A poco más de 4 meses de que concluya su gestión, el mandatario estatal de Baja California, Jaime Bonilla Valdez, mandó al Congreso del Estado una iniciativa para suprimir el financiamiento público a partidos políticos, presupuesto que según informó el gobierno del estado, este año ascendió a más de 148 millones de pesos.
El secretario de gobierno, Amador Rodríguez Lozano argumentó que la iniciativa enviada por el titular del Poder ejecutivo, obedece a la política de austeridad implementada por Bonilla Valdez en razón de haber recibido “un estado financieramente quebrado”.
El funcionario estatal estimó que de seguir otorgándose el financiamiento a las fuerzas políticas “en los próximos dos años le costaría al pueblo de Baja California casi 250 millones de pesos”.
También expuso que la Constitución General de la República contempla presupuesto público federal para los institutos políticos sin que ello implique que las entidades federativas estén obligadas a regular esa medida al ámbito local.
Con ese argumento y de proceder la iniciativa de ley, los partidos políticos nacionales que perdieron registro en el actual proceso electoral, se verían imposibilitados de recibir recurso público en Baja California. Tal es el caso de Encuentro Solidario, que a nivel nacional se quedó sin derechos partidistas por no lograr el porcentaje mínimo requerido de votos (3%).
“Hoy hay una nueva realidad, exige que los partidos políticos no reciban ya un financiamiento por parte del Estado y esto colocará, en caso de aprobarse por los diputados en el Congreso del Estado, a Baja California nuevamente como puntero en la transformación de la vida nacional”, asentó Rodríguez Lozano.
Se dijo confiado en que el Grupo Parlamentario de Morena en el Congreso del Estado apoyará el proyecto legislativo, propuesta que a su modo de ver es acorde a la visión política del presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador.