“A él lo asesinaron en la calle; era pescador, era muy humilde, trabajaba en el campo o cuando tenía chanza lavaba carros, lo que se le presentaba”, dijo Miyeyes Pulido, representante del Colectivo Sin Ellos No A.C., sobre la privación de la libertad y homicidio de Francisco Javier Rosas Guevara en Mulegé, un joven dedicado a buscar a su hermano, desaparecido desde 2018
Fosa clandestina encontrada en Comondú, en su interior había restos humanos
de más de una persona, según el informe de la Fiscalía Especializada en la
Investigación de Delitos de Desaparición Forzada de Personas
Familias del Valle del Vizcaíno, en el municipio de Mulegé, lloran una pérdida más. se trata de Francisco Javier Rosas Guevara, un joven que luchó a lado de su madre durante los últimos dos años por encontrar a su hermano, desaparecido desde el 2018.
El joven forma parte de una lista de siete personas privadas de la vida en la comunidad de Villa Alberto Alvarado Arámburo.
“Localizaron, sobre una brecha de terracería que pasa por las torres de la CFE, el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino, con aparentes signos de violencia”, indicó la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
Sus restos fueron localizados en la colonia Oaxaca de dicha comunidad; solo en el municipio de Mulegé se cometieron siete homicidios en la misma zona en los últimos dos meses.
El joven se dedicaba a buscar a su hermano y sostener económicamente a su madre.
“A él lo asesinaron en la calle; era pescador, era muy humilde, trabajaba en el campo o cuando tenía chanza lavaba carros, lo que se le presentaba”, informó la representante del Colectivo Sin Ellos No A.C., Miyeyes Pulido.
La madre pidió anonimato por temor a represalias, y aseguró continuará en la búsqueda de su hijo desaparecido, aunque en el camino ya perdió a otro de sus muchachos.
“Uno de los mejores rastreadores de allá en la Pacífico Norte, se llamaba Francisco Javier Rosas Guevara, un joven que colaboraba mucho con nosotros en las búsquedas. Él estaba buscando a su hermano, lo estaban buscando por mucho tiempo con su mamá; nunca ha dejado de buscar. [A la señora] ya le quitaron a sus dos hijos; ella se queda sola porque él era el que la mantenía”, consideró Miyeyes Pulido.
Francisco Javier participó en la última búsqueda a la que asistió la coordinadora regional, Cynthia del Rincón, titular de los colectivos regionales de Sonora, Sinaloa, Baja California Sur y Baja California, así como Chihuahua; ella participó junto con la comisionada estatal, Lizeth Collins.
Fue una baja muy sensible en el Colectivo Sin Ellos No A.C., pues Francisco era muy dedicado a ayudar a los integrantes del colectivo, siempre visto en la búsqueda de persona, al mismo tiempo que buscaba a su hermano y cualquier indicio que terminara con su dolor, como el de otras familias.
“Nos dolió mucho que le hicieran esto, ahorita la Procuraduría de Justicia a nosotros no nos han dado todo, ya ve que le ponen desconocido; pero ella, su mamá, desde el momento que sucedió supo que se trataba de él cuando lo encontraron en la calle, porque la gente le avisó. A nosotros nos hicieron de conocimiento al momento; me extraña que la Procuraduría diga que están en calidad desconocidas solo porque no trae el ID, la credencial en la bolsa. Es lo que te puedo decir, nos dejaron con un rastreador menos”, lamentó Miyeyes Pulido.
No es al único Colectivo que han afectado, pues expresó que a otros colectivos también les han desaparecido personas, ha habido represalias.
Pese a que los mismos colectivos han difundido que no buscan responsables, sólo a sus desaparecidos, han atacado a las familias que están en este duelo tan difícil de buscar y no encontrar.
“Estábamos en la búsqueda que se estaba haciendo en Los Cabos; ese mismo día que estamos buscando allá, ese mismo día lo levantaron. No nos acompañaba a nosotros a buscar personas, pero tal vez al colectivo de ellos sí; a nosotros nos han dicho siempre que dejemos de buscar. Yo pienso que fue una llamada de atención”, recordó Miyeyes Pulido.
DESAPARECIDOS DURANTE LA PANDEMIA
De acuerdo a los registros de la Procuraduría, durante el periodo de contingencia y encierro, se reportaron 16 personas como desaparecidas; nueve fueron localizadas con vida, mientras que otras siete no han sido reportadas como localizadas.
Sin embargo, los registros del Colectivo Sin Ellos No A.C. consideran 43 personas desaparecidas en el mes de abril a julio.
Personal de la PGJE en reunión con familiares de personas desaparecidas y la Comisión Estatal de Búsqueda
“Durante la contingencia, de abril a julio hubo 43 personas, que en plena contingencia fueron desaparecidas; no se detuvieron lo desapariciones, no fue motivo la contingencia para que no hubiera desaparecidos todos los días. Especialmente en Los Cabos, Vizcaíno (Mulegé) y en el Valle municipio de Comondú, es donde tenemos el mayor número de registros; en La Paz no se conocen muchos, pero sí ha habido”, reconoció la representante del Colectivo Sin Ellos No A.C.
Justamente los municipios de Los Cabos, Comondú y Mulegé son los municipios que más homicidios registraron durante este periodo de cuarentena, municipios que también encabezan la lista de desapariciones.
En Comondú se registraron tres homicidios dolosos; 12 en el municipio de Mulegé, de los cuales nueve están en calidad de desconocidos; en Los Cabos 17 personas fueron asesinadas; nueve están sin poderse identificar, ya sea por el estado avanzado de descomposición o no contar con identificaciones.
“En cuanto a las desapariciones, en lo que va del 2020 se han registrado 76 registros de personas desaparecidas, pero 18 de estas desapariciones (de estas personas) han sido localizadas con vida; en las búsquedas, aparecen no porque la Procuraduría las busque, sino que los colectivos hacen el trabajo y se mueven. Quiero comentarte que hay mucha gente que no denuncia, siguen con ese temor de denunciar. Tenemos en Comondú mucha gente que no ha denunciado porque el mismo personal de la Procuraduría les dice que no porque ‘echan a perder’ las investigaciones. ¿Cuál investigación?, ellos no buscan, no investigan.
18 cuerpos localizados, ya sean abandonados en brechas o fosas clandestinas, no han podido ser identificados”. El Colectivo manifestó que la integración de las muestras, así como el estudio de las mismas demora mucho tiempo, meses, para que se puedan identificar. Hay registro de un caso que duró dos años para lograr su identificación plena, ocurrido en Comondú.
“Nosotros en la última búsqueda encontramos fosas en Comondú -fosas que ya estaban procesadas- y ahí volvimos encontrar que ya están abiertas; hemos ido con los agentes y volvemos a encontrar, en donde ya se fueron supuestamente a levantar. No te puedo dar una cifra de cuánta gente seguimos buscando porque la Procuraduría le dice directamente a los familiares y ellos a veces no nos avisan; hace poco la Fiscalía entregó en el Valle (Comondú) en los últimos días, en julio, entregó tres cuerpos, uno de ellos que fue localizado hace dos años. Dos años estuvo en Semefo de Constitución, ahí estaba la madre y apenas tiene dos meses que le entregaron el cuerpo; están otros más sin entregar”, puntualizó el Colectivo Sin Ellos No A.C.
Recientemente se reveló información en reunión para conocer avances en carpetas de investigación, resultados de prueba de laboratorio de genética y preparación de agenda de trabajo, con el titular de la Fiscalía Especializada en la Investigación de Delitos de Desaparición Forzada de Personas, Desaparición Cometida por Particulares y Delitos Vinculados de la PGJE, Baltazar Amador.
Durante la contingencia de abril a Julio, hubo 43 personas reportadas como desaparecidas o no localizadas, el crimen organizado no descansó aún en pandemia
La reunión se desarrolló con familiares de víctimas adheridos a Colectivos de búsqueda de personas en la zona de Comondú, organizada por la comisionada estatal de Búsqueda de Personas, Lizeth Collins.
“Esos últimos que encontramos hace 20 días, que fuimos a la búsqueda -nos dice el Fiscal, que fuimos en una reunión de hace ocho días-, tardan seis meses para identificar porque al parecer en la misma fosa había restos de varios cuerpos; y eso obviamente les dificulta un poco más”, comentó Pulido.
MIEDO A DENUNCIAR
Un aspecto es la localización de las personas desaparecidas, la toma de muestras y el tiempo que tarda el laboratorio de genética de la PGJE en analizar las pruebas; y otro punto es que las familias denuncien.
Lo anterior fue evidenciado por el Colectivo: el temor que existe entre los familiares que salen a buscar a sus desaparecidos, ya que deben afrontar la burocracia y las amenazas de grupos delincuenciales, incluso policías.
“¿Los han amenazado? Claro que sí, siempre. Siempre nos dicen que no, y no sé cómo consiguen los números; a mí me hablan al teléfono de mi casa y nunca aparece un número, aparecen puros ceros, lo hemos denunciado. También vinieron de México para ver nuestros equipos electrónicos, para ver los IP de dónde vienen las llamadas y no encontraron [nada] los expertos; no sabemos de qué manera identifican nuestros datos. Nosotros pensamos que son los policías los que difunden los datos”, denunció la representante del Colectivo Sin Ellos No A.C.
Un obstáculo muy importante es la falta de denuncia, que impide a los colectivos iniciar búsquedas, ya que no se pueden activar protocolos de atención. Incluso, ellos denunciaron que se han topado con la interferencia en las denuncias, en muchos de los casos por los mismos servidores públicos.
“Nosotros como Colectivo necesitamos que denuncien, para buscarlos necesitamos esa carpeta para buscar como desaparecidos; no podemos buscar a alguien que no está denunciado como desaparecido. Ahí me extraña mucho que los agentes a cargo de las investigaciones, les digan a las familias que no hagan las denuncias, que no lo comuniquen a nadie; eso no nos ha gustado nunca. Nosotros los tenemos con carpetas: cuándo desaparecen, su media filiación; por eso invitamos a todas las familias a que reporten a la Procuraduría”, apuntó.
Desde hace varios años, familiares han denunciado la presencia de supuestos policías (de distintas corporaciones, o al menos sicarios disfrazados de oficiales), quienes han levantado a personas que hoy están desaparecidas.
Eso ha generado desconfianza, y es que en algunas detenciones de sicarios se han asegurado uniformes de distintas corporaciones.
“Para las búsquedas, hemos hablado con las comisionadas nacional, regional y estatal para que no nos acompañen elementos de seguridad, ya que los familiares han denunciado que son los mismos agentes los que se han llevado a sus familiares. Entonces es un temor que ellos tienen y que con justa razón nosotros respetamos; por eso hemos solicitado que no nos acompañen, porque no hay esa confianza. Lamentablemente nos dicen que tienen que acudir los elementos, porque son los que tienen que dar fe de los hallazgos, así como procesarlos”, dijo Pulido.
Indicó la representante del Colectivo Sin Ellos No, que al no denunciar se genera impunidad; sin denuncia no hay obligación de las autoridades respecto a investigar y dar con los familiares de algún cuerpo localizado.
En cambio, con una denuncia se activa el protocolo de búsqueda; en caso de localizar a una persona sin vida, se analiza su ADN, de coincidir se da aviso a la familia de la localización del desaparecido.
“Para las autoridades es muy fácil decir ‘está en calidad de desconocido’, porque no hay una denuncia; procesan las muestras de ADN y como no coinciden, no hay una denuncia, se envía a la fosa común, y entonces no hay la obligación de buscar a los familiares. Por eso es importantísimo que denuncien para activar los mecanismos de búsqueda”, concluyó Miyeyes Pulido.
BÚSQUEDA POR PROTOCOLO
Durante años, en Baja California Sur no había un área específica para tratar la desaparición forzada de personas; fue en 2019 cuando se pudo crear una Comisión de Búsqueda de Personas.
A casi un año, se está buscando un protocolo homologado que sirva para la búsqueda de personas desaparecidas; no solo en el estado, sino para todo el país.
“Ya tenemos un tiempo trabajando en un protocolo homologado de búsqueda, en este caso es el protocolo que buscamos que sea el que tengamos unificadas a las instituciones: las autoridades que tienen que intervenir, cómo tiene que ser el proceso, cómo deben actuar las instituciones para efecto de activar de manera inmediata la búsqueda de una persona reportada como desaparecida. Ahorita este protocolo se encuentra en proceso de ser aprobado por Sistema Nacional de Búsqueda, y una vez que sea aprobado, será un protocolo que será vigente en toda la República Mexicana”, expresó Lizeth Collins Collins, comisionada estatal de Búsqueda de Personas en Baja California Sur.
Se pretende desarrollar el trabajo de manera coordinada entre autoridades, la comisión y los colectivos de búsqueda en el estado.
Actualmente hay un protocolo para la recepción de las denuncias, pero hace falta trabajo por hacer, consideran.
“La Comisión Estatal de Búsqueda fue creada el 30 de septiembre del 2019; a partir de su creación, hemos iniciado por un lado los registros de las personas y los reportes de las personas desaparecidas o no localizadas en el estado. Asimismo, el trabajo conjunto con los colectivos y las familias, a través de reuniones, jornadas de seguimiento, de investigaciones, de los registros, toma de muestras y las jornadas de búsqueda en campo”, señaló la comisionada estatal.
Recientemente, la Comisión Estatal de Búsqueda, de manera coordinada con la Comisión Nacional de Búsqueda, desarrolló una jornada estatal para intentar localizar personas, la cual se llevó a cabo a lo largo y ancho del estado con resultados favorables.
A un año de funcionamiento, la Comisión se desempeña en recabar datos de personas desaparecidas.
“En este momento tenemos un registro de 245 personas reportadas como desaparecidas o no localizadas; cabe destacar que pueden ser personas desaparecidas de un año, dos años y hace cinco años, porque estamos recabando toda la información”, dijo Collins.
“En estas búsquedas es importante referir que el trabajo se realiza de manera conjunta, coordinada con los colectivos de búsqueda de personas, que en Baja California Sur tiene tres colectivos: el Colectivo Sin Ellos No; que es el Colectivo Búsqueda Por La Paz, que tiene Búsqueda Por Los Cabos, Buscando Nuestros Tesoros y Búsqueda San José; y actualmente, recientemente surgió un grupo llamado Rastreadoras de Cabo San Lucas”, contabilizó Lizeth Collins.
Explica que un aspecto que mejoró la búsqueda de personas en la entidad, es que se activan alertas al instante en que se sabe de una desaparición; de esta manera, las autoridades realizan operativos de búsqueda.
Principalmente se analiza el sitio de la desaparición, los motivos y se lanza una alerta en diferentes sitios donde pudiera encontrarse; de otra forma, se busca en brechas y arroyos mediante búsquedas calendarizadas.
“Nosotros recibimos un reporte y de manera inmediata se activa la búsqueda en este caso, en donde nosotros, una vez que se toma el reporte, que se conoce las circunstancias de la desaparición, solicitamos a diversas autoridades el apoyo para la búsqueda y localización; desde la revisión de registros en centros penitenciarios, centros de rehabilitación, hospitales, así como la búsqueda y localización a través de diferentes cuerpos policiacos. En ese sentido nosotros, además de activar nuestra búsqueda a través de estos registros, actualmente también se activa la búsqueda, constituyéndonos directamente en el lugar a través del personal de campo”, añadió Lizeth Collins.
Los colectivos de búsqueda de personas, solicitan la intervención de las autoridades y del propio Congreso del Estado para que coadyuven en la generación de lineamientos que permitan un mejor funcionamiento y otorgamiento de recursos para las búsquedas.
