La reparación del socavón sobre el bulevar Rosas Magallón podría llevar tres meses, según el Ayuntamiento de Tijuana.
Mientras esto sucede se revisan los permisos de la empresa G & G Constructora, cuyos trabajos en la edificación de un fraccionamiento y el reblandecimiento del suelo por la lluvia provocaron el hundimiento sobre la vialidad mencionada, a la altura del fraccionamiento Colinas de California.
Javier Delgado Garibay, director de Obras e Infraestructura Urbana Municipal (Doium) indicó que el presidente municipal, Arturo González Cruz, pidió una revisión minuciosa de proyecto así como de los permisos de construcción de la obra.
A finales de 2018 esta misma vialidad, en el mismo tramo, se vio afectada por las lluvias a raíz de la construcción en la zona aledaña, por lo que fue necesaria la reparación del tramo carretero por parte de G & G Constructora.
“El año pasado los de la constructora inyectaron una sustancia epóxica para subir el nivel del pavimento y a la grita que quedó le pusieron un sellador, o una junta como se le llama, pero en esta lluvia se rompió el sellador”, señaló Delgado Garibay.
La mañana de este viernes 29 de noviembre la Dirección de Administración Urbana (DAU), la Dirección de Obras e Infraestructura Urbana Municipal (Doium) y Protección Civil se reunieron con los contratistas y el especialista que realizó el trabajo de reparación el año pasado, a fin de conocer el proyecto de reparación presentado a la pasada administración.
DAU solicitó los permisos de construcción, el estudio técnico de la falla y la propuesta de reparación. Con estos documentos dictaminará la viabilidad de otro proyecto de reparación o la implementación de uno nuevo que dé solución definitiva.
El titular de Doium puntualizó que en tanto se realizan las revisiones y se sostiene una segunda reunión con la fraccionadora el próximo lunes, el Ayuntamiento trabaja en la zona para resguardar la seguridad de los automovilistas que circulan por la vialidad.
Agregó que una vez presentado el estudio se evaluará si habrá o no una sanción contra la constructora, y de ser necesario se procedería a la clausura de la obra en tanto se llega a un acuerdo con el municipio para la reparación del área afectada.
