Tras nueve meses de atraso, las empresas IEnova y TC Energy anunciaron este martes 17 de septiembre la entrada en operación comercial de gasoducto marino sur Texas-Tuxpan, con una inversión de aproximadamente 2 mil 600 millones de dólares, cuyo contrato fue renegociado con Comisión Federal de Electricidad (CFE), tras la solicitud de arbitraje por parte de la empresa paraestatal.
“[El gasoducto] tiene capacidad de transportar 2 mil 600 millones de pies cúbicos diarios de gas natural, incrementando la capacidad de importación de este hidrocarburo a México en aproximadamente 40 por ciento y asegurando el abastecimiento en zonas que hoy presentan déficit de suministro”, señaló IEnova a través de un comunicado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
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El gasoducto marino abastece de combustible a varias plantas de generación ubicadas en Altamira, Tuxpan y en la región central del país, a través de sus interconexiones con los de Tuxpan y Tamazunchale de TC Energía, así como con el Sistema de Transporte y Almacenamiento Nacional Integrado de Gas Natural (Sistrangas), el sistema nacional operado por el Centro Nacional de Control de Gas Natural (Cenagas).
El pasado 24 de junio, la CFE envió a Infraestructura Marina del Golfo (IMG) -una sociedad conjunta entre TC Energía e Infraestructura Energética Nova-, una solicitud de inicio de arbitraje, mediante la cual demandaba la nulidad de ciertas cláusulas del contrato de servicios de transporte del ducto marino Sur de Texas-Tuxpan.
Sin embargo, el 26 de agosto, la CFE y tres de las cuatro empresas trasportistas y constructoras de gasoductos (IEnova, Carso Energy y TC Energy), llegaron un acuerdo, lo que significará un ahorro de 4 mil 500 millones de dólares para la empresa paraestatal, así como una ampliación del plazo de 25 a 35 años y una tarifa nivelada a lo largo de la vida del mismo.
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“Se logró por fin un acuerdo. Quiero señalar o subrayar que esto fue posible por la voluntad, disposición al diálogo de los empresarios, porque legalmente ya se habían firmado los contratos, ya se habían acordado condiciones que nosotros consideramos dañinas para la Hacienda pública”, declaró el presidente Andrés Manuel López Obrador ese día, durante su conferencia de prensa matutina.
Luego, el 11 de septiembre, el mandatario nacional informó que la CFE logró un acuerdo que había quedado pendiente con la empresa de origen mexicano Fermaca, que tiene dos gasoductos (Laguna-Aguascalientes y Villa de Reyes-Aguascalientes-Guadalajara), con lo que se logró un ahorro de 672 millones de dólares, de rebajas en tarifas, además de suministro asegurado para los próximos 20 años.
