Los oficiales, expolicías comerciales que fueron incorporados a la municipal durante la administración de Juan Manuel Gastélum Buenrostro, “El Patas”, se encuentran actualmente desarmados tras detectarse que no cumplían con todas las certificaciones necesarias para la portación de arma de fuego.
De acuerdo a una denuncia anónima por parte de un grupo de oficiales afectados, a los policías municipales se les entregó la tarjeta que avala la portación de arma de fuego por parte de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal -documento que debió entregarse desde junio de 2018- dos semanas antes del cambio de administración; al mismo tiempo, a varios elementos que habían migrado de la policía comercial a la activa les fueron retiradas las armas y se les asignó para “cuidar” las instalaciones de los distritos policiales.
El director general de Policía y Tránsito Municipal, Carlos Betancourt Carrillo, admitió la situación pero no supo precisar cuántos elementos son los afectados, aunque comentó que pueden hacer los exámenes necesarios para completar su certificación.
“No es tanto que no se les haya revisado si cumplían o no, había una necesidad y se incorporaron a las filas de la policía activa. Pero al hacerles los exámenes correspondientes al cargo que estaban recibiendo, es donde empezaron a ‘botar’ este tipo de situaciones. El C3, por medio de los exámenes psicológicos, de entorno social o de conocimiento, determinó que estos oficiales no son aptos para poder portar un arma”, explicó Betancourt.
Los denunciantes precisaron que sí fueron sometidos a un examen de confianza, pero fue al momento de pasarlos de un área a otra; no les informaron de los resultados de estos y les fue proporcionada un arma a cada uno para realizar su trabajo.
Betancourt argumentó que en las próximas semanas se estará revisando caso por caso para cerciorar las condiciones de cada uno, pues en algunos podría faltarles actualizar el examen de confianza, el físico o el antidoping. Para esto, los elementos deben acudir a un “laboratorio” externo para someterse al examen y este último mandar los resultados directamente a la corporación, sin pasar por el elemento.
Al respecto de otras necesidades que tiene la corporación, el director general comentó que existe un déficit en las unidades vehiculares debido al mal estado en el que se encuentran por el desgaste propio del trabajo; otras tienen cerca de 10 años de antigüedad, por lo que más adelante buscarán la forma de reemplazarlas.
