Los maestros estallaron ante la repentina decisión que cambió todo en una semana: el regreso a clases estaba programado, pero no con la presencia obligatoria de todos los alumnos, como lo ordenó el flamante gobernador Víctor Castro Cosío. Ahora, menos del 10% de los inmuebles reabrieron sus puertas en un sistema que, de inicio, descarta la educación en línea
Casi de inmediato a la toma de protesta del gobernador Víctor Castro Cosío, la primera bola de nieve de la administración se formó de cara al regreso a clases presenciales.
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Desde agosto, personal docente inició actividades para preparar protocolos para un sistema de enseñanza híbrido, sin embargo, la titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Alicia Meza Osuna, comunicó un cambio de último momento en las reglas del juego.
Según declaraciones de la funcionaria, la educación en línea fue descartada y el regreso a clases presenciales se convirtió en obligatorio.
Sobre el sistema mixto, que contemplaba la enseñanza en aula y en línea para quienes no asistan a las escuelas, afirmó que las y los docentes no tendrán que comunicarse con estudiantes que no asistan a clases presenciales, ya que la obligación es la presencialidad.
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Con siete días de anticipación, Meza Osuna informaba a la población que el 20 de septiembre darían inicio con el retorno a los salones, tras año y medio de suspensión por la pandemia derivada de la enfermedad COVID-19.
Las que fueran sus primeras declaraciones como titular de la SEP, sembraron confusión e incertidumbre entre las y los maestros de educación preescolar y básica, así como en padres y madres de familia.
Las dudas corrieron como pólvora, puesto que sobraba evidencia de cientos de inmuebles que no cuentan con los servicios básicos necesarios para mantener los protocolos sanitarios y recibir a todo el alumnado.
DOCENTES EXIGIERON REGRESO SEGURO
A pesar de que las expresiones en contra de la disposición se hicieron notar en redes sociales y medios de comunicación, el Gobierno del Estado y la SEP no dieron marcha atrás.
Personal educativo que integra el Movimiento Magisterial realizó una manifestación en las instalaciones de la SEP La Paz, donde reclamaron que las autoridades los estaban enviando al ruedo y cambiando protocolos y esquemas de trabajo con poco margen para maniobrar nuevas estrategias.
El primer punto abordado: no existen condiciones de infraestructura para salvaguardar la salud de los menores de edad.
Cientos de planteles se encuentran sin energía eléctrica y sin servicio de agua potable, debido a que, en algunos casos, fueron víctimas de la delincuencia y en otros simplemente no hubo mantenimiento.
Edna Higuera Montes, integrante del Movimiento Magisterial, señaló que hay desconocimiento por parte de las autoridades de la realidad de las escuelas, ya que las cifras no concuerdan con la situación que atraviesan.
En tanto, Jesús Ignacio Campoy Navarro, representante de la manifestación, calificó el regreso a clases obligatorio como una imposición, ya que en las últimas semanas el personal docente estuvo trabajando para un esquema híbrido.
Enfatizó que no se niegan a regresar a clases, sino que simplemente están luchando por condiciones más seguras tanto para los menores de edad, como para la plantilla laboral de cada inmueble escolar.
Para mantener las medidas sanitarias, mencionan los manifestantes, las escuelas con suerte recibieron un kit de limpieza que no durará ni una semana: hasta tres bolsas de jabón, tres botes de desinfectantes, trapeador y escoba.
No obstante, reportes de otras escuelas indican que las y los maestros tuvieron que cooperar para adquirir estos insumos que ahora son indispensables. Otras historias narran cómo los vecinos colaboraron para comprar las herramientas de limpieza.
La Asociación de Padres de Familia de Baja California Sur también se ha unido a las manifestaciones, recalcando que el regreso total a clases presenciales debe aprobarse hasta que los menores sean vacunados contra la COVID-19.
Cifras de la asociación apuntan a que menos del 5% de los padres y madres de familia tienen intención de mandar a sus hijos e hijas a clases.
De acuerdo con información proporcionada por la SEP, más de 102 escuelas no cuentan con electricidad ni agua potable. Para rehabilitar los inmuebles, se requieren más de 60 millones de pesos.
Antes de dejar el cargo de secretario de Educación, Gustavo Cruz Chávez informó que se hicieron gestiones ante el Gobierno de México para conseguir el recurso extraordinario, mientras tanto, en el proceso de transición se acordó la aplicación de 50 millones de pesos para cubrir las necesidades de las escuelas, recurso proveniente del Fondo de Aportaciones Múltiples.
Tras las manifestaciones, la secretaria de Educación reiteró que no habría marcha atrás en la decisión. En caso que las y los tutores de menores decidan no enviar a los menores a las escuelas, no garantizan que el personal docente tendrá internet en los planteles para la educación en línea.
Para el alumnado que no vaya a clases presenciales, declaró que la Secretaría de Educación Pública federal tiene programas a distancia que se transmiten por televisión y radio.
Sobre cómo serán evaluados los estudiantes, mencionó que sólo cuando se presenten en la escuela se les calificará para la ubicación del grado que les corresponda cursar.
“Eso es lo que no garantizamos: conectividad en todas las escuelas. Eso debió hacerse con anticipación y no se hizo, hay lugares donde no hay conectividad y no hay modo de poderlo hacer”, expuso
.
“Tenemos que ir abriendo las escuelas y darle a la presencialidad el lugar que tiene, todos estamos en riesgo, todos tenemos temores, pero tiene que irse normalizando la vida. La principal condición es que tenga agua y la mayoría tienen las condiciones, pero no siempre hay agua en las colonias”, insistió.
Informó que el uso del uniforme no será obligatorio y todas las escuelas tendrán lavabos en las entradas, también aplicarán gel antibacterial al ingreso al plantel y al salón. No habrá recreo, al menos no de la forma tradicional.
Para contrarrestar las temperaturas del verano, de utilizar el aire acondicionado, el salón deberá permanecer con las ventanas abiertas.
En cuanto al número de alumnos, serán divididos en grupos pequeños, a los que se asignarán dos días a la semana para clases presenciales.
ESCUELAS SIN LUZ Y AGUA NO ABRIRÁN: SSA
En medio de manifestaciones y la confusión que ocasionaron las declaraciones de Alicia Meza, la titular de la Secretaría de Salud (SSA), Zazil Flores Aldape, aclaró que, por decisión del Comité Estatal de Seguridad en Salud, las escuelas sin agua y sin energía eléctrica no regresarían a clases presenciales el 20 de septiembre.
“Es importante entender que una escuela que no tiene agua y no tiene luz no puede abrir, entonces, eso significa que el regreso a clases será gradual, dependiendo de estas condiciones. Evidentemente depende de que la escuela haya conformado su consejo participativo, de que tengan todo lo necesario para hacer la limpieza en sus salones y se cuente con estos dos servicios básicos”, respondió la funcionaria.
Precisó que se contabilizan mil 327 escuelas de nivel básico en BCS, de estas, más de mil han sido inspeccionadas en autoevaluaciones. Una de estas arrojó que el 80% de los inmuebles ya cuentan con servicios básicos.
Flores Aldape recordó que ahora que la educación es considerada actividad esencial, no habrá cierre de escuelas, aunque el Semáforo de Alerta Sanitaria llegue a Rojo en algún municipio de la entidad.
141 ESCUELAS INICIARON ACTIVIDADES
Pasó la última semana de protestas y confrontaciones, llegó el día del retorno a las aulas. El 20 de septiembre, se confirmó que 141 escuelas de nivel preescolar, primaria y secundaria iniciaron clases presenciales, la mayoría en La Paz y Los Cabos.
De acuerdo con el listado publicado en la página de la SEP de Baja California Sur, el mayor porcentaje de inmuebles que abrieron, corresponden al sector privado.
“Lo hemos iniciado sobre todo de manera bien y de forma segura y organizada, así como se están haciendo los protocolos en esta escuela, con los protocolos para cuidar a los alumnos. Es un gusto que iniciará un proceso largo, pero será necesario ir normalizando hasta donde se pueda la vida escolar”, comentó la secretaria de Educación.
El primer corte de la SEP indica que han regresado a clases presenciales alrededor de 4 mil alumnos en todo Sudcalifornia. Cabe recordar que en la entidad hay 240 mil estudiantes y más de 13 mil docentes.
PARA OCTUBRE, TODAS LAS ESCUELAS ESTARÁN EN CLASES: GOBERNADOR
El gobernador del Estado, Víctor Castro Cosío, prometió que la reapertura de los edificios educativos será gradual, priorizando la salud de toda la población.
Ante las inquietudes por la bioseguridad, hizo hincapié en que, recientemente, el Gobierno de México colocó a Baja California Sur en Verde en el semáforo nacional. Si la tendencia de los contagios continúa a la baja, el indicador estatal también llegará a Verde en octubre y, a medida que mejoren las condiciones de la pandemia, el alumnado podrá regresar a las aulas con mayor confianza.
Castro calcula que, si Baja California Sur llega a semáforo Verde, sería posible que para mediados de octubre todos los planteles ya operen en esa modalidad. Para el mandatario, la presión real no son las clases presenciales, sino resolver el problema de salud que provocó la pandemia.
“Es tan importante el municipio menos poblado como el más poblado, por eso detuvimos el semáforo, por los municipios del Norte, respetándolos para no declarar algo que no es realidad. Para nosotros la pandemia sigue haciendo estragos en todo el Estado, particularmente en estas zonas que les mencioné”, finalizó.
