En un acto que ofreció el miércoles primero de septiembre de 2021, a propósito del estado que guarda la administración pública a tres años de que Morena se erigiera como partido en el poder, el Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador aseguró que ha erradicado las viejas prácticas del neoliberalismo que redundaban en corrupción, y que ha llevado bienestar a todos los rincones del país, con programas de apoyo social. Presumió sus proyectos de obra emblemáticos, sus esquemas de estímulos fiscales y mencionó que ya “cumplió” con 98 compromisos de un total de 100 que dio a conocer en 2018, al asumir el cargo. De la tercera ola de COVID-19 o de la cifra inédita de homicidios dolosos durante su sexenio, entre otros aspectos, se abstuvo de proporcionar datos precisos
En su mensaje por el Tercer Informe de Gobierno, emitido el primero de septiembre, el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, se valió de su discurso reiterado contra el neoliberalismo para asegurar que durante su mandato se ha combatido la corrupción y brindado “bienestar” a los sectores más necesitados de la población; pero se abstuvo, otra vez, de proporcionar el dato general de personas desempleadas o en situación de pobreza en la presente administración, así como el número de muertes provocadas por COVID-19 y de homicidios dolosos perpetrados en lo que va de su sexenio, entre otras omisiones.
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En el recinto Benito Juárez de Palacio Nacional, ante integrantes del gabinete federal, el Primer Mandatario además ponderó proyectos de los que ya había dado cuenta y que son característicos de su gobierno, como la construcción del Aeropuerto Felipe Ángeles, el Programa Integral del Istmo de Tehuantepec, el denominado Tren Maya y de nueva cuenta alardeó sobre la estrategia de estímulos fiscales en la frontera norte, puesta en marcha desde el inicio de la administración y con la que, presuntamente, se redujeron los impuestos al Valor Agregado (IVA) y Sobre la Renta (ISR), se homologó el precio de combustibles con respecto al sur de Estados Unidos y procedió un aumento al doble del salario mínimo.
En todo caso la novedad es que desde enero de 2021 se aplica “la misma política de estímulos fiscales” en la frontera sur de la República mexicana, según reportó el Presidente, quien recalcó que Chetumal es zona libre de nuevo.
Igualmente, recurrió al tema de las remesas, al cual ya había aludido en otras ocasiones, como a mediados de 2020 en fase crítica de la pandemia; y mencionó que el dinero que envían quienes por falta de oportunidades abandonan el país, en conjunto con los programas gubernamentales de bienestar, constituye “la esencia” de “la estrategia para enfrentar la crisis” en México. A propósito de los esquemas de apoyo a la población consistentes en “una inyección rápida y directa de recursos a las familias”, sacó a colación la promesa de que para 2024 “la pensión universal para los adultos mayores” incrementará al doble.
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El Primer Mandatario hizo un escueto balance de su desempeño como tal y sostuvo que de los 100 compromisos que hizo el primero de diciembre de 2018, fecha en que tomó posesión de su cargo, ya cumplió con 98. De manera que, según presumió, le resta “descentralizar el gobierno federal y conocer toda la verdad acerca de la desaparición de los jóvenes de Ayotzinapa (ocurrida en 2014)”.
Afirmó que “sería muy difícil de dar marcha atrás a decisiones o acciones que se han tomado por el bien del pueblo y de la nación”, y no desaprovechó la ocasión para referirse al proceso de revocación de mandato contemplado para 2022, sin mencionarlo de manera precisa: “estoy seguro que la gente va a votar a finales de marzo del año próximo porque continúe mi periodo constitucional hasta finales de septiembre de 2024”.
CONTRA LAS PRIVATIZACIONES Y CONDONACIONES
El Presidente de la República estimó que “es necesario seguir poniendo al descubierto la gran farsa neoliberal” y opinó que en su administración se están “desterrando vicios y prácticas deshonestas en el manejo del gobierno”. Dijo que para ello “una medida decisiva fue parar en seco la tendencia privatizadora”.
A decir del Primer Mandatario ha sido de gran relevancia, detener “las privatizaciones en el sector energético, en petróleo y electricidad”.
