Sin necesidad de comprobante de esquema de vacunación, prueba negativa de Covid-19, y mucho menos previo registro en línea, centenas de personas han podido adquirir pulseras activadas para ingresar al Baja Beach Fest, donde personal del evento que porta camisetas azules con el logo del encuentro de reggaetón y el título ‘Familia’ en la espalda, ofrecen los accesos en las inmediaciones del Papas & Beer por un costo de 400 dólares.
Pese a que organizadores del festival y autoridades del Ayuntamiento de Playas de Rosarito aseguraron se realizarían innovadores protocolos para justificar la reunión masiva, en la práctica se ofertan, fuera de la zona de taquilla, accesos sin requisitos sanitarios.
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“¿Quieres pulsera para el after party…, o para el concierto, valen $400 dólares. Ya están activadas, nomás pasas y te vas…”, especificó a ZETA personal del evento que porta camisetas azules. En el recorrido del semanario por el lugar se pudo atestiguar como algunas personas sí adquirieron sus accesos sin mero trámite, de forma sencilla y rápida, a cambio de efectivo, y sin necesidad de comprobantes.
De dicha manera, el festival internacional urbano desarrolla la primer jornada de su segundo fin de semana consecutivo, tras la polémica desatada en redes sociales y medios de comunicación nacional debido a la afluencia masiva, el desuso del cubrebocas durante el evento, justificado como ‘cuestión cultural’, y la inexistente sana distancia.
Con el aval de las autoridades locales y estatales, Baja Beach Fest continúa celebrando el mega festival de tres días, en su primera serie de conciertos encabezados por los artistas globales DJ Luian, Mora, Dalex, El Alfa, Lunay, Karol G y Ozuna, con un conglomerado que rebasa los 19 mil asistentes, quienes abarrotaron hoteles, restaurantes y bares de la zona.
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“En promedio estamos gastando unos 1 mil 600 dólares por persona, y mucho dinero en bebidas. Hay muchos usando cubrebocas, otros que no lo usan, pero no les dicen nada. De cada 10 personas, 4 no lo usan, confío en que todos están vacunados, y tomando precauciones, pero hay mucha gente”, señaló una de las asistentes al semanario.
En cuanto a los protocolos, la semana pasada en conferencia de prensa, Aracely Brown, Presidenta Municipal de Playas de Rosarito, resaltó que iban prestar atención a las áreas donde hubiera fugas en cuanto al reglamento de salud y sanidad impuesto por la Secretaria de Salud del Estado, sin embargo, todo los protocolos se concentran al acceso principal, y después la permisividad gobierna sobre la arena.
En el recorrido por las inmediaciones del festival, ZETA observó que la gran mayoría de los visitantes portaba cubrebocas, así como personal de staff con letreros indiciando al uso de la mascarilla, mientras que en la entrada de la zona turística fueron colocados stands donde se ofrecía gel antibacterial y cubrebocas por parte del equipo del ayuntamiento, sin embargo, la gran afluencia y la nula sana distancia sigue representando un reto para las autoridades. Cabe resaltar que elementos policiales mantiene restringida parte de la playa y sin acceso a los ciudadanos que no acude al evento.
