Una de las revelaciones para la memoria histórica de la Península de Baja California, es que el primer establecimiento misional en 1683, no fue el presidio San Bruno (6 octubre); cerca de la hoy Catedral de Nuestra Señora de la Paz, el padre Eusebio Francisco Kino y el capitán de aquella expedición, Atondo y Antillón, fundaron inicialmente en un ojo de agua cercano a la playa, la misión de Nuestra Señora de Guadalupe de las Californias.