Estrenando herradura, Bronco emprendió su galope en Tijuana donde presentó su disco “Primera fila”, ligado a una veintena de melodías que protagonizaron una velada nostálgica, donde 3 mil personas corearon al unísono, probando la trascendencia de la agrupación
Buscando conquistar a las nuevas generaciones, el cantautor norteño José Guadalupe Esparza sumó a sus hijos a la alineación de Bronco, misma que comanda con su inseparable tecladista y acordeonista, Ramiro, con quien el sábado 3 de junio presentó una serie de ensambles y versiones renovadas de sus éxitos, en un recital nostálgico y romántico.
Temas como “Adoro”, “Libros tontos” y “A punto de olvidarte” fueron de los primeros que el quinteto insertó a la velada ofrecida en la Plaza de Toros del Hipódromo, donde unos 3 mil seguidores portaron bandas sobre sus frentes con el nombre de la agrupación que esa noche protagonizó su intento por mostrarse actualizada.
“Seguimos con la idea de conquistar, y para eso hay que atreverse, no podemos adaptarnos a lo que está de moda, si está el reggaetón no vamos a hacer reggaetón, o banda porque esté sonando mucho, aunque esté dentro de la música regional mexicana; creo que el disco ‘Primera fila’ habla de un Bronco renovado, porque incluimos cosas frescas a nuestros temas ya conocidos, como algunos arreglos de cuerdas y violines. Adaptarnos no nos cuesta mucho porque tenemos muchos capítulos nuevos que contar, y agregar a nuestra historia que nos arropa en estos momentos”, relató el líder de Bronco.
En punto de las diez de la noche inició la cabalgata de Bronco, saltando al templete colocado en uno de los extremos del redondel, donde apoyados por diseño de luces y gráficos sobre pantallas de led, mostraron el nuevo rostro del quinteto, entre ellos, el de René Esparza, José Esparza y Javier Cantú, quienes hicieron anotaciones sobre la experiencia que comparten dentro de esta institución musical.
“Sin duda, Bronco siempre ha sido una agrupación que ha sido conocida por sus integrantes, y creo que es un gran reto ser las nuevas caras de la banda, es complicado, pero el público nos ha dado seguridad, ellos nos han hecho parte oficial. Musicalmente agradecidos con mi padre y con Ramiro por darnos rienda suelta, nos han tenido confianza, cuidamos el sello y estilo de Bronco que lo ha caracterizado por más de 35 años. Le hemos dado una evolución al sonido”, apuntó René Esparza en su visita a Baja California.
La nostalgia invadió Tijuana cuando aparecieron las melodías y primeras estrofas de “Amigo Bronco”, “Sheriff de chocolate”, “Los castigados”, “Nunca voy a olvidarte”, “Que no quede huella” y “Si te vuelves a enamorar”, éxitos que han dado vida a la carrera musical de Guadalupe Esparza y sus secuaces que hoy, sin “Choche” y Javier, enfrentan una industria musical que se adapta a los tiempos, nuevas formas de consumo y la era de las redes sociales, en donde todo sobrevive un tiempo como moda.
“Nosotros no vamos con la corriente, los proyectos se hacen para vender un rato, pero esas agrupaciones que usan la moda no dejan ser ni son, cuando todo un grupo de gente hace lo mismo se convierten en una moda, pero de que pasan, pasan. Ahí están los duranguenses, movimiento alterado, no podemos negar el éxito, pero nosotros creemos en nuestra música, en las letras; nosotros ya hemos hecho cosas con mariachi, banda y con los subgéneros del regional mexicano, y no necesitamos estar ligados a la moda para subsistir”, subrayó Esparza, quien relató que cuando Sony los invitó a realizar el disco “Primera fila” y Ocesa se unió como equipo de trabajo, fueron ellos quienes decidieron que la banda recuperara su nombre original, pero consideran que el mote no es lo que los hace, sino la historia que han logrado en 35 años.
“Como El Gigante de América teníamos el trabajo que queríamos, quizá no aparecíamos en la televisión ni éramos parte del catálogo de la radio, pero ya con el nombre de Bronco se abrieron muchas puertas, y hoy Bronco sigue cabalgando, contando historias nuevas. No estamos en la época gloriosa de la Broncomanía de los 80s y 90s, hoy tenemos que enfrentarnos a otros cambios, hoy estamos en tiempos de redes sociales, cosas que nosotros desconocíamos. Hay que aprender a vivir en eso. La venta del disco físico ha desaparecido, todo se hace digital, pero vale la pena comprar este disco y coleccionarlo”, subrayó “Lupe” Esparza.
Respecto a la falta de música infantil, Esparza dijo a ZETA que es buena idea hacer un disco completo para niños, pero por el momento un compilado de sus canciones infantiles podría estar entre sus planes, pues considera lamentable el que desaparezcan los espacios y canciones para niños en radio y televisión.
“Dos mujeres, un camino”, “Doctor”, “Sergio el bailador”, y “Oro”, fueron otros de los temas que Bronco interpretó ante el furor de varias generaciones reunidas en Tijuana para escuchar en vivo clásicos del cancionero mexicano, algunos a dueto con Cristian Castro, Julieta Venegas, Illya Kuryaki and the Valderramas y Lemongrass dentro del concepto “Primera fila”.
La velada a puro galope cerró a ritmo de “Con zapatos de tacón”, marcando un reencuentro sobresaliente de Bronco, con la audiencia tijuanense.