Ahora que el General Saúl Luna Jaimes fue retirado de la II Zona Militar para hacerse cargo de la 32 Zona Militar en Valladolid, Yucatán, la Fiscalía General del Estado prescindió de los servicios que le tenía contratados al militar de dos abogados que realmente trabajan para el fiscalista Adolfo Solís Farías.
Dicen quienes saben que Solís ha mantenido una cercana relación con la milicia, al no solamente asesorarlos en cuestiones fiscales; también, siendo un “facilitador e intermediario” con una parte del sector empresarial.