De alrededor de 500 personas con necesidad de un trasplante, solamente el 30 % es acreedor a uno, según informó Gonzalo Rodríguez Pinal, presidente nacional de Amigos Pro Renal.
En 2019 había 170 personas en Baja California en espera de un trasplante de órgano. Tras la pandemia, la cifra se redujo a 140, principalmente porque los pacientes murieron como resultado de sus bajas defensas ante la COVID-19.