Cuando en 2015 Melba Adriana Olvera Rodríguez fue electa como primera presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Baja California, y además la primera mujer en encabezar el área de Derechos Humanos en el Estado, llegó a un sector en el que ciertamente ya tenía experiencia, pues había trabajo en la Comisión Nacional, pero aun así se topó con obstáculos.
No fue fácil. Los grupos conservadores la acusaron de promover el matrimonio entre personas del mismo sexo o el aborto, dos temas que en Baja California -a diferencia de Oaxaca, donde hace unos días se legalizó el aborto y antes el matrimonio entre personas de un mismo sexo- siguen siendo tabú, aun en tiempos de la autodenominada Cuarta Transformación.
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Joven, comunicóloga, mujer, fue blanco de campañas sucias, de ataques de misoginia, de indiferencia y acoso. Recibió amenazas de muerte cuando en el cénit de la travesía de migrantes centroamericanos hacia Baja California, pugnó por respetarles sus derechos.
Pero el clima de adversidad en que se hubo de desarrollar no importó. Su compromiso con la defensa de los Derechos Humanos pudo más, y pese a haber recibido una institución no solo resquebrajada financieramente, sino anquilosada en la defensa de los Derechos Humanos, llevó a la CEDH a un nivel que no había conseguido desde aquella primera titularidad en la Procuraduría Estatal de los Derechos Humanos que encabezó el maestro José Luis Pérez Canchola.
Con un presupuesto reducido -los diputados se negaron sistemáticamente a incrementarlo- y sin edificio propio, Melba Adriana abrió la Quinta Visitaduría para atención de derechos de periodistas, miembros de la comunidad LGBTT, población con discapacidad y derechos relacionados con el medio ambiente. Estableció programas especiales para menores y mujeres. Fue parte importante para la justicia en el caso de los ancianos fallecidos en una casa hogar en Mexicali, y para la atención y protección de los derechos de los migrantes que llegaron al Estado en los últimos tres años.
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A mayo de 2019, cuando dejó la CEDH y durante su periodo de cuatro años, atendió 28 mil 153 solicitudes de intervención, abriendo más de 10 mil expedientes y concluyendo más de 26 mil, entre los que había pendientes de 2010.
Creó una unidad de peritaje y rescató a la institución de la quiebra. De hecho cuando en el último trimestre de 2018 y el primero de 2019, el Gobierno del Estado encabezado por Francisco Vega de Lamadrid dejó de enviar, a través de la Secretaría de Planeación y Finanzas, los recursos económicos a otros poderes y a entidades descentralizados y autónomas como la CEDH, la Comisión no se vino abajo debido al plan de ahorros que Olvera había estado programando para etapas difíciles.
El último día de mayo concluyó su periodo en la CEDH de Baja California, y aunque había adelantado se dedicaría a la vida académica y a alguna representación de organismo internacional o nacional de Derechos Humanos en el Estado, fue por más.
Esta semana el titular de la Unidad de Enlace de la Secretaría de Gobernación, Jesús Saldaña Hernández, envió a la presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores la terna que a su vez remite el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, para seleccionar al titular de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV). Entre las tres personas propuestas aparecen Melba Adriana Olvera Rodríguez, Mara Gómez Pérez y María de los Ángeles Haces Velasco.
En una carta firmada por López Obrador dirigida a la presidenta del Senado, de la ex titular de la CEDH en Baja California, destaca que es egresada de la Licenciatura en Comunicación por la UABC, con máster en Derechos Humanos, Estado de Derecho y Democracia. Que fue directora general de Atención a la Discapacidad en la CNDH, además de vicepresidenta de la Federación Mexicana de Organismos Públicos de Derechos Humanos Zona Costa.
Melba pasó por un proceso de selección en el cual participaron más de veinte personas de varios estados de la República y del centro. Aprobó los exámenes correspondientes y en la entrevista con el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, evidentemente le fue mejor. Su nombre llegó a la lista corta del Presidente y hoy está en el Senado de la República con la probabilidad de ser electa comisionada ejecutiva de Atención a Víctimas.
Entre otras muchas responsabilidades, la titular de la Comisión de Atención a Víctimas debe garantizar el acceso a servicios multidisciplinarios y especializados que el Estado proporciona a las víctimas de delitos o por violación a sus derechos humanos para reincorporarlos a la vida social. La autoría del programa de atención integral a víctimas, proponer políticas públicas para la prevención de delitos y violaciones a los derechos humanos, y facilitar condiciones dignas, integrales y efectivas para la atención de víctimas.
La bajacaliforniana no descansa, por el momento se ha incorporado al equipo del alcalde electo de Tijuana, Arturo González Cruz, en calidad de la propuesta para la Dirección de Atención al Migrante. Así fue presentada oficialmente el jueves 26 de septiembre, un día después que el Presidente de la República incluyera su nombre en la terna para la CEAV.
La licenciada Melba Adriana sigue haciendo camino en el área de los Derechos Humanos, ahora en la antesala de una posición nacional. Suerte, pues.
