Existe la posibilidad de un segundo repunte en cuanto al número de personas contagiadas por COVID-19, el cual sería “muchísimo más dañino” que el primer ápice registrado en la pandemia, advirtió el Secretario de Salud, Alonso Pérez Rico.
“Siempre hay la posibilidad de una segunda ola, el hecho de que tengamos ahorita un descenso gradual progresivo en casos confirmados en Tijuana, con visitas a hospitales a urgencias y hospitalizaciones a piso, no significa que se acabó la pandemia, para nada”, subrayó.
Agregó que el ligero descenso “significa que la tasa de ataque ya surgió sobre la ciudad y que ahorita debemos tener especial cuidado con lo que estemos haciendo en los grupos vulnerables, las personas que están saliendo fuera de su resguardo tienen todo el riesgo de poderse infectar. Un segundo repunte siempre va a ser muchísimo más dañino”.
El incremento de casos positivos a coronavirus y decesos registrado en las últimas semanas en la capital de Baja California, Pérez Rico no lo consideró un rebrote, “sino que no han llegado a su ápice de su curva epidemiológica, algo muy peligroso porque siguen teniendo muchos casos”, apuntó.
Consideró necesario reforzar en esa ciudad las medidas comunitarias, lo cual consideró factible de lograr porque “afortunadamente Mexicali es una ciudad que sí tienen una buena líder”, expresó.
Respecto al personal de salud contratado durante la pandemia, precisó que a la fecha han sido ingresados al sector Salud de Baja California 400 médicos y enfermeras y fueron autorizadas 180 plazas más para reforzar los hospitales de Mexicali y Ensenada.
De las reformas a la Ley de Salud en la mesa de análisis del Congreso del Estado de Baja California, la cual dará nuevas facultades a la Comisión Estatal de Protección Contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS), Pérez Rico dijo que el cambio significa “inyectarle regulación en relación a proteger a nuestra población en los riesgos sanitarios que existen”.
La nueva ordenanza, agregó, permitirá a la COEPRIS “dejar de ser esa entidad en la Secretaría de Salud que estaban asociados a prácticas no congruentes con este gobierno, a darle mucha transparencia”, además dijo confiar que los funcionarios de esa dependencia “no van a ser por ningún motivo sobornados en su búsqueda por proteger la población y descubrir riesgos sanitarios”.
Por último, sostuvo que la reforma no la ve como una medida recaudatoria, sino que tiene el propósito de brindar salud, e identificar y mitigar los riesgos sanitarios, “hay un sinfín de comercios que no dan las medidas sanitarias necesarios y tenemos que buscar la forma de cómo regular eso”, acotó.