(Vin Scully) fue una de las grandes voces del deporte. Era un hombre gigantesco, no solo como locutor sino desde el lado humanitario. "Amaba a la gente. Amaba la vida. Amaba el béisbol y a los Dodgers. Y amaba a su familia. Sé que estaba deseando reunirse con el amor de su vida, Sandi", afirmó el presidente y director general del equipo, Stan Kasten.