Relacionando gastronomía, identidad y cultura, el realizador Marco Aurelio Celis brindó una perspectiva diferente al tema de la migración a través del cortometraje sobre el chef Ruffo Ibarra, logrando el segundo lugar de casi 500 historias, de 46 países, en la competencia Nespresso Talents en la edición 72 del Festival de Cannes
Centrado en la historia del chef bajacaliforniano Ruffo Ibarra, del restaurante Oryx Capital, el joven tijuanense Marco Aurelio Celis realizó el cortometraje “Ruffo”, enfocándose en la persona, la gastronomía y las actividades humanitarias que este realiza a favor de los migrantes, en un trabajo cinematográfico de casi tres minutos con el que obtuvo el segundo lugar en la competencia internacional de la edición 72 del Festival de Cannes, y que hoy espera los resultados del Festival Internacional de Cine de Morelia.
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Seleccionado de entre casi 500 cortometrajes provenientes de 46 países, “Ruffo”, basado en el concepto Somos lo que Comemos, fue reconocido en el concurso Nespresso Talents 2019, donde el realizador bajacaliforniano, de 24 años de edad, recibió el premio de 2 mil 500 euros en la costa francesa, sede del más prestigiado encuentro cinematográfico, cuya experiencia relató a ZETA.
“Tres semanas antes del festival nos avisaron ‘Ruffo’ estaba entre los tres mejores cortometrajes, lo cual fue una emoción muy grande, ellos nos invitaron a la ceremonia donde un cortometraje de Nueva Zelanda resultó con el primer lugar, mientras que otro de India, el tercero. Haber ido es una experiencia difícil de digerir, estar presente significó conocer a directores, productores y genera una gran motivación a seguir creando y saber que no es imposible llegar a Cannes”, dijo el realizador, quien considera que el logro se basó en el equipo de trabajo, en este caso de la productora Spécola y LABC Entertainment.
“El objetivo era contar una historia coherente, digerible, que representara lo que queríamos, sin pensar en un festival. Conociendo a (el chef) Ruffo Ibarra me di cuenta que teníamos intereses similares en la migración, aunque la temática era la comida, Ruffo era inevitable dentro del tema. Platicando con él, sabíamos que podríamos darle un giro donde la comida fuera un canal de comunicación con el que puedes crear comunidades, relaciones y compartir más allá de un platillo. En Tijuana sabemos que hay opiniones encontradas sobre la migración, por ello brindamos esa perspectiva”, subrayó Celis, quien desde la secundaria tuvo inquietud por realizar vídeos y desarrolló su interés por la fotografía y el cine de forma profesional.
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El cortometraje relata el amor y la pasión por la comida como herencia de la madre de Ruffo, a la que desde pequeño veía cocinar y emulaba algunos de sus platillos, sobre todo su favorito: “Las papas con chorizo es un plato que tengo pidiéndole a mi madre desde que recuerdo, significa mucho porque representa a mi familia, representa mis raíces como chef mexicano, pero también habla sobre el ingrediente, obviamente ese plato mi madre me lo ha hecho infinidad de veces, pero nunca me ha quedado igual, ‘no puede ser que no me quede igual si estamos hombro a hombro y me estás diciendo cómo hacerlo’, siempre pausaba y me decía: ‘Te faltó ponerle amor, el ingrediente secreto es el amor’”, expone el reconocido chef en el filme, donde afirma cocinar y compartir en una tierra hecha de migrantes que buscan el sueño americano.
Referente al sueño por crear cine, Celis detalló al semanario su pasión: “Quería involucrarme en el cine de una u otra forma, asistí a un cortometraje a los 17 años, sin paga ni nada, solo quería conocer ese mundo. Participé en una filmación italiana durante un mes y medio. Después me dieron la oportunidad en Spécola, a quienes admiraba desde su película ‘Navajazo’. Los caminos empezaron a tomar sentido, hoy nos reconocen, pero el cine viene desde los domingos que miraba películas fuera de lo convencional, con mi padre, pero mi fascinación por grabar y editar siempre fue por tratarse de un medio, no solo entretener, sino para transmitir un mensaje y sentimientos”.
Por su parte, la productora Spécola comentó que más que las expectativas de los festivales, buscan enfocarse en entregar productos de calidad, y “Ruffo” es un proyecto orgánico, con objetivo y mensaje claro como el de la migración.
“Marco había dado seguimiento a la caravana migrante, es algo que personalmente ha trabajado, de hecho tiene un corto ‘La tierra que habitamos’ que aún no se estrena, mientras que Ruffo Ibarra apoya a migrantes con la fundación This is about Humanity, es ahí donde estos dos personajes hacen el clic perfecto para hablar sobre la gastronomía con el tema migratorio. Y la productora siempre busca conjuntar proyectos adecuados para los perfiles adecuados, en este caso director y objeto crearon esa atmósfera de lo que se quiere decir, con lo que refleja el personaje”, expresaron la productora y encargado de sonido del cortometraje, Nicolasa Ruiz y Ricardo Silva, respectivamente.
Referente a los planes y proyectos en puerta, Marco Aurelio Celis indicó a ZETA que continuará motivado a crear y trabajar en equipo.
“El reconocimiento es para todo el equipo, a mí me interesa seguir explorando el tema de la migración, colaborar y compartir la experiencia. Como ciudadano y realizador siento la obligación de conocer qué es lo que está sucediendo y de poder brindar una perspectiva por medio del cine como lo hago en el cortometraje ‘La Tierra que Habitamos’ donde comparo la situación de un migrante haitiano y un hondureño”, finalizó el tijuanense, cuyo trabajo fue considerado por la Secretaría de Turismo del Estado de Baja California, como una aportación a la industria fílmica y gastronómica.
