Uno de los primeros discursos de Andrés Manuel López Obrador como Presidente de México, ante 448 diputados, 110 senadores, invitados, mandatarios y representantes internacionales, fue “por el bien de todos, primero los pobres”, exhortando a sumarse al plan de austeridad que entraría en vigor durante su sexenio y que contemplaría la reducción de sueldos, el rechazo a los bonos; además de la prohibición de gastos médicos mayores, la portación de autos de lujo para funcionario y hacer viajes en clase ejecutiva.
Sin embargo, para algunos tal discurso no trascendió.
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Esta semana circuló en redes sociales una fotografía donde la actual diputada local de Baja California Sur, Perla Flores Leyva, salía junto a su esposo Gustavo López Avilés, recibiendo las llaves de un nuevo vehículo de lujo Mercedes Benz, ignorando por supuesto el plan de austeridad al que ella debió sumarse por ser representante de la coalición “Juntos Haremos Historia”, siendo representante del Partido Encuentro Social (PES).
De acuerdo al portal de la agencia de autos de esa línea, estos automóviles tienen costos de 545 mil pesos hasta un millón 221 mil pesos, situación que ciudadanos tacharon de irracional e incongruente.
“Esto es una incongruencia total, aquí no importa si el carro se lo compró con su sueldo, con sus ahorros o si lo va pagar a mensualidades sin intereses; lo que molesta es que le quieran ver la cara a uno desde la campaña, diciendo que se acabarían los lujos, que se bajarían el sueldo y que su gobierno sería austero, y luego vas y te compras un Mercedes. Tengan tantita madre, si el carro fuera tan barato como dicen, todos tendríamos un Mercedes”, señaló Jorge Emilio Morales, un ciudadano inconforme.
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Ante ello, la diputada del gobierno de la Cuarta Transformación aseguró que este automóvil de lujo fue un obsequio de su esposo, a cambio de su anterior vehículo que le había obsequiado unos años atrás, incluso antes de figurar en la vida política.
“Mi esposo me cambió mi vehículo, antes de ser política él ya me había regalado un vehículo del año hace cuatro años, y en este año me lo cambió por uno que parece muy aparatoso, pero realmente es más económico que el resto de los vehículos”, señaló.
De acuerdo al testimonio de la diputada, el vehículo anterior fue recibido como enganche del nuevo Mercedes y el resto será pagado en mensualidades, las cuales le serán descontadas a su esposo, un activo empresario sudcaliforniano.
“Eso se lo van a descontar por cierto a la cuenta empresarial, mi esposo es empresario desde hace muchísimos años, no es algo que sea de hoy, él viene de familia de libreros, de jugueterías y tenemos nuestro negocio todavía funcionando, de ahí él me regaló el carro”, insistió la diputada.
El auto, un CLA 200, tiene un costo de 545 mil pesos y es el más económico que maneja la marca, y respecto a la contradicción que da su nueva unidad móvil con la austeridad que propone el Presidente de la República, confirmó que se ha sumado al plan de austeridad y no tiene nada que ver con que su esposo haya querido obsequiarle un automóvil de lujo.
“La austeridad se está manejando desde los salarios, acordamos reducirnos el salario y yo creo que cualquiera que trabaje merece un salario no critico eso, estamos trabajando, entramos al plan de austeridad con la reducción de sueldos, bonos y demás”.
Actualmente los diputados perciben un salario de 88 mil pesos más algunas bonificaciones, sin embargo, señalan tener el compromiso de donar el 30% a su distrito, sin la responsabilidad ni obligación de comprobarlo.