López Obrador presumió la compra de una parte de la refinería Deer Park, ubicada en Houston, Texas (teniendo en cuenta que durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari Petróleos Mexicanos se asoció con Shell para compartir el complejo).
“Se cerró la operación con un costo de 596 millones de dólares, ahora la refinería será propiedad total de Pemex y su producción de gasolinas y diesel y otros combustibles -150 mil barriles diarios-, se destinarán al abasto del mercado interno de nuestro país”, resaltó en alusión a una instalación que, de acuerdo con información difundida, conlleva un arrastre de pérdidas ascendente a 360 millones de dólares en lo que va de 2021 (más de la mitad de lo que costó la nueva adquisición), en razón de la nevada que se registró en Texas en febrero, la cual obligó al cierre temporal de la fábrica.
AMLO señaló que en los dos sexenios anteriores 58 grandes contribuyentes dejaron de pagar 189 mil 018 millones de pesos y que en la presente administración ya “no existe el ofensivo privilegio de las condonaciones”. Aseveró que se están cobrando deudas vencidas y que el fraude fiscal no se tolera. “Esto es posible cuando se actúa con integridad y honradez”, asentó. La afirmación del Presidente se contrapuso a señalamientos emitidos por la Organización Nacional Anticorrupción, instancia que el 26 de febrero publicó -vía red social- que el Servicio de Administración Tributaria, a cargo de Raquel Buenrostro Sánchez, “condonó 293 millones de pesos en el segundo trimestre de 2021”, con lo que se vieron favorecidos “Carlos Slim, Carlos Hank González, el periódico La Jornada, entre otros”.
CREACIÓN DE EMPLEOS
El Primer Mandatario afirmó que con el desarrollo de los proyectos Aeropuerto Civil de Santa Lucía Felipe Ángeles, Programa Integral del Istmo de Tehuantepec (destinado a la articulación de puertos, trenes) y el Tren Maya (con mil 500 kilómetros aproximadamente de recorrido por el sureste del país) se “están generando 143 mil 137 empleos directos y 277 mil 049 indirectos”.
También dijo que “posterior a la pandemia se han creado un millón 202 mil 691” plazas de trabajo y que sólo faltan 192 mil 713 para recuperar a los asegurados que había en el Instituto Mexicano del Seguro Social (Imss) antes de la crisis sanitaria y que sumaban 20 millones 613 mil trabajadores.
Sostuvo que 30% de mexicanos que no tienen acceso a algún programa de apoyo del gobierno federal gozan de “condiciones para seguir progresando y vivir en paz”.
No obstante, de acuerdo con el último dato al respecto emitido el 26 de agosto por el Instituto Nacional del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), “la población desocupada” a nivel nacional estriba en “2.6 millones de personas”, lo cual implica “una tasa de 4.4 de la PEA (Población Económicamente Activa)”.
El líder de la bancada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados, Alejandro Moreno Cárdenas, le reprochó a López Obrador a propósito de su Tercer Informe, que a raíz de la propagación del coronavirus se hayan perdido “12 millones de empleos” y que en la República mexicana haya “72 millones de pobres”.
El dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés Mendoza, señaló el mismo miércoles primero de septiembre, que “los programas sociales fracasaron” y que en este sexenio hay “casi 4 millones de nuevos pobres”.
Conforme a información del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, de haber 51.9 millones de personas en situación de pobreza en 2018, para 2020 el número se elevó a 55.7 millones.
PROGRAMA NACIONAL DE VACUNACIÓN
López Obrador indicó que la estrategia para mitigar el riesgo de contagio de COVID-19 “ha funcionado con eficacia y ha llegado a todos los pueblos” del país.
“Hasta hoy hemos recibido 103 millones 296 mil 665 dosis de vacunas Pfizer, Sinovac, Sputnik, AstraZeneca, Johnson & Johnson, CanSino y Moderna, de farmacéuticas y gobiernos extranjeros que han demostrado con hechos su solidaridad con México y con su pueblo, destaco el apoyo de Cuba, de Argentina, Rusia, China, India y Estados Unidos”, expresó.
Habló de que 65% de la población, mínimo cuenta con una aplicación de vacuna y se comprometió a que en octubre “la totalidad de los habitantes mayores de 18 años tendrán cuando menos una dosis a fin de que lleguemos mejor protegidos al invierno”.
