Las autoridades en materia de seguridad en Tijuana y Baja California han afirmado en más de una ocasión que los delitos van a la baja; se apoyan en las cifras de las denuncias que los ciudadanos han interpuesto en los últimos meses, pasando por alto la relación que esto tiene con el confinamiento por el coronavirus
Aunque las autoridades, tanto municipal como estatal, han destacado en los últimos meses una presunta reducción de los índices delictivos en Tijuana, la ciudadanía muestra otra realidad a través de las denuncias que realiza en redes sociales y asociaciones civiles respaldan esto, al asegurar que la reducción es meramente artificial.
En varios grupos de Facebook se han documentado robos violentos de vehículos, asaltos a comercios, e incluso la intromisión de delincuentes a casas habitación en distintas zonas de la ciudad; igual pasa en los fraccionamientos ubicados en el centro de la ciudad, como en las colonias de la periferia.
Un caso reciente ocurrió la tarde del pasado 26 de septiembre, cuando a una mujer la asaltaron al salir de su domicilio en el fraccionamiento Alicia Carrillo -en el área de Las Palmas-. La hija de la afectada divulgó el testimonio en redes sociales, con un video en el cual se aprecia a un hombre abordo de un vehículo de reciente modelo, que se baja de este para interceptar a la mujer y despojarla de sus pertenencias.
En la misma publicación, un hombre compartió otro video donde se registra a un vehículo similar huir de la escena de un asalto donde otra mujer fue la víctima, pero en el fraccionamiento Playas de Tijuana. Ambos hechos fueron a plena luz del día, en zonas residenciales; también ambos sucesos fueron denunciados de inmediato a las autoridades, a quienes se les proporcionaron los videos que registraron los asaltos, sin que hasta la fecha se localice al o a los responsables.
Santiago Roel, fundador del Semáforo Delictivo Nacional, declaró a ZETA que, si bien no se ha registrado un repunte considerable en las cifras delictivas en los últimos meses, si se logró una disminución fue de manera “artificial” y no por estrategia de las autoridades locales.
“Se ve una reducción artificial, sobre todo en los delitos de carácter patrimonial; aún no se ve un repunte considerable, pero si se podrá dar en los siguientes meses. Esto se podrá ver más en robo a personas o a comercios”, señaló Roel.
Explicó que se considera artificial a esta reducción de índices, porque no fue resultado de estrategias en material de seguridad, sino por la disminución de la circulación de los ciudadanos en las calles por el tema de la contingencia sanitaria.
El confinamiento provocó el cierre de negocios, y en algunos casos las empresas tuvieron que recortar personal, por lo tanto los índices de desempleo aumentaron y esto podría influir en el repunte de delitos los próximos meses, mientras se van retomando las actividades productivas.
“Ojalá las autoridades sepan aprovechar esta reducción artificial, para mantener baja la incidencia delictiva en lo que se refiere a delitos patrimoniales y de alto impacto. Aunque ahorita lo más preocupante en Tijuana son los delitos relacionados a la violencia intrafamiliar, que al igual que en el resto del país han tenido un aumento grave”, comentó Roel
De acuerdo con las cifras proporcionadas por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana Municipal, de enero a agosto de este año atendieron mil 199 robos en la vía pública, coincide con las mismas cifras de la Fiscalía General del Estado que hace un desglose, del total de robos de este rubro, 898 fueron con violencia y 301 sin violencia.
El mes con mayor incidencia fue enero con 202 casos y el de menor abril con 98. A partir de mayo, que fue el mes en el que aumentó la movilidad de las personas, también comenzaron a subir las denuncias, y en agosto se registraron 157 robos en la vía pública.
En robo a vehículo se han registrado tres mil 872 de enero a agosto, 641 con violencia de acuerdo con la FGE. El mes de enero también presentó una mayor incidencia en este rubro, concentrando 629 reportes, mientras que abril fue el más bajo con 391, a partir de mayo las cifras no han bajado de 400.
De enero a agosto también se contabilizan 671 reportes de robo a casa habitación; 93 de estos fueron perpetrados con violencia. En este apartado la incidencia ha variado: en abril se registraron 50 casos y en mayo 45, aunque julio fue el mes con la mayor incidencia con 11 reportes.
En robo a comercio, se atendieron mil 511 reportes en los primeros ocho meses de este año, mil 245 con violencia. Marzo tuvo mayor incidencia, con 276 reportes, y abril fue menor con 144. Este año solo se han registrado dos asaltos a establecimientos bancarios, ambos ocurridos en el mes de enero.