El próximo 8 de agosto se cumpliría un año desde que esta casa editorial solicitó al Congreso del Estado la entrega de facturas relativas a los gastos de diputados de las diversas fuerzas políticas relativas a los primeros ocho meses del año. Luego de varias impugnaciones, la respuesta del Legislativo fue que la parte recurrente requería pagar el costo de 85 mil fojas para acceder a la enorme cantidad de documentos derivados de la solicitud. El tema fue llevado a los consejeros del Instituto de Transparencia y Acceso a la Información Pública (ITAIP), quienes acordaron que la cantidad requerida era excesiva, sobre todo para gastos que debían ser públicos, por lo que ordenó la inspección física para una depuración de documentos. Tras varias semanas de inspección y de definición de expedientes, se pudo depurar la documentación, fijando como fecha el 16 de mayo para la entrega de la misma en las instalaciones del ITAIP. Sin embargo, los representantes de la dependencia dejaron plantados al secretario técnico y a la parte recurrente, por lo que dicha institución deberá ser multada y nuevamente se definirá una fecha para la entrega. Tal parece que el Poder Legislativo hace hasta lo imposible por no tener que entregar la información. ¿A qué le teme? Es pregunta transparente.
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