Finanzas deterioradas, malas prácticas en el gasto y una deficiencia comercial del 25%, impiden a la Comisión Estatal de Servicios Públicas de Tijuana abatir el 100% de los baches que sus obras de reparación de tuberías generan, con todo y que para 2020 dispondrá de un Presupuesto de Egresos de 3 mil 607 mdp. A cambio del pago por consumo de agua, el municipio rehabilitará cuando menos el 50% de alrededor de 11 mil hoyancos causados por la paraestatal en las nueve delegaciones de la ciudad
La mala administración que ha caracterizado a la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT) no solo ha causado un deterioro en sus finanzas y sistema hidráulico que afecta el suministro del vital líquido a los 660 mil usuarios que integran su padrón; también ha abonado al problema de movilidad, al mantener un promedio de 11 mil baches en toda la ciudad.
El Presupuesto de Egresos tasado en 3 mil 607 millones de pesos para el ejercicio fiscal 2020 no será suficiente para atender la demanda de obra, por lo que la paraestatal negocia convenios con los municipios de Tijuana y Rosarito para el desarrollo de obras hidráulicas con recursos operados por los municipios, ya sea a través del Ramo 33 o intercambiando el suministro de agua potable por obra.
Tal es el caso de Tijuana, con cuyas autoridades se encuentra negociando para que el pago del consumo de agua el municipio lo pague reparando los miles de baches que sus obras han dejado abiertos en las nueve delegaciones.
Del gasto anual autorizado para este año, la Comisión solo destinará 20% a obra pública, principalmente en acciones de reparación de acueductos, mientras que el 80% restante lo erogará en gasto corriente, “pago de nómina, conducción del vital líquido, mantenimiento de la infraestructura, compra de refacciones, materiales y suministros, y al pago del servicio de la deuda”, informó Sergio Rosete Weben, subdirector administrativo y financiero de la CESPT.
Para el abono de la mega deuda de mil 720 millones de pesos que enfrenta la dependencia, al año se destinan 120 millones de pesos, y aunque “por el momento no se tiene contemplado deuda pública adicional”, Rosete Weben no descarta una reestructuración.
“Si hay condiciones de mercado y se pueden mejorar las tasas y hay un beneficio, se vería con los bancos, pero se tendría que ver también la opción de cómo reducir el costo del pago de la deuda, sin ampliarla más plazo, no diferirla. Eso no es una buena práctica, porque sigue creciendo más”, afirmó.
TIJUANA, CAMPO MINADO POR BACHES DE CESPT
Aunado al mal estado de su infraestructura y del intermitente servicio de suministro de agua potable, la CESPT mantiene la ciudad como campo minado, al no reparar las vialidades en las que rompe el concreto hidráulico o asfalto para llevar a cabo acciones de rehabilitación.
El alcalde Arturo González Cruz recibió la administración con un conteo mínimo de mil 200 baches causados por obras de la Comisión en cada una de las nueve delegaciones que conforman Tijuana, situación que afecta el desarrollo del programa de obra municipal, el cual contempla una inversión de 200 millones de pesos en 2020 para obras de rehabilitación de calles, principalmente bacheo.
Aspectos de obras de la CESPT, en Paseo Guaycura.
Sin embargo, “no podemos iniciar con un programa de bacheo porque necesitamos determinar si la CESPT ya terminó la obra, estamos hablando de mil 200 a mil 300 baches por delegación, pendientes por cuestiones de aperturas de sus conexiones y que los dejaban así -abiertos-”, expuso Javier Delgado Garibay, director de Obras e Infraestructura Urbana Municipal.
La administración municipal afina la firma de un convenio con la paraestatal “para que la reparación de los baches la realice el Ayuntamiento de Tijuana, con cargo a CESPT, o a cambio de pago de consumo”, informó a ZETA Patricia Peterson Villalobos, titular de la Secretarías de Desarrollo Territorial, Urbano y Ambiental (SDTUA).
Indicó que cuando esa dependencia estatal “hace una reparación u obra de conexión, abren zanja, reparan y, como parte de sus actividades, deberían de realizar la reposición del pavimento, en este caso cubrir los baches lo haría el Ayuntamiento y los costos de esas reparaciones serían absorbidos por CESPT, mediante pago de consumos del Ayuntamiento u otro tipo de servicios”.
Para el ejercicio fiscal 2020, el Ayuntamiento de Tijuana presupuestó 52 millones de pesos para el pago del servicio de agua potable, cantidad que podría destinarse a la reparación de los más de 11 mil baches ocasionados por obras de la CESPT.
Sin embargo, acorde con Peterson Villalobos, la capacidad en equipo con que cuenta el municipio actualmente solo permitiría “atacar el 50% de los baches”, porcentaje que podría incrementar si se aumenta el equipo, ya que la reparación de los baches por parte de la Comisión sería adicional al programa de bacheo del municipio, en el que programó invertir 200 millones de pesos.
