La célebre bailarina de danza clásica Alicia Alonso, murió este jueves 17 de octubre a la edad de 98 años en La Habana (Redención, Cuba, 21 de diciembre de 1920).
La icónica artista de la Isla se encontraba hospitalizada en el Centro de Investigaciones Médico Quirúrgicas (CIMEQ) de La Habana, desde donde se notificó finalmente su deceso.
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Fundadora y prima ballerina assoluta del Ballet Nacional de Cuba, Alicia Alonso compartió su arte en diversos escenarios de Estados Unidos, Europa, América de Sur y, por supuesto, en los teatros más importantes de la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).
“Toda mi esperanza y mis sueños consisten en no volver a salir al mundo en representación de otro país, sino llevando nuestro propia bandera y nuestro arte. Mi afán es que no quede nadie que no grite: ¡Bravo por Cuba!, cuando yo bailo. De no ser así, de no poder cumplir ese sueño, la tristeza sería la recompensa de mis esfuerzos”, expresaría Alicia Alonso cuando empezaba a escenificar su arte en el extranjero a mediados del siglo XX.
En 2017, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) la nombró Embajadora Mundial de la Danza.
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De acuerdo con Cubadebate, la bailarina, coreógrafa, pedagoga y maestra recibió por lo menos 266 premios y toda suerte de condecoraciones tanto nacionales como internacionales, y protagonizó 134 obras de su vasto repertorio, lo cual patenta la leyenda de la célebre artista cubana.
Universidades y academias de danza alrededor del mundo, incluidas algunas instituciones de México y Tijuana, no sólo celebran su arte sino perpetúan su escuela en sus coreografías que llevan su estética de la danza clásica.
