Todo inicia con un mensaje aparentemente inofensivo que dice: “Ocupo un favor tuyo, cuando puedas escríbeme”.
Pero resulta que el emisor, no es quien supones -alguien de tu confianza-, sino que se trata de un ciberdelincuente, comúnmente llamado hacker, quien tratará de aprovechar la confusión para robar dinero.
Lo siguiente es causa de un gran desasosiego para quien “le hackearon” el teléfono, angustiando también a sus cercanos.
Para que haya “hackeo”, se necesita, por un lado, un delincuente, pero, por otra parte, una víctima.
De los hackers, igual que de los extorsionadores telefónicos, se puede decir mucho; en concreto, se trata de personas inteligentes, pero que han usado ese talento para cometer delitos. Seguramente tienen mucho tiempo libre y lo emplean para estar pensando y poniendo en práctica diversas formas para engañar víctimas de alguna manera.
De los afectados también se puede decir mucho, pero el común denominador es que dejaron abierta una brecha y esto fue aprovechado por los delincuentes.
Además de que los perjudicados son buenas personas, dado lo ocupado que están, sumado a no haber atendido determinadas recomendaciones para evitar caer en las manos de los pillos, en algún momento los sorprenden con la guardia baja.
Sin embargo, más allá de las circunstancias en que se dio el ataque, lo importante es “blindarse” para que la mala experiencia deje algo bueno; como es que el afectado comparta lo vivido, para que sirva de prevención o “vacuna”, para que otros no caigan en las garras de los criminales.
No es consuelo para las víctimas, pero el problema es universal. Y de los hackers no se salva ningún sector.
Para la Real Academia de la Lengua Española, en castellano se escribe “jáquer”, proveniente del inglés hacker y tiene dos definiciones:
1.- Pirata informático.
2.- Persona con grandes habilidades en el manejo de computadoras que investiga un sistema informático para avisar de los fallos y desarrollar técnicas de mejora.
Un caso tristemente célebre, es el difundido a través de Xataka (xataka.com/seguridad/hackers-han-ganado-han-hecho-publico-su-surrealista-negociacion-compania-cwt-ha-sido-exhibida-chat), en donde se publicó lo siguiente:
“El ransomware Ragnar Locker parece tener una eficacia casi quirúrgica. Este software malicioso pertenece a una categoría de programas dañinos, conocida como malware de rescate, y su estrategia es bien conocida: cuando infecta un ordenador o toda una red, cifra sus archivos para impedir que su legítimo propietario pueda acceder a su contenido. Para recuperar el control de la información y volver a la normalidad la víctima se ve obligada a pagar un «rescate» en una criptomoneda, con el propósito de que la transacción no pueda ser rastreada”.
“Esto es, precisamente, lo que ha sucedido hace solo unos días a CWT, una compañía estadounidense de gestión de viajes de negocios y eventos que ha sido puesta en jaque por uno o varios piratas informáticos que han conseguido infectar con el ransomware Ragnar Locker su red. Conocemos cuánto pedían inicialmente los hackers, cómo ha sido la negociación y cuánto dinero en bitcoines ha pagado finalmente CWT, pero lo más sorprendente es que toda su conversación ha quedado registrada en un chat que finalmente ha sido exhibido en Twitter”.
Al parecer, finalmente la negociación se cerró acordando que CWT pagaría 4,5 millones de dólares en bitcoines por el rescate de sus datos.
Los daños causados por los hackers son incalculables. En El País (elpais.com/tecnologia/2020-07-26/asi-es-el-ciberataque-que-mantiene-totalmente-paralizada-a-garmin.html), se expone que, en el año 2019, el Departamento del Tesoro estadounidense cuantificó en más de 85 millones de euros el daño.
En el año 2020, los hackers paralizaron a Garmin, la famosa plataforma de control del ejercicio y posicionamiento por GPS, a quienes pidieron 8.5 millones de euros por detener el secuestro de datos que los mantuvo afectados por días.
Todo es cuestión de cuidarse de los hackers.
Alberto Sandoval ha sido educador de adultos, profesor de bachillerato, catedrático universitario, servidor público, conferencista, deportista y activista ciudadano.
Correo: AlbertoSandoval@AlianzaCivil.Org Internet: http://albsandoval.blogspot.com/
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