La funcionaria anotó que la firma de convenio con la CESPT se llevará a cabo en próximos días, en tanto se atienden los socavones que se notifican mediante denuncias ciudadanas y se meten al programa de obra.
“Se espera atacar el mayor porcentaje de los baches, sobre todo los ubicados en las zonas en las que se obstruye más el tráfico”, indicó.
SUPERAR MOROSIDAD DE USUARIOS, RETO PARA 2020
Incrementar el presupuesto para la realización de obra pública, lo cual incluye bacheo, “depende del flujo, que son los ingresos propios por un lado, y por otro los programas federales en los que ponemos una parte. Básicamente la CESPT es una dependencia que depende de su ingreso propio”.
Por ello, abatir el déficit comercial del 25% que enfrenta la CESPT, el cual deriva de un rezago de cuentas por cobrar de 4 mil 300 millones de pesos, es el principal reto a superar en 2020, anotó el responsable del área Comercial de CESPT, Juan Pablo Guerrero Mercado.
El 44% de un padrón de 660 mil usuarios, es decir 280 mil clientes, están en cartera vencida. De las cuentas, 95% corresponden al servicio residencial, y el 5% se dividen en adeudos de usuarios del servicio comercial, industrial y gobierno. En cuanto al monto de lo rezagado, 37% lo adeudan comerciantes e industriales, siendo los empresarios de la construcción los principales morosos.
Tan solo los usuarios de veinte cuentas deben en conjunto mil 400 millones de pesos, empresas del ramo de la construcción que se encuentran en un concurso mercantil para declararse en bancarrota, por lo que no será fácil recuperar el adeudo.
Acorde con el funcionario, un amplio porcentaje de los 4 mil millones de pesos por cobrar data de años atrás, por lo que es necesario depurar para determinar las cuentas que sí son factibles de recuperar, estimando para 2020 rescatar de lo rezagado: 600 millones de pesos.
Actualmente, en promedio la paraestatal capta un ingreso mensual de 300 millones de pesos por el pago de los usuarios que sí cumplen, cantidad con la que se solventa el gasto corriente de cada mes. “Incrementar el monto de los ingresos equivale a abatir el rezago, por lo que nuestra labor es ser más eficientes con la cobranza, buscar cumplir con los usuarios para que ellos nos paguen más oportunamente, mejorar el servicio”, subrayó.
“La recuperación de ese rezago es la ventana de oportunidad que tenemos que mejorar, saliendo más al campo, siendo más eficientes con el servicio para que la gente tenga más disposición de pagar”, agregó.
Rehabilitación de Colector Oriente, frente a Palacio Municipal.
80% DEL PRESUPUESTO A GASTO CORRIENTE
Del presupuesto de 3 mil 607 millones de pesos para 2020, 2 mil 885.6 millones de pesos (80%) se destinarán a gasto corriente, mientras que para obra pública serán 721.4 millones de pesos (20%).
Más del 25% del gasto corriente se erogará en el pago de nómina, rubro al que se destinó una partida de 990 millones de pesos para cubrir el sueldo de los mil 700 empleados de base y confianza.
Una cantidad similar se canalizará a la conducción de agua y el resto del presupuesto “se iría en el mantenimiento de la infraestructura, refacciones, materiales y suministros, y servicio de la deuda”.
Respecto a la mega deuda a largo plazo de la CESPT, esta asciende a mil 700 millones de pesos, por la que paga un abono de 120 millones de pesos al año.
De acuerdo con el director financiero, “por el momento no se tiene contemplado adquirir deuda pública adicional”, pero no descartó analizar un refinanciamiento encaminado a reducir el monto de la anualidad, sin ampliar el periodo de pago, “porque ha habido instancias que solo piden años de gracia y se avienta la deuda para enfrente, no debemos hacer eso”, sentenció.
En el programa de inversión para obras de 2020, la CESPT prevé atender la contaminación del Río Tijuana, bombeo y cárcamos.
Con una inversión inicial de 100 millones de pesos, provenientes de recursos federales, se programó el inicio de la rehabilitación de la planta de tratamiento de aguas residuales de Punta Bandera.
ADELGAZAR NÓMINA PARA CONTENER GASTO
Para concluir, el funcionario indicó que otro de los propósitos para este año es “buscar contenciones del gasto, porque todo abunda en que tengamos mejores prácticas, y creo que sí hay oportunidad de mejorar el control del gasto”.
Reducir la nómina de mil 700 trabajadores, de los cuales mil 228 son sindicalizados, es una de las prácticas de mejora que propuso, “que en servicios personales se tenga el personal que realmente se requiere, si hay personal que no cumple con un propósito, adelgazar la cantidad de personal”.
Para ello, “sobre el camino vamos a ir dando de baja a personal cuando realmente no se requiera”.
Vigilar las solicitudes de compra para adquirir las cosas que sean necesarias, ya que una mala práctica detectada es la adquisición de insumos equivocados que causan un doble gasto, es otra de sus propuestas para evitar dispendios. Así como obtener las mejores opciones de mercado con los proveedores, sin que desmerezca la calidad del producto a adquirir.
