Hechos incumplen promesa del Presidente López Obrador de no aumentar combustibles. En el transcurso de su sexenio, la gasolina regular aumenta 6.37%, gasolina Premium 5.35%, diésel 3.42% y el gas, más del 20%. Baja California reporta precios de gas LP por encima del promedio nacional, mientras que el alza a las gasolinas acelera la inflación en la entidad, advierte especialista
El 15 de marzo, el Presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró su compromiso de no aumentar los precios de los combustibles en México en términos reales, “llueva, truene o relampaguee”; sin embargo, datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) indican que en lo que va de 2021, el precio promedio de los combustibles (gasolinas, diésel y gas) se encareció entre 10.22% y 19.24%. Rango por encima de la inflación registrada en febrero (3.76% a tasa anual) y en enero pasados (3.24%), así como la reportada en la primera quincena de marzo (4.12%).
El mayor incremento se dio en el precio del gas LP, el precio promedio del kilogramo en el país pasó de 19.92 a 23.71 pesos. Con ello, una familia mexicana desembolsó en promedio 171.55 pesos más por un cilindro de 45 kilogramos, que pasó de 896.4 a mil 067 pesos.
Los consumidores de gas LP surtido en gas estacionario tuvieron que sufragar en promedio 615 pesos más para llenar un tanque estacionario de 300 litros, ya que el litro del combustible se encareció 2.05 pesos (19.24%).
Al 17 de marzo, el precio más alto del combustible en el país se registró en Culiacán, Sinaloa, vendiéndose en 16.03 pesos por litro.
BC, CON PRECIO DE GAS ARRIBA DEL PROMEDIO NACIONAL
En Baja California, el kilogramo de gas LP cuesta 25.88 pesos, 2.17 pesos más que el precio promedio del país; y el precio del gas LP surtido en gas estacionario, hasta 13.98 pesos por litro; 1.28 pesos más que el registrado en el resto del país.
Un consumidor, Jorge González Ramírez, se quejó que “cada vez hay que pagar más”. “Estamos esperando una respuesta del gobierno qué va a hacer, en qué nos puede apoyar, porque la economía también está variando y más con esta pandemia”, dijo.
El presidente de Estudios Económicos de Baja California, Roberto Valero señaló que, en febrero pasado, el precio de este combustible tenía un aumento promedio del 22.15% a tasa anual en la entidad, y se esperaría que al cierre de marzo sea superior a 23%. Mientras el costo del gas natural se elevó 3.3%
Para el analista en economía y energía Ramsés Pech, el encarecimiento del gas LP por kilogramo se debe en parte al incremento en el precio del diésel y las gasolinas, que eleva el costo de operación de las gaseras, mismo que trasladan al consumidor final.
ALZA EN GASOLINAS GENERA ESCALADA DE PRECIOS
A nivel nacional, en el transcurso de 2021 el precio por litro de la gasolina regular ha subido en promedio de 1.89 a 20.37 pesos por litro; el de la Premium tuvo un alza de 2.86 a 21.85 pesos; mientras que el de diésel se encareció 2.02 pesos para comercializarse en 21.45 pesos.
Esto significó que, al 17 de marzo, los consumidores hayan desembolsado 94.5 pesos más por un tanque de 50 litros con gasolina regular que en diciembre de 2020 y 143 pesos más por uno de gasolina Premium.
En el caso de los transportistas, cuyas unidades utilizan diésel, llenar un tanque de 50 litros costó 101 pesos más que al cierre del año pasado.
Según Profeco, una estación de Pemex en Iguala, Guerrero, registró el precio más alto de la gasolina regular (22.30 pesos), aunque la gasolinera con mayor ganancia fue una de Arco ubicada en Magdalena en Sonora (3.53 pesos de ganancia, con un precio al público de 22.09 pesos).
El especialista Roberto Valero explicó que entre los factores que inciden para el encarecimiento las gasolinas y el diésel, está el aumento en el precio del barril de crudo. La mezcla mexicana pasó de 41.16 dólares por tonel en diciembre de 2020 a 59.55 pesos.
Otro es el incremento en la movilidad de las personas una vez que los semáforos epidemiológicos han pasado de Rojo a Amarillo en la mayoría de las entidades federativas.
Adicionalmente, está la actualización del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), así como la logística para trasladar los combustibles, la cercanía y el tamaño de las ciudades de los puntos de almacenamiento y el precio del tipo de cambio, ya que México importa alrededor del 60% de la gasolina que consume.
Valero refirió que, en el periodo referido, en Mexicali la gasolina regular tuvo un incremento cercano al 5%, cantidad superior a la inflación a tasa anual reportada en la capital bajacaliforniana al corte de la primera quincena de marzo (4.39%). “Esta inflación es la más alta en cuatro años, y fue impulsada precisamente por el aumento de las gasolinas”, argumentó.
En el caso de Tijuana, el alza en el precio de la gasolina regular fue de alrededor del 15% a tasa anual, y en el de la gasolina Premium, superior a 12%. Esto provocó que la inflación general de Tijuana tuviera un incremento de 5.95% respecto a la primera quincena de marzo de 2020.
En un recorrido hecho por ZETA el 23 de marzo, se observó que el precio de la gasolina regular osciló entre 19.17 y 19.79 pesos. Mientras la Premium se comercializó en 20.49 y 20.89 pesos.
“Los precios de las gasolinas han estado subiendo y no hay beneficios para nosotros ni para nadie, se supone que es una de las cosas primordiales que debería haber bajado la gasolina, pero al contrario: sube y sube a ver hasta dónde vamos a parar”, reprochó el ciudadano Jaime López.
Aunque el consumidor manifestó que sus ingresos no se vieron tan afectados por la pandemia de coronavirus, sí lo ha hecho el incremento de precios, “ese es otro problema, que todo está subiendo, los productos de la canasta básica están subiendo; a ver a dónde nos lleva este problema, con todo más caro”.
En la primera quincena de marzo, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que los alimentos que más se encarecieron fueron tortilla de maíz (1.79%), huevo (3.87%), tomate verde (17.30%) y limón (11.22%). En el mismo periodo, la electricidad tuvo un alza quincenal de 0.72%.
PEMEX PODRÍA SER EL ESPECULADOR
El lunes 15 de marzo, el Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que el alza en los combustibles -particularmente gasolinas y el diésel- se debe a la especulación de los últimos 30 días, y pidió a los distribuidores no hacer un aumento injustificado.
“Se acabaron los gasolinazos, y es el honor el que está de por medio. Es la credibilidad del gobierno. Es la palabra del Presidente. Entonces, para que nos ayuden como siempre, lo han venido haciendo todos los distribuidores, porque se necesita de la participación de todos y todas”, indicó el mandatario desde Palacio Nacional.
Además, citó que el estímulo fiscal al IEPS que la Secretaría de Hacienda comenzó a dar desde finales de febrero, debe verse reflejado en los precios al público.
Antes, el 11 de marzo, aseguró que el precio de las gasolinas debería ubicarse en el mismo nivel que en 2018, y amagó con quitar concesiones a las gasolineras que no entreguen litro de a litro.
Cuestionados sobre ello, Rubén Márquez Espinoza, presidente de la Asociación de Gasolineros de Mexicali y Alejandro Borja Robles, representante del sector en la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) Tijuana, rechazaron que el aumento en esos combustibles sea por decisión de los propietarios de las gasolineras. En todo caso, la especulación podría darse en las petroleras.
En su opinión, para que baje más la gasolina, el Gobierno Federal debe dar más incentivos fiscales. Explicaron que el importador del combustible paga el IEPS y a ellos les dan el precio final. “En nuestra factura no aparece el IEPS. Nada más el IVA. Con esa base nosotros salimos precio público”, comentó Márquez Espinoza.
Ambos empresarios indicaron en Mexicali y en Tijuana el consumo de gasolina está 25% por debajo del que se tenía antes de la pandemia con todo y que algunos consumidores no pueden cruzar a EUA a cargar combustible. El promedio del ticket oscila entre 100 y 250 pesos.
La mayor repercusión en el precio de los combustibles, es el alza en el precio de la gasolina internacional, por lo que consideraron que el precio de los combustibles “está fuera de las manos” de AMLO.
“No es una cuestión que decida él, que el precio de la gasolina baje porque él prometió que no iba a aumentar. Eso no puede ser, con el debido respeto, no es una decisión de él. Es importante recalcar la situación del país, que somos dependientes de la gasolina importada”, aclaró Borja Robles.
El analista Ramsés Pech argumentó que la especulación posiblemente podría existir en las unidades de almacenamiento y reparto, particularmente en Petróleos Mexicanos (Pemex), que ocupa 80% de ese mercado.
Sin embargo, el propio gobierno es quien más pierde al aplicar los estímulos fiscales, ya que recauda menos por concepto de IEPS. “El año pasado recaudó 299 mil millones de pesos por IEPS, y eso que solamente aplicaron mes y medio el estímulo fiscal, entonces ahorita que está aplicando estímulos, es dinero que no entra a las arcas”, planteó.
El IEPS establecido para 2021 es de 5.1148 (gasolina regular), 4.3192 (Premium) y 5.6212 (diésel). Sin el estímulo fiscal otorgado por la Secretaría de Hacienda, el precio del litro de estos combustibles oscilaría entre los 22.48 y 22.96 pesos.
A la par, el analista estimó que el precio objetivo este año para la gasolina regular es de 20.5 pesos, y de 21.5 pesos para la Premium y el diésel. Cantidades que representan un incremento mayor al 4.64% respecto a 2019, lo que supera el nivel de la inflación objetivo del Banco de México (3% más/menos un punto porcentual).
En función del precio objetivo (estimado), Hacienda ajustará el estímulo fiscal cada semana, por lo que la única variable que puede ajustar el Gobierno Federal para que baje el precio para los consumidores, es aplicar mayor estímulo fiscal o reducir el IEPS, “que no sea tan ambicioso con los impuestos”, sugirió Ramsés Pech.
REFINERÍA DOS BOCAS NO TERMINARÁ CON ALZA
El Presidente López Obrador ha dicho que en 2023, una vez que concluya la construcción de la refinería Dos Bocas, México será autosuficiente y dejará de importar gasolina, con lo que el precio disminuirá. No obstante, los especialistas y empresarios consultados por ZETA consideran que aun con dicha obra, no se logrará el objetivo.
En opinión de Roberto Valero, la intención de López Obrador “es irreal”, ya que “le está apostando a la ignorancia de mucha gente, el Presidente miente y mintió el año pasado, cuando dijo que las gasolinas habían bajado porque él lo había dicho; son declaraciones eminentemente populistas, cortinas de humo para tapar una realidad tremenda: que México trae dos años sin crecer, en los últimos 30 años no había ocurrido algo similar”.