Para Toros de Tijuana, se ha vuelto una costumbre hacer su entrenamiento primaveral en Tucson, Arizona. Desde hace cinco años, el equipo acude al Kino Sports Complex, el cual se convierte en guarida para jugadores y directiva durante un mes.
En 2015, las escuadras de Toros, Rojos del Águila, Tigres y Piratas hicieron su pretemporada en este recinto que fue casa de Medias Rojas de Chicago y Cascabeles de Arizona, mientras que en 2016 estuvieron Pericos de Puebla, Rojos del Águila y Toros. Para 2017 y 2018, los fronterizos entrenaron sin compañía en el complejo, aunque el año pasado fueron visitados por Tigres de Quintana Roo para una serie de juegos de preparación en fin de semana.
Y ha resultado un amuleto, ya que el trabajo en el desierto arizonense se ha visto reflejado en boletos a playoffs consecutivos. Pero la verdadera razón es que durante su estancia, el equipo de los “bureles” se traslada con facilidad al área conurbada de Phoenix, un viaje de 110 millas de distancia, para enfrentar a equipos de organizaciones de Grandes Ligas en duelos de pretemporada.
Esta ocasión, se agendaron juegos amistosos contras sucursales de Cerveceros de Milwaukee, Dodgers de Los Ángeles, Medias Blancas de Chicago, Rangers de Texas, Indios de Cleveland, Rojos de Cincinnati, Padres de San Diego y Atléticos de Oakland.
También se medirán a la selección de Italia y a un equipo de la Liga de Japón, cerrando su etapa de preparación el miércoles 2 de abril en Ensenada, Baja California, con el tradicional encuentro contra Marineros en el Deportivo “Antonio Palacios”. El viernes 5 será la gran inauguración en el Estadio Chevron ante Generales de Durango.
Mientras llega esa fecha, los entrenamientos van avanzando conforme se integran los jugadores al plantel. En el Early Camp, llevado a cabo en Tijuana la última semana de febrero, estuvieron trabajando los receptores Gilberto Galaviz y Juan Apodaca; los jardineros Nick Torres, Logan Watkins, Cyle Hankerd y Beau Amaral; los jugadores de cuadro Juan Pérez, José Guadalupe Chávez, Isaac Rodríguez, Ricky Álvarez, Eudor García y Lenny Villalvazo. Además de los lanzadores Manny Barreda, Tomás Solís, Mark Serrano, Jesús Pirela, Carlos Hernández, Miguel Peña, Tyler Cravy, Jorge Pérez, Aaron Kurcz y Fabio González.
En Arizona se han ido incorporando Fernando Pérez, Gabriel Gutiérrez, Xorge Carrillo y Maxwell León.
Ha sido un invierno muy movido para la directiva, con las contrataciones de Ricky Álvarez, Jesús “Cacao” Valdez, Niko Vásquez, Luis Alfonso “Cochito” Cruz, Logan Watkins, Dariel Álvarez, Nick Torres, los lanzadores Terance Marín, José Rafael “Jumbo” Díaz, Raúl Valdés y el regreso de Jason Urquídez.
Los trabajos del campo de entrenamiento son coordinados por el manejador Óscar Robles y parte de su cuerpo técnico con Alfonso “Houston” Jiménez, Marco Romero, Roberto Espinoza, Enrique Couoh, Héctor Álvarez, Gerardo Garza, Miguel Pérez, Alfredo Sulvarán, Víctor Durán, Cindy Bernal y Alex Valdez.
Robles sabe que hay muchos jugadores de buen nivel y será difícil tomar decisiones para conformar el plantel de 28 peloteros.
“Hay muchas caras nuevas, hay que platicar con los que van llegando, saber de su potencial, en qué posición se sienten más cómodos, saber en qué nos pueden ayudar, que nos abran los ojos y nos hagan tomar decisiones más difíciles. Es un equipo muy completo, quienes no vayan a jugar, pueden jugar todos los días, sólo son nueve por juego y el resto debe estar consciente y siempre atento para ayudar”, afirmó el timonel.
