Los cuatro detenidos eran jefes de almacén de ISESALUD ubicado en Maneadero
Un Juez de Control determinó auto de vinculación a proceso penal en contra de cuatro sujetos involucrados en el delito de Peculado, tras disponer de más mil 633 cajas con fentanilo inyectable, propiedad del Instituto de Servicios de Salud Pública (ISESALUD).
En un comunicado emitido este jueves 18 de mayo, la Fiscalía General del Estado (FGE) informó que fue a través de la investigación realizada por la Unidad de Delitos Patrimoniales de la Fiscalía Regional de Ensenada, que se obtuvo información de quienes participaron en el ilícito identificados como Carlos Alejandro “N”; Gerardo Antonio “N”, Lorenzo “N” y Bladimir “N”.
Los cuatro eran jefes de almacén de ISESALUD, en instalaciones ubicadas en Maneadero, avenida Ruiz y Vicente Guerrero.
Los datos de prueba arrojan que durante el periodo de enero a diciembre del año 2018, los imputados dispusieron de mil 633 cajas de fentanilo; cada caja contiene seis ampolletas con solución inyectable de 0.5 mg.
Los empleados tenían la tenencia, más no el dominio de los medicamentos, por lo que con este delito transgreden la debida prestación de un servicio público y los principios de legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad y eficiencia que rigen, advirtió la fiscalía. También contribuye al incremento de los riesgos contra la salud pública y por ende a la posible comisión de conductas competencia de la federación.
El Juez de Control dictó auto de vinculación a proceso a los imputados por el delito de Peculado en perjuicio de la institución de salud; se concedieron tres meses para el plazo de la Investigación que vence el 20 de agosto del 2021.
Con estos hechos se evita la distribución de drogas duras altamente letales en Baja California, como lo es el fentanilo, utilizado para fabricación de droga sintética altamente adictiva.
La posesión, consumo o distribución ilegal de fentanilo, representa una amenaza que impacta a la salud y la seguridad pública, ya que es 50 veces más peligroso que la heroína y hasta 100 veces más que la morfina; debe ser administrado bajo supervisión médica en pacientes terminales o padecimientos como el cáncer, entre otros.