Increíble que la FGR, que no investigó por narcotráfico a Zambada o a cualquiera de los hijos del Chapo, ahora esté a punto de solicitar orden de aprehensión contra uno de estos últimos, por sacar de circulación a uno de los narcotraficantes más buscados, y acercarlo para su captura (seguramente a cambio de un beneficio para él y sus hermanos) a Estados Unidos.
La Fiscalía General de la República, titulada por el fiscal ausente, Alejandro Gertz Manero, no investiga a Rubén Rocha Moya, el gobernador; le ha pedido comparta su versión, pero, de acuerdo a su boletín, no en calidad de declaración, sino como colaboración
Ismael Burgueño, el alcalde electo que todos los días sostiene reuniones con autoridades estatales o grupos de la sociedad civil, no ha develado como es urgente, su plan para sanear la ciudad más insegura del país, la más violenta y a la postre, una de las más caóticas, sucias y desordenadas.
En el mismo mes de julio, con 21 días de diferencia, en dos de los estados más violentos del país, Baja California y Tamaulipas, dos líderes empresariales fueron asesinados a balazos. Ambos habían denunciado los ataques del crimen organizado hacia el comercio formal a partir de extorsiones, amenazas, cobro de piso.
Entre las manchas que se pueden contabilizar, están también las 117 masacres que se han registrado en el País tan sólo en lo que va de este 2024, muchas de ellas minimizadas por el propio Presidente, y justificadas con cobrar relevancia mediática únicamente para afectarlo a él.
Aun cuando la mayoría de los delitos que se cometen en Baja California están relacionados con narcotráfico, a través de las células que cárteles como el de Sinaloa, el de Jalisco y el de los Arellano Félix mantienen en BC para controlar los territorios y sembrar terror, también suceden, en un clima de impunidad y corrupción, crímenes pasionales, homicidios dolosos por rencillas, robos, asaltos.
No hay lugar seguro en México, por la falta de compromiso y voluntad de los gobernantes para combatir apropiada y exitosamente a los criminales organizados, a los asesinos, a los narcotraficantes, a los feminicidas y a todos aquellos que, como El Bart, viven con la creencia -comprobada en la estadística oficial- de que, en este país, rara vez se hace justicia.
La tercera entrega en la saga de la integración del gabinete de la Presidenta de la República Electa, Claudia Sheinbaum Pardo, quien tomará posesión el 1 de octubre de 2024, es la más política de las tres que han sucedido hasta la fecha.
Como nunca en los tiempos modernos, durante el mandato de López Obrador, la oposición, los analistas y algunos intelectuales sugirieron, no sin preocupación ante el autoritarismo demostrado por el tabasqueño, que se debería proteger la Constitución para evitar lo que por Ley está prohibido: una reelección.
En un ánimo de calmar los mercados internacionales, el Presidente Andrés Manuel López Obrador intervino hacia el futuro, anunciando antes que su sucesora que el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, continuaría en el cargo el próximo sexenio...