Además de ser el principal sospechoso de la desaparición de dos agentes de la Guardia Nacional, ocurrida el pasado 30 de agosto, “El Pantera” también está relacionado con delitos de delincuencia organizada y tráfico de personas, ambos de competencia federal.
Cambió de defensa e intentaron apelar por vicios en el debido proceso; sin embargo, sus argumentos no evitaron que fuera vinculado a proceso por delitos contra la salud y posesión de armas, cartuchos y cargadores en Tijuana