Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, presidente del 1 de diciembre de 2006 al 30 de noviembre de 2012, canceló la conferencia que tenía prevista impartir mañana miércoles 9 de octubre, en el campus del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), en la capital de Nuevo León.
En una carta dirigida al rector David Garza Salazar, el ex mandatario nacional aseguró que aunque hay muchos puntos de vista atendibles, también “hay versiones imprecisas y verdades a medias” en los señalamientos en su contra sobre lo ocurrido el 19 marzo del 2010, cuando los estudiantes Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo, fueron asesinados al interior del campus Monterrey.
Calderón Hinojosa aseguró haber escuchado a la señora Rosa Elvia Mercado, quien manifestó su no estar de acuerdo con su visita al ITESM, lo que consideró una razón más que suficiente para no hacerlo, además de que ofreció reunirse con los familiares de los jóvenes asesinados, para escucharlos de viva voz.
“He escuchado con especial atención el comentario de la señora Rosa Elvia Mercado, madre de Jorge Antonio, quien señaló recientemente no estar de acuerdo con mi visita al campus en las circunstancias actuales. Su parecer, en mi opinión, es razón más que suficiente para que suspenda mi visita al TEC”, escribió el ex presidente en su misiva.
El ex mandatario nacional abundó que para él “es fundamental respetar ese dolor, independientemente de que haya quien utilice esa circunstancia con propósitos mediáticos y políticos”.
Al anunciarse la presencia de Calderón Hinojosa en el ITESM Campus Monterrey, más de 14 mil personas firmaron una petición para cancelar la conferencia ‘La nueva economía del clima’, que impartiría el ex presidente en el XXXI Simposio Internacional de Derecho ‘En Juicio’, invitado por la Sociedad de Alumnos de dicha Licenciatura.
La petición publicada en la plataforma digital Change.org, recordó que el ex mandatario mexicano criminalizó a los dos estudiantes de posgrado, quienes fueron víctimas de un crimen extrajudicial, perpetrado por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), el 19 de marzo de 2010.
Ese día, los soldados del Ejército Mexicano ingresaron al campus Monterrey y asesinaron a Mercado Alonso y Arredondo Verdugo, alumnos acusados de ser sicarios y de estar armados “hasta los dientes”, en una versión que fue respaldada por el entonces presidente Calderón Hinojosa.
“Cuando en verdad fueron dos estudiantes a los que se les asesinó, torturó y se les implantaron armas para criminalizarlos”, señaló la petición titulada ‘Respeto para Jorge y Javier: Cancelación de la conferencia de Calderón en el Tec’.
Esta conferencia, se señaló en la petición, “representa una grave ofensa a la memoria de Jorge y Javier y de todas las víctimas de violaciones de Derechos Humanos y de desapariciones forzadas cometidas tanto por grupos de la delincuencia organizada como por miembros de la Sedena, Semar y otras instituciones encargadas de salvaguardar la paz de la ciudadanía”.
Además, la petición recordó que cuando se dio a conocer la verdadera identidad de los estudiantes de posgrado, tachados de “sicarios”, el ex presidente “poco se molestó en disculparse públicamente o en siquiera asistir a la ceremonia que se ofreció en el Tecnológico de Monterrey el 23 marzo de 2010, a la que asistió Margarita Zavala [Gómez del Campo] en calidad de primera dama”.
Ante ello, solicitaron a las autoridades del ITESM considerar las más de 14 mil firmas que respaldan su solicitud, así como demostrar “un poco de dignidad y memoria”, para declinar la invitación a Calderón Hinojosa, además de que pidieron la renuncia del presidente de la Sociedad de Alumnos de Derechos del Tec de Monterrey, por ser responsable de la organización Simposium.
“Es una persona [Calderón Hinojosa] que no tiene memoria, que se le olvidó lo que hizo cuando estuvo al mando del país y ahora va como si nada hubiera pasado, pero los muchachos sí tienen memoria, ni siquiera conocieron a Jorge y Javier, pero están luchando por el respeto a la memoria de Jorge y Javier”, dijo Rosa Elvia Mercado, madre de uno de los estudiantes asesinados, en entrevista con la periodista Azucena Uresti Mireles, en Radio Fórmula.
“Nosotros vemos la situación media complicada porque como dicen los muchachos el regresar el lugar en donde fue el crimen y no hacer nada; él en su momento, incluso la esposa [Zavala Gómez del Campo] y fue al evento a decirnos que ella iba a hacer lo posible para ayudarnos y esclarecer todo. Como dice mi esposo, ni lo hemos visto y no hizo nada”, abundó la madre de Jorge Antonio Mercado Alonso.
