A unas horas de la tragedia en el complejo petroquímico de Pajaritos, en Veracruz, donde una explosión acabó con la vida de al menos 24 personas y dejó lesionadas a 136, poco cambia el panorama, pues aunque las autoridades dicen que la vida de los veracruzanos vuelve a la normalidad, las contingencias siguen presentándose y hay 18 desaparecidos.
La tarde del miércoles 20 de abril un fuerte estallido sorprendió a los trabajadores de las instalaciones ubicadas en Coatzacoalcos, copropiedad de Petróleos Mexicanos (Pemex) y operada por la empresa Mexichem. Eran aproximadamente las 15:15 horas cuando se registró el siniestro en la Planta Clorados 3.
Testigos de los hechos vieron cómo sus compañeros quedaban envueltos en llamas sin poder hacer nada para ayudarlos, pues también sufrieron graves quemaduras en la piel, el cabello y los ojos.
La conflagración al interior de la planta fue controlada alrededor de las 18:30 horas por elementos contraincendios de Pemex y autoridades civiles; sin embargo, la alerta hacia el resto de la población del puerto duró 24 horas debido a la emanación de gases y cenizas –producto de fibra de vidrio con cloroetanol– que pudiesen causar lesiones a los habitantes.
Fue hasta la noche de ese infausto día que diversos funcionarios ofrecieron una rueda de prensa. Ahí estuvieron el titular de la paraestatal, José Antonio González Anaya; el Gobernador Javier Duarte de Ochoa, y el coordinador nacional de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, Luis Felipe Puente. Se dieron a conocer los preliminares, mas no las causas de la tragedia.
De los 136 lesionados, 88 pasaron la noche hospitalizados, 13 de ellos en calidad de graves, los otros 48 fueron dados de alta y se retiraron a sus casas.
Mientras que en los municipios de Coatzacoalcos, Minatitlán, Nanchital, Agua Dulce, Ixhuatlán del Sureste y Moloacán, se suspendieron las clases, las labores en el resto del complejo petroquímico continuaron y este jueves 21 se registró una nueva contingencia que no llegó a mayores: una fuga de cloro, no muy lejos del sitio de la tragedia. Por fortuna, los trabajadores fueron desalojados y la fuga fue controlada gracias al cambio de dirección del viento.
Mientras se indaga el paradero de los 18 desaparecidos, los lesionados fueron canalizados a diversos hospitales del país. Uno de los pacientes más graves se encuentra en el área de Quemados del Centro Médico de Occidente del IMSS, en la ciudad de Guadalajara. Se trata de un hombre de 35 años que presenta quemaduras de primer y segundo grado en las piernas y los brazos, producidas por agentes químicos y fuego directo, en el 15 por ciento de su cuerpo.
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, se trasladó hacia Coatzacoalcos para coordinar los trabajos que se realizan tras la explosión. El jueves al mediodía, el presidente Enrique Peña Nieto hizo lo propio, no sin antes lamentar la tragedia. “Sin duda este incidente ha causado pena y dolor en muchas familias, en personas que hoy están lesionados, y desde aquí acompaño a todas las familias que pasan por un momento de pena y de dolor, con nuestra mayor solidaridad”, aseguró el mandatario.
Los hechos ocasionaron diversas reacciones en el plano político. Legisladores federales del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) se manifestaron porque se sancione a la empresa Mexichem, al referir que es la presunta responsable de la explosión del complejo petroquímico de Pajaritos.
La coordinadora de Morena, Rocío Nahle, señaló que Petróleos Mexicanos no es responsable de lo sucedido, sino la compañía particular, a la que se le entregó el manejo y operación de la planta siniestrada. Nahle agregó que solicitará, a través de un punto de acuerdo, que se retire la concesión a Mexichem, porque “no puede estar en manos de privados irresponsables”.
Por su parte, el director general del complejo, Antonio Carrillo Rule, aseguró que al momento del estallido se hallaban realizando trabajos de modernización a las instalaciones. Dijo que en la planta había contratistas que estaban haciendo mejoras, por lo que desconocen a ciencia cierta lo que sucedió.
El director de Mexichem, empresa que sufrió una baja en el mercado de valores tras los sucesos, no descartó que haya más trabajadores fallecidos, cuyos cuerpos estarían en la zona de la planta a la que todavía no habían ingresado porque –al cierre de esta edición– aún no habían logrado enfriarla.