Manifestó que actualmente hay menos personas hospitalizadas por la enfermedad respiratoria y se registra una reducción considerable en el índice de letalidad. De ahí que celebrara que el 30 de agosto comenzara “el nuevo ciclo escolar con la participación de entusiasta de maestras, maestros, madres y padres de familia, así como 11 millones de niñas y niños y adolescentes que, luego de 18 meses, regresan a recibir clases presenciales”.
En su posicionamiento sobre el Tercer Informe, el diputado priista Moreno Cárdenas le recriminó al primer mandatario que “259 mil muertos por la pandemia” constituyen una señal “del peor momento en la historia de México, de una conducción errática, de un gobierno ausente y del frágil equilibrio en el que se encuentra inmersa la república”.
Además, le criticó que no haya medicinas para “20 millones de niños” y que exista una escasez de medicamentos para menores de edad con cáncer.
AMLO presumió récords en “remesas” e “incremento al salario mínimo”, entre otros rubros, incluso comentó que ello le daba pie “para decirle a los tecnócratas neoliberales: tengan para que aprendan”. Sin embargo, en términos de contagios de COVID-19, el país igualmente obtuvo récord, cuando en plena tercera ola de la pandemia, el 12 de agosto, la Secretaría de Salud reportó 24 mil 975 nuevos casos registrados en un sólo día.
Por otro lado, en materia de remuneración económica la población con percepción de un salario mínimo incrementó 2 millones 608 mil 748 en junio, en comparación con el mismo mes del año anterior, de acuerdo con resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo.
“PEQUEÑA DISMINUCIÓN” EN HOMICIDIOS
En materia de combate a la delincuencia, López Obrador profirió que, derivado de las reuniones diarias que sostiene el Gabinete de Seguridad, el robo de combustibles se redujo en 95 por ciento, los homicidios en 0.5 por ciento, el robo de vehículos en 28 por ciento, el secuestro en 18 por ciento.
Admitió que de 11 delitos considerados de alto impacto, el feminicidio creció 13%, la extorsión 28 por ciento y el robo en transporte público 12 por ciento.
Refirió que el 27 de julio el INEGI dio a conocer que “el dato de homicidios registrados en 2020, como en 2019, refleja que ya se detuvo la tendencia ascendente en este delito e inclusive se ha logrado una pequeña disminución”; ello con el pormenor de que la cantidad de asesinatos perpetrados en lo que va de la administración de AMLO ya superó los que se cometieron el mismo periodo en los dos sexenios anteriores, tal como dio a conocer ZETA en su edición del 27 de agosto.
De acuerdo con este Semanario, en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa se cometieron del 1 de diciembre de 2006 al 31 de julio de 2009, 42 mil 769 homicidios dolosos; en el de Enrique Peña Nieto, entre 2012 y 2015, mismo periodo, 57 mil 410, y en el de López Obrador (2018-2021, mismo periodo), 91 mil 919.
AMLO fue discreto en el tema de la inseguridad. Sólo en dos ocasiones mencionó la palabra “homicidios”, pero de su política de “abrazos, no balazos”, ni una palabra.
NO PERSECUCIÓN
En términos de posturas políticas, aseguró que en su gobierno “no se fabrican delitos ni se persigue o espía a opositores”. Perspectiva que difiere con las acusaciones de los partidos Acción Nacional, Revolucionario Institucional y de la Revolución Democrática, los cuales el 23 de agosto acusaron ante la Organización de Estados Americanos (OEA) que en México el gobierno utiliza de manera facciosa las instituciones para perseguir a adversarios políticos, hostiga al Instituto Nacional Electoral (INE) y al Tribunal Electoral, e igualmente incurre en persecución a medios masivos y líderes de opinión.
“VAMOS BIEN”
Para finalizar su discurso, AMLO dijo “vamos bien”. Expuso que sin el afán de ser soberbio, considera que de tener suerte y terminar su mandato él y su equipo de colaboradores consumarán “la obra de transformación”, sin dejar pendiente alguno.
“Cuando esté entregando la banda presidencial, sólo diré a los cuatro vientos: misión cumplida”, remató con todo y que aún le faltan tres años para concluir en el cargo.
