Me gustan los días grises
porque es ahí cuando las calles frías y oscuras
me recuerdan a los sentimientos que
albergo desde que se fue.
Me gustan los días grises
porque puedo estar triste sin dar explicaciones.
Me gustan los días grises
porque ahí es donde puedo visitarlo sin temor.
Me gustan los días grises
porque puedo hablar contigo sin compañía.
Me gustan los días grises
porque es el último día que lo vi con vida.
Luis Ángel Serna González.
Tijuana, B.C
(Preparatoria Educarte, grupo 401)