No necesariamente la erudición nos hace vivir en la verdad o con sabiduría. Se confunde el que sabe mucho o tiene conocimientos, con la persona sabia. Que bien puede ser un campesino, una persona de limpieza que por vivir ordenadamente tiene un pensamiento claro y recto.
“Quien no piensa como vive, acaba viviendo como piensa”. Han cambiado muchas cosas en nuestro mundo, pero el ser humano sigue siendo receptivo al buen pensamiento descrito en buenos libros, buenos discursos, y en especial en las buenas personas.
Motivando a votar el domingo 2 de junio, los obispos de Celaya, Irapuato, León y Querétaro refieren cuatro principios propuestos por el Papa Francisco a los cristianos católicos para que se responsabilicen -no sólo votando- en la transformación de sus comunidades.
Si la inquisición europea causó el holocausto musulmán e indiano en el orbe, la Alemania hitleriana nazi provocó el holocausto en la Segunda Guerra Mundial; y ahora Israel y Hamas son causa del palestino en Gaza y Cisjordania; como Rusia, está provocando un infierno en Ucrania y alrededores. Tanto como el crimen organizado en todo México.
Admirablemente, don Francisco Moreno Barrón, Arzobispo de Tijuana obedeció al Papa Francisco para administrar por casi dos años la extensa Iglesia de Mexicali y el servicio pastoral de la enorme arquidiócesis.
Los clérigos, religiosos son estudiosos y sabios. Hoy en día estudian express, quizás, y no conocen bien el contenido de la Biblia, o la omiten para la conveniencia del Vaticano.
Habría que agradecer y descubrir en personajes como Luther King, Nelson, Mandela, Mahatma Gandhi, Anacleto González Flores, Anwar Sadat, Itzhak Rabin, los Papas Juan XXIII y Juan Pablo II, cómo pudieron inspirar y entusiasmarnos por la paz.
“Lo más grave para mí, que está sucediendo hoy en nuestro país, es que no creemos en nadie, todos ridiculizamos lo que el otro dice; y eso es muy triste y muy lamentable, y nos está destruyendo”, expresa Carlos Garfias Merlos, Arzobispo de Morelia.