El incendio ocurrido el martes 20 de junio en el bosque interior del 28 Batallón de Infantería, en Tijuana, cobrando la vida de un bombero.
Se trata de Jesús Adolfo Balderrama Aguilar, de 27 años de edad e integrante de la Unidad de Rescate de la Dirección de Bomberos de Tijuana, al que formaba parte desde los 10 años de edad, cuando ingresó al programa Bomberos Junior. La mayor influencia para su vocación de servicio fue su padre, el capitán Adolfo Balderrama González, quien continúa en servicio activo.
Desde enero de 2005, participó como voluntario en el cuerpo al que se integró como empleado de confianza en 2007, tras pertenecer a la primera generación de la Academia de Bomberos. Preocupado por entregar lo mejor de sí, se capacitó como Técnico Básico en Urgencias Médicas y en Rescate Automotriz Básico, además de participar en cursos de actualización para bomberos industriales, de brigada contra incendios, de búsqueda y rescate urbano (USAR, por sus siglas en inglés) y formaba parte de la Fuerza de Tarea Baja California 3.
Durante años, Balderrama fue compañero en la unidad de rescate de Joel Félix Ubach, bombero también fallecido en el cumplimiento de su deber, en noviembre de 2016, en honor de quien se nombró la Estación de Bomberos No. 17, en la colonia Altabrisa el pasado 14 de marzo.
Le sobreviven su padre, su madre María Dolores Aguilar Villa, su hermana Mónica y su esposa Betzaida Fregoso Ramírez, con quien se casó en 2009 así como sus 3 hijos, Ingrid Loreley de 7 años; Kendra Estefanía de 4 y Adolfo de un año y medio de edad.
Ayer jueves, a las 20:00 horas, fueron velados sus restos en la Central de Bomberos de Tijuana. Hoy viernes se realizarán las honras fúnebres.
