA
El Gobierno de Estados Unidos terminó, el pasado 30 de agosto, su misión en Afganistán tras 20 años de guerra, ello después de la salida de los últimos aviones que transportaron a tropas y personal diplomático del aeropuerto internacional de Hamid Karzai, en Kabul, la capital y la ciudad más grande de dicho país árabe.
Afganistán fue tomado por los talibanes, una facción política y religiosa ultraconservadora que surgió a mediados de la década de 1990, tras la retirada de las tropas soviéticas, el colapso del régimen comunista de dicho país y la posterior ruptura del orden civil.
“El último avión C-17 despegó del aeropuerto de Kabul el 30 de agosto […] Estoy aquí para anunciar el fin de nuestro retiro de Afganistán”, anunció el jefe del Comando Central (CENTCOM, por sus siglas en inglés), el general Kenneth Frank McKenzie Jr., en una rueda de prensa desde el Pentágono de EE.UU.
La agencia francesa AFP informó que se escucharon disparos en Kabul tras el anuncio de la salida de los militares de Estados Unidos, hechos desde distintos puestos de control talibanes, así como la celebración de combatientes en los retenes de la llamada “zona verde”.
La extracción de las tropas y de diplomáticos estadounidenses y afganos que trabajaron para la Embajada de EE.UU. en dicho país, se cumple un día antes de la fecha límite del 31 de agosto que la administración encabezada por el presidente Joseph Biden acordó con los talibanes y luego de 20 años de guerra, la más larga de la historia de Estados Unidos.
Según cifras dadas por la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, más de 120 ml personas fueron evacuadas desde el pasado 14 de agosto, pero la complicada situación de seguridad en el área y el caos en el aeropuerto internacional de Kabul, hizo que quedaran atrás incluso estadounidenses y decenas de aliados afganos.
BREAKING: US has completed efforts to evacuate remaining civilians and troops from Afghanistan, effectively ending the longest war in American history, Pentagon says. https://t.co/RdYLvfum24 pic.twitter.com/x9IkVM8ftt
— MSNBC (@MSNBC) August 30, 2021
Por otra parte, el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), aprobó este mismo lunes 23 de agosto, una resolución respecto a Afganistán centrada en la salida segura de los afganos del país, la ayuda humanitaria y el rechazo del terrorismo, que contó con la abstención de China y Rusia.
El propio secretario general de la ONU, António Guterres, se implicó en las negociaciones para conseguir un texto apoyado por los quince miembros del consejo, y se reunió sin éxito con los cinco países permanentes y con derecho a veto, entre ellos EE.UU., Rusia, China, Francia y Reino Unido.
“Esta reunión con los cinco países, de esta tarde, debe ser vista como una extensión de sus buenos oficios para intentar unir a la comunidad internacional en el Consejo de Seguridad”, dijo el portavoz de Guterres, Stephan Dujarric, en su rueda de prensa diaria.
Según lo informó la Casa Blanca esta mañana, citada por el diario estadounidense The New York Times, durante las últimas 24 horas, unas mil 200 personas fueron evacuadas por Estados Unidos. “Pero eso deja al menos a 100 mil personas atrás, según estimaciones, y posiblemente muchas más que podrían ser elegibles para visas”, indicó el rotativo.
“Ahora, estas personas se encuentran en un Afganistán bajo completo control del Talibán. Muchos de ellos son traductores que trabajaron con el Ejército de Estados Unidos y ahora temen ser asesinados por los talibanes por haber ayudado a sus rivales”, agregó el diario neoyorquino.
“Estados Unidos y otros 97 países han dicho que continuarán evacuando a personas que quieren salir de Afganistán y que han logrado un acuerdo con los talibanes para permitir el paso seguro de los que planean salir. El jefe negociador de los talibanes, Sher Mohammed Abas Stanekzai, dijo el viernes [27 de agosto] que el grupo no impedirá que las personas se vayan, sin importar su nacionalidad o si han trabajado para Estados Unidos durante la guerra de 20 años”, detalló el rotativo.
El general McKenzie dijo hace unos días a los periodistas que el Pentágono cree que se pudo evacuar a la “gran mayoría” de estadunidenses, pero que sabía que algunos no podían hacerlo y admitió “no haber podido evacuar a tanta gente como quería”.
El Jefe del Comando Central de EE.UU. agregó que en los últimos vuelos desde Afganistán “no pudimos sacar a ningún estadunidense”. Los últimos civiles de Estados Unidos fueron evacuados unas 12 horas antes de que se fueran las Fuerzas Armadas de dicho país.
McKenzie insistió que el esfuerzo por sacar a los ciudadanos de EE.UU., ahora recaerá en los canales diplomáticos. A principios de este mes, el presidente Biden prometió que Estados Unidos permanecería en Afganistán hasta que pudiera sacar a todos sus ciudadanos del país. “Si quedan ciudadanos estadunidenses, nos quedaremos hasta que los saquemos a todos”, dijo el mandatario a la cadena ABC News.