“Él [el ex presidente Calderón Hinojosa] lo recalcó, que eran daños colaterales, y con nosotros nunca se acercó, ni siquiera para una disculpa personal. Él único acercamiento fue con Margarita pero no hicieron nada. ¿Qué podemos esperar de esas personas?”, se preguntó la madre del estudiante de posgrado asesinado.
El pasado 19 de marzo, la actual titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Olga María del Carmen Sánchez Cordero Dávila, ofreció este martes una disculpa pública de parte del Estado mexicano a los padres de Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo, estudiantes del ITESM, asesinados por militares el 19 de marzo del 2010.
“Por la violación a sus derechos de acceso a la justicia, y de conocer la verdad de los hechos, ante los constantes obstáculos de las autoridades encargadas de impartir justicia. Les ofrezco una disculpa pública por el daño a la imagen, el honor y la buena fama de Jorge Antonio y Javier Francisco derivadas de las falsas imputaciones por diversas autoridades del Estado Mexicano y por la alteración de la escena de los hechos”, señaló Sánchez Cordero.
“A nombre del Estado Mexicano les ofrezco una disculpa pública por la violación a sus derechos en el marco del uso excesivo de la fuerza por el que fueron privados de la vida sus hijos Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo por los elementos del Ejército Mexicano”, abundó la titular de la Segob.
Los padres y las madres de los estudiantes lucharon contra la corrupción, la impunidad y el trato indigno que sufrieron sus hijos, reconoció nueve años después un representante del Estado mexicano, en Monterrey, Nuevo León, donde fueron asesinados Jorge Antonio y Javier Francisco.
En la ceremonia, Sánchez Cordero dijo que en la recomendación que emitió la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) -cuyo titular, Luis Raúl González Pérez, estuvo presente en la ceremonia- existen evidencias para determinar el uso arbitrario de la fuerza por parte de elementos de la Sedena.
“En esta nueva etapa del país, la defensa y la promoción de los derechos humanos es una prioridad, tanto en la política interior como en la exterior, por lo que se debe garantizar el derecho a la memoria, el derecho a la verdad y el derecho a la justicia”, abundó la titular de la Segob.
Ante ello, Sánchez Cordero hizo el compromiso de garantizar la reparación integral del daño que provocaron las autoridades e implementar las medidas que aseguren la no repetición de los hechos a ninguna otra persona en el país.
Entre los asistentes a la ceremonia también estuvieron Alejandro Encinas Rodríguez, Subsecretario de Derechos Humanos, Migración y Población de la Segob; además del gobernador Jaime Rodríguez Calderón; el rector del Tec de Monterrey, David Garza Salazar; y el presidente del ITESM, Salvador Alva Gómez.
EL ASESINATO DE LOS ESTUDIANTES
El 19 de marzo del 2010, en el marco de la guerra contra el narcotráfico emprendida por el entonces presidente Felipe Calderón Hinojosa, elementos del Ejército Mexicano se enfrentaron con sicarios del Cártel de los Zetas cerca de las instalaciones del Tec de Monterrey. Los soldados fueron atacados a disparos y hasta les arrojaron una granada.
Sin embargo, aquella noche los soldados mataron a balazos a Jorge Antonio y Javier Francisco, alumnos de excelencia académica de la institución educativa. Para encubrir su error, les sembraron armas y los presentaron como un par de delincuentes que estaban armados.
Sin embargo, con el tiempo se demostró que esto no era cierto. Los soldados manipularon evidencia y en videos grabados en el lugar de los hechos se puede ver cómo piden a los testigos que borren las imágenes de sus dispositivos móviles.
Las autoridades del Tec de Monterrey de aquel entonces aseguraron que ningún miembro de la comunidad universitaria había sido herido durante estas acciones y el Ejército presumió la muerte de dos supuestos delincuentes. Pero 24 horas después aclararon que eran estudiantes de excelencia de Posgrado.
El sufrimiento que vivieron sus familiares, así como la opacidad del Ejército y del Gobierno de Calderón Hinojosa llevaron a Alberto Arnaut Estrada, un amigo de ambos estudiantes, a hacer el documental ‘Hasta los Dientes’, con el que busca dignificar el nombre de Javier Francisco y Jorge Antonio.