Los alcaldes de los cinco municipios de Baja California junto con el gobernador, Jaime Bonilla Valdez, firmaron el Acuerdo Estatal de Unidad Contra COVID-19, para homologar una serie de medidas que se implementarán para disminuir el número de contagios en todo el estado.
En reunión extraordinaria, solicitada por el mandatario estatal, se firmó dicho documento para apegarse a los lineamientos del Gobierno Federal y la Secretaría de Salud para respetar el sistema de semaforización para volver a la “Nueva Normalidad”, aplicando las medidas necesarias para contener el alza de personas infectadas.
“Es un acuerdo que es voluntario de parte nuestra, porque también el Estado podría tomar otra posición diferente, pero, nosotros nos estamos disciplinando porque sabemos que en realidad lo que queremos es bajar el contagio, y todos los alcaldes y alcaldesas, presentes aquí, están muy conscientes de la problemática, y aunque todos queremos que se abran los comercios y todas las industrias, tenemos que contener este contagio que es tan delicado”, refirió Bonilla Valdez.
Posterior a la firma de este acuerdo, Bonilla Valdez, informó que será un acuerdo que se revise semanalmente, haciendo además, un monitoreo diario del comportamiento de cada uno de los municipios. Adelantó que en dos de los cuatro indicadores que marca el semáforo, Baja California se encuentra en color anaranjado, sin embargo, no especificó a cuáles indicadores hacía referencia, pero, manifestó que si no se modifican acciones, no se podrá cambiar de color en todo el estado.
Cada uno de los alcaldes dio su postura con respecto a este acuerdo. En primer lugar habló el alcalde de Ensenada, Armando Ayala, quien refirió que al firmar, quedan todos en el entendido de aplicar las mismas medidas en todos los municipios, con la finalidad de que no haya migración de contagios, o que se genere confusión entre comerciantes, establecimientos y la actividad económica.
Zulema Adams, primera edil de Tecate, enfatizó la importancia del acuerdo, principalmente por la problemática que conlleva tener como vecinos a Estados Unidos, y los turistas que cruzan hacia Baja California, aumentando el riesgo de esparcir el virus letal, o en el peor de los escenarios, si el municipio ya se iba recuperando, por esta clase de visitas vuelvan a tener aumento de casos confirmados a COVID-19.
Reiteró la importancia de mantenerse unidos como municipios y reforzar medidas en conjunto, poniendo de ejemplo que en Tecate ya no se permite el tránsito después de las 8 de la noche, se aplicaran sanciones con trabajo comunitario.
En el caso de la alcaldesa de Mexicali, Marina del Pilar, invitó a la ciudadanía a realizar actividades esenciales y acatar las recomendaciones de las autoridades, en el sentido de no salir mucho de casa, sólo a lo esencial.
El presidente municipal de Tijuana, manifestó que se intentará recuperar el mayor número de empleos y levantar la economía, pese a la situación que se vive en la ciudad y el estado. Asimismo, dijo estar de acuerdo en establecer las reglas de reapertura, a sabiendas que se han afectado a personas dedicadas a actividades no esenciales y quienes tuvieron que cerrar sus negocios.
Por su parte, Araceli Brown Figueredo, alcaldesa de Playas de Rosarito, celebró el comportamiento de los rosaritenses hasta el momento, por lo que, se dijo comprometida para apoyar el acuerdo, para reactivarse junto a los demás municipios. Se dijo confiada de que el número de contagios pueda ir a la baja para continuar ofreciendo los servicios de turismo que caracteriza al municipio que representa.
