Cuatro ataques armados se registraron contra y dentro de negocios de diferentes giros en Tijuana, entre julio y septiembre del 2025. Un caso se registró contra un establecimiento de comida, dos contra smoke shops y uno contra un bazar; en ellos murieron cuatro personas y otra más resultó lesionada, pero a la fecha los presuntos responsables no han sido detenidos o vinculados a los delitos.
A las 05:25 horas de la madrugada del 17 de julio, un sujeto vestido con pantalón caqui, sudadera negra con estampado y tenis blancos, que circulaba a pie por la Avenida Paseo Playas de la Sección Jardines, realizó cinco detonaciones contra la fachada del Restaurante Malvet, para después huir del lugar, lo que quedó registrado en cámaras de seguridad. Debido a la hora, no había clientes ni empleados en el lugar, por lo que no hubo lesionados.
A la fecha, este caso no se ha judicializado y tampoco hay detenidos, pero información proporcionada a ZETA indica que la principal sospechosa del móvil del ataque estaría vinculada a la deuda de uno de los meseros del establecimiento, quien