Luego del conato de incendio que se presentó durante la tarde del 27 de julio en el Hospital General de Tijuana, la institución necesitó un día para operar casi plenamente, informó el Director Fernando Peñuñuri.
Generado en un cuarto de 3 por dos metros de la planta baja, fue controlado después de algunos minutos sin que creciera de forma considerable. Pero el humo rápidamente se propagó a los pisos superiores por los ductos de ventilación.
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Esto provocó la evacuación de 169 pacientes del hospital, siendo algunos de ellos trasladados a clínicas cercanas o atendidas en las inmediaciones del edificio, con ayuda de personal de Bomberos, Cruz Roja, Policía Municipal y Protección Civil.
En total fueron 17 pacientes los que no fueron evacuados durante la contingencia, siendo 5 de ellos los intubados en la Unidad de Cuidados Intensivos Adultos y 12 menores del Servicio de Neonatología, sin que en ningún momento estuvieran cercanos al peligro del fuego, informó la dirección del hospital.
Tras 15 minutos de labor por parte de los bomberos, los pacientes fueron reingresando desde planta baja hasta el cuarto piso, pues los demás niveles requirieron limpieza e inspecciones preventivas, mientras que el servicio de emergencias fue redirigido a otras instituciones de salud pública e incluso algunos hospitales privados.
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Se permiten nuevos ingresos en el hospital, mientras que urgencias pediátricas siguen atendiéndose en otras instituciones. Personal de bomberos mantiene permanencia en el hospital para realizar los peritajes que revelen el origen del incendio, si bien personal del Hospital ha manifestado que este provino de trabajos de soldadura realizados al interior del recinto.
Olor a humo en pisos superiores, ventanas y mosquiteros rotos y daños por hollín en la zona donde se concentró el fuego, fueron las consecuencias del siniestro, declaró Peñuñuri, informando que si bien existieron situaciones médicas por motivo del pánico, no hay fallecimientos ni lesionados.
Personal del Hospital y familiares de los pacientes que intervinieron en un primer momento para intentar sofocar el fuego, señalaron que tanto los extintores como las mangueras del sistema contra incendios del edificio no funcionaron adecuadamente, a lo que Peñuñuri comentó que la revisión y reemplazo de extintores se realiza cada año y que en caso de desperfecto, el personal del hospital cuenta con la capacitación suficiente para abrir los extintores y aprovechar la espuma caduca en su interior.
“Todo mundo supo qué hacer, a dónde dirigirse, a donde llevar a nuestros pacientes” informó Peñuñuri, destacando la importancia de los simulacros que se han practicado en el hospital, que llegan a simular escenarios de mayor riesgo.
En el operativo para controlar el incendio participó personal de distintas estaciones, siendo alrededor de 45 los bomberos en 15 unidades que se apersonaron en el sitio para controlar.
Sergio Ríos, Subdirector Operativo de Bomberos, comentó que el peritaje para conocer la causa del conato se realizará durante los próximos días.
