“Caminante, no hay camino, se hace camino al andar”.
-Manuel Machado, Cantares.
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No sé si sea el único lugar en el mundo donde todos los días se recaban millones de pesos, por no prestar ningún servicio; más bien es un estorbo que soportan los mexicanos desde hace más de 60 años, por el que deben hacer filas y filas para pagar en la caseta del puente del Río Colorado.
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Los ingresos los “administra” el gobierno sonorense en Hermosillo, se queda con una parte; y reparte “proporcionalmente” a los ayuntamientos de Sonoyta, Puerto Peñasco y San Luis Río Colorado.
La delegación de la SCT Baja California invirtió, en el sexenio del presidente Fox y del gobernador Elourduy, para una carretera moderna de concreto hidráulico por el que Baja California no recibe ni un cinco a manera de cuota. La SCT Sonora en el gobierno de Calderón y Guillermo Padrés, construyeron la nueva carretera San Luis-Sonoyta de dos carriles con acotamiento, y tampoco es de cuota.
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Increíblemente, de los millones que diario se cobran injustamente a todos los transportes y vehículos por cruzar de Mexicali a Sonoyta, ni un peso se invierte para reparar ninguna de ambas rutas nacionales e internacionales. Una vergüenza cómo se encuentra destruida la carretera San Luis-Sonoyta, y no se diga parte hacia Mexicali.
Los bloqueos más tardan en levantarse, que en llegar los empleados a “estirar la mano”. Todavía tras 10 o 12 horas de espera por las protestas de los agricultores, los transportistas deben cubrir la respectiva “cuota” por no prestar ningún servicio. Y es extraño que en estos casos (como casi nunca) los sanitarios estén en buen estado, sin papel sanitario ni jabón. Casi inservibles, y no hay espacio para que los miles de usuarios tengan la manera de acercarse a esos servicios, más en situaciones extraordinarias y tantos inconvenientes.
Miles de transportistas han perdido las entregas; no han comido, no han descansado. Deben esperar más de ocho horas o más, y tras la espera de horas antes en el retén militar Cucapah; y ya lo vivieron el 13 de octubre y ahora el 24 de noviembre. Miles de millones de pesos perdidos en servicios y productos no realizados o entregados.
Sí hay alternativas para desbloquear los bloqueos. Algunos transportistas desesperados querían empujar a un lado a los tractores, trilladoras y equipo agrícola con la fuerza de sus tráileres o camiones. Desesperados. Cientos de carros comerciales que conocen las rutas que interconectan los valles de Mexicali y San Luis, esta vez no se frustraron. Se movilizaron por varios ejidos hacia la conexión de Estación Coahuila (Km. 43) por Batáquez hacia Mexicali libre.
Para esquivar el bloqueo en la Colonia Miguel Alemán (Fitosanitaria, a unos 10 km del Puente de Oro, en Batáquez , el Ejido Monterrey), hay que cruzar por el Jiquilpan, Poblado Alfredo Bonfil, Pátzcuaro, Crucero del Toluca, y enfilarse a Ciudad Victoria Km 43; de ahí al 57, cruzar por Luis B. Sánchez, y hacia el norte la carretera local lo conectará a la carretera San Luis-Sonoyta que une todo México, rumbo a Caborca-Hermosillo y más.
Una hora por no perder el día. Ni modo, de San Luis por el Km. 57 hasta el 43 y de ahí al ejido Monterrey, Batáquez a volverse a conectar a la carretera que lleva a Mexicali-Tijuana.
Algunos de los accesos o conexiones entre el Valle de Mexicali y San Luis entre el Poniente y Oriente, en casos extremos, por estos valles a la carretera federal se puede acceder pese, a las vueltas, por los ejidos Miguel Alemán, Tehuantepec, Monterrey, Vulcano, Hechicera, Pólvora, Tamaulipas, Sinaloa, Cuernavaca (todos estos ejidos tienen acceso a la carretera Mexicali-San Luis), y extraordinariamente conectarse a la carretera San Felipe-Mexicali por el Valle a través del Ejido Nayarit, Zakamoto, hacia la colonia La Puerta que lleva a San Felipe al sur, y al norte a Mexicali, incluso sin cuota y doble carril con acotamiento.
Ante la indiferencia e irresponsabilidad del Gobierno Federal a las exigencias de los agricultores y transportistas al estar sometidos al autoritarismo y al crimen organizado, mientras son peras o son manzanas y las afectaciones a la movilidad en esta región mundial entre Sonora-Arizona-Baja y Alta California, esta es una alternativa para desbloquear los bloqueos.
Este 24 de noviembre de 2025, tan sólo de la carretera Sonoyta-San Luis Río Colorado, las filas en el retén militar Cucapah tuvieron una longitud de 20 kilómetros, sin servicios sanitarios, alimentos, etcétera. Un verdadero caos. De ahí sumarle el bloqueo y todos los trastornos humanos y económicos, de los cuales muchos se libraron al invertir un poco de tiempo a través de las arterias de ambos valles de Mexicali-San Luis.
Germán Orozco reside en Mexicali, B.C.
