Con el fin de “garantizar la seguridad energética”, la Secretaría de Energía (Sener) restringió a privados la importación y exportación de hidrocarburos estableciendo que la vigencia máxima de los permisos 5 años cuando antes era de 20 años.
Ayer, 26 de diciembre, la dependencia que dirige Rocío Nahlé publicó en el Diario Oficial de la Federación la medida en la que los permisos -de uno a cinco años- podrán prorrogarse una vez por el mismo periodo cuando se termine su vigencia o se agote su volumen.
“Las actividades de la Sener en materia de otorgamiento y supervisión de los permisos previos de importación y exportación de petrolíferos e hidrocarburos se orientarán con base en los objetivos de la política pública en materia energética, incluyendo los de seguridad energética del país, sustentabilidad, continuidad del suministro de combustibles y la diversificación de mercados”, destacó la dependencia.
En opinión del analista en economía y energía, Ramsés Pech, la medida ayudará a las Secretarias de Economía y Hacienda para a tener un mejor control sobre el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a los combustibles que se importen, “en función del volumen que importamos en México de productos de la industria de hidrocarburos, en comunión con el balance que tenemos”.
También se propicia que Pemex invierta en ofrecer las mejores condiciones en las terminales de almacenamiento y reparto, dijo el especialista, quien refirió que datos de la Balanza de productos petroleros en México indican que han importado 25 millones 634 mil 409 millones de dólares y se han exportado 13 millones 905 mil 828 dólares, de enero a octubre de 2020.
Previamente, la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) había recomendado no emitir la norma al considerar que ésta dificultaría “seriamente” la competencia y libre concurrencia en la comercialización de petrolíferos, y afectaría la posibilidad de los consumidores de acceder a más opciones de suministro y mejores precios posibles.