Persona privada de la libertad muerta; más de 30 detenidos y de 40 armas de fuego
El recuento de la balacera registrada durante la mañana en la ciudad de Guadalajara arrojó un saldo de dos presuntos delincuentes muertos, una persona privada de la libertad sin vida, otras seis secuestradas fueron rescatadas, hay más de 30 detenidos y 40 armas de fuego aseguradas.
Así lo informó el fiscal de Jalisco Gerardo Octavio Solís Gómez, quien aseguró que habrá una actualización de los datos con posterioridad, pues los peritos y personal ministerial continuarán procesando los indicios que se hallan en tres inmuebles y las calles vinculadas con los hechos.
El funcionario señaló que, al menos en la vía pública, en una sola de las calles, se fijaron más de 70 casquillos percutidos por armas largas, pero que el número aumentará al terminar con las pesquisas en los domicilios y otra rúa.
También confirmó que hay más de 30 personas a disposición del Ministerio Público y son 40 armas cortas y largas, así como otros objetos, los asegurados hasta el momento.
Aunque la Fiscalía todavía trata de dar orden al servicio, que tuvo dos fincas como escenarios principales, Solís Gómez dijo que en la primera residencia de la avenida Chapalita, fue en donde se registró la agresión inicial a los policías municipales que verificaban un reporte de personas sospechosas.
Una mujer que abrió la puerta de la casa para señalar que todo estaba en orden, fue la que cubrió la huida de sus cómplices por las azoteas y comenzó la balacera. La presunta agresora resultó herida y dos hombres fueron abatidos por los uniformados.
Al huir algunos de los sospechosos por la azotea hacia la calle trasera se introdujeron en un segundo domicilio, donde estaban más sujetos armados y fueron localizadas siete personas privadas de la libertad, una de ellas muerta, maniatada y vendada de los ojos. Al parecer con pocas horas de evolución cadavérica.
En el inmueble, además de ser detenidas, más de 24 personas, entre ellas varias mujeres, entre las que figura una jovencita de aproximadamente 17 años, se localizó el armamento y chalecos antibalas.
Una tercera finca contigua a esta última, al parecer en ruinas, también forma parte de la investigación relacionada con los hechos, en los que se advierte la presencia de la delincuencia organizada, aunque por ahora no se ha revelado a cuál organización criminal pertenecen los detenidos.