El Sistema de Cómputo Distrital (SCOD), programa informático usado para capturar los votos por el Instituto Estatal Electoral (IEE), falló en múltiples ocasiones durante las sesiones de cómputo, no permitiendo el tecleo de nuevas cifras, o, a decir de los consejeros, también se modificaron los números que habían sido capturados.
Tal es el caso de la presidenta del Distrito 13, María Elena Ríos Bravo, quien dijo a ZOOM POLÍTICO que “se capturaban las actas (con los resultados) y después cambiaba, después de cierto tiempo ya no coincidía”.
El representante del Partido Encuentro Social (PES) en ese Distrito, Gershom Uriel López Aquino, expresó:
“Nosotros detectamos que las sábanas (SCOD) eran diferentes al acta de las mesas de trabajo, la presidenta aceptó que se estaba cometiendo este error, nosotros claramente vemos un fraude en este aspecto”. El pesista aseguró que la tendencia de los errores “favorecía claramente al PAN”, y a su candidato, Juan Manuel Gastélum Buenrostro.
Al respecto Ríos Bravo, la consejera señaló que pidió ayuda al personal de informática del IEE para poner en marcha el sistema, pero la falta de empleados disponibles obligó a que a partir del 12 de junio –cuatro días después de iniciada la sesión de cómputo distrital– el proceso iniciara de nuevo, utilizando hojas de cálculo del sistema operativo Windows¸ que se imprimían para ser firmadas por los representantes de partidos políticos. Cabe destacar que esos archivos son totalmente modificables.
Por tan solo poner un ejemplo, un acta de inconformidad firmada por el representante del PES en el Distrito 12, Juan de Dios Apocada Dueñas y recibida por el consejero presidente señala que al mediodía del 9 de junio, no había “Sistema Digital del Instituto Estatal Electoral”, lo que viola la Ley Electoral del Estado de Baja California. Por lo anterior, era “imposible advertir si continúan las fallas en la captura de datos en el Sistema digital de las actas escrutadas en la presente sesión”, describe el documento, anulando cualquier certeza en la captura de los resultados que cada candidato obtuvo el 5 de junio.
El Consejero Presidente del Instituto Estatal Electoral, Javier Garay Sánchez, negó “la caída del sistema”, y declaró que “en algunos casos, la captura ha sido deficiente por parte de los capturistas, y sobre todo al final, que es cuando ingresan los votos reservados, ha habido ahí una confusión de cómo hacerlo”. En ese sentido, explicó que “los datos venían mal referenciados”, por lo que el sistema “se atoraba”, principalmente en Tijuana, donde la diferencia entre los tres primeros lugares en la elección de munícipe es poca, lo que aumentó la cantidad de votos reservados, dificultando la labor de los capturistas.
Funcionario electoral dijo a ZETA que no hubo una capacitación previa para el uso del sistema, lo que aunado al cansancio de muchas horas de trabajo, derivó en errores, sin negar que los cómputos se iban y regresaban intermitentemente.
No solo en el sistema de captura hubo errores. Contrario a lo que dispone el Artículo 254 de la ya mencionada Ley, las sesiones de los cómputos distritales no fueron correctamente vídeo-grabadas. Al revisar el sistema de transmisión en línea del IEE, frecuentemente se mostraba solamente una pantalla negra con la leyenda “el emisor detuvo la transmisión”, por lo que la sociedad tijuanense no contó con las herramientas para estar al tanto de lo que sucedía durante el cómputo distrital.
Hechos como la violación de los sellos de la bodega del Distrito 16 por parte de su consejero presidente, Gonzalo Manrique, o las trifulcas en el Distrito 11 producto de las anomalías que los representantes del PES y del Partido Revolucionario Institucional (PRI) descubrieron, fueron ocultados de las cámaras de seguridad; sin embargo, algunos interesados superaron esa dificultad, grabando vídeos con sus teléfonos celulares, y en algunos casos, transmitiendo en vivo a través de aplicaciones como Facebook o Periscope.