Por medio de su fiscal general, Jeff Sessions, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la implementación de una política de “tolerancia cero” en la que todo migrante indocumentado que cruce la frontera de México hacia la Unión Americana, será procesado penalmente.
Durante la conferencia de prensa que ofreció en la frontera de San Diego, a unos metros del muro en Playas de Tijuana, el 7 de mayo, Sessions declaró “no vamos a dejar que este país se desborde, las personas no van a entrar en caravana ni en estampida a nuestra frontera”.
Esto como referencia a la Caravana Migrante que encabezó una marcha hasta ese mismo punto, pero del otro lado del muro, para anunciar que solicitarían asilo en Estados Unidos.
El funcionario federal informó que 35 fiscales y 18 jueces de inmigración fueron reubicados a la frontera con México. La mitad de los juzgadores, señaló, trabajarán específicamente en las solicitudes de asilo.
Sessions aseguró que solo se aceptarán solicitudes de asilo presentadas en las garitas entre México y Estados Unidos, por lo que, si un solicitante ingresa por algún otro punto de la frontera, se le fincarán cargos penales.
Respecto a la implementación de una nueva política para separar a padres e hijos que cruzan de manera indocumentada la frontera, Thomas Homan, director interino del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), aseguró que no se trata de una práctica nueva.
Advirtió que, en todos los casos, si los adultos no pueden comprobar los lazos familiares con los menores, son separados, así como si existe sospecha de que los niños son víctimas de trata.
Pese al fuerte operativo de seguridad que se instaló en el área, el activista William Johnson logró llegar hasta unos pasos de Sessions para gritarle a través de un megáfono: “¿Vienes a separar familias… tienes corazón, tienes alma?”.
Johnson forma parte de la campaña Backbone y aunque fue alejado de Sessions por una integrante de su staff, continuó la protesta a la distancia. “¿Por qué estás aquí? Vete. No te queremos en nuestro condado, no te queremos en nuestro Estado. ¿Por qué trabajas para esta administración? Eres un hombre malvado. Este muro no tiene sentido, es racista, es una pérdida de tiempo”.