Buen día, Licenciado en Medicina General con Especialidad en Medicina Familiar, Alonso Óscar Pérez Rico.
Un servidor, que al calce firmo, procuro seguir la información que usted brinda sobre la pandemia de COVID-19, así como sus recomendaciones para protegernos y cuidar a los demás, por lo cual lo reconozco y felicito. Muchas gracias.
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Pero, con todo respeto, le digo que grande fue mi sorpresa al otorgar usted en televisión una consulta médica, refiriéndose a una persona ausente. Dicha consulta médica fue infamante y ligera expresando un diagnóstico público, respecto al C. Arturo González Cruz, presidente municipal de la hermosa y progresista ciudad de Tijuana; ya que usted, con solo ver una foto y una opinión en video, donde el C. Arturo González Cruz, rechazaba señalamientos a su persona y de los cuales pedía una investigación… Usted le diagnosticó: Ansiedad, mucha presión, bipolar y maniaco depresivo.
Desafortunado diagnóstico ligero, temerario y falto de ética. Porque usted no es psicólogo, tampoco psiquiatra, y además lo hizo público de forma burlona, con la intención de denostar a un ciudadano respetable que hoy por hoy ostenta el honroso cargo de presidente municipal de Tijuana.
Fíjese, médico Pérez Rico, los policías para referirse a las personas que detienen, utilizan las palabras “presunto”, “al parecer”, y nunca dan los nombres al público; en la prensa publican un solo nombre y le ponen “N”, incluso les ponen una sombra en los ojos para no delatar su identidad. Y usted, olvidando el juramento de Hipócrates, padre de la Medicina, que usted juró hacer suyo cuando se tituló, exhibió públicamente en televisión a una persona ausente.
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Con el patrón, hay que ser leal y sincero; pero, con todo respeto, no lambiscón sin ética. Bien pudo decir que se requería de mucha más información para realizar una consulta médica a una persona ausente, que no la había pedido, que además, usted no tenía el perfil profesional requerido; que lo disculpara, que usted no era psicólogo ni psiquiatra y que, en caso que lo fuera, tenía prohibido exhibirlo ni exponerlo al escarnio público.
Pido a los profesionistas de la psique y/o colegiados de psicólogos y psiquiatras, que si usted estuvo en lo correcto y un servidor estoy equivocado con esta mi modesta opinión, me lo digan al correo gafersanroque@hotmail.com y le daré una disculpa pública; pero creo que no sucederá. Gracias.
Atentamente,
Profr. Gabriel Fernando Santillán Roque.
Ensenada, B.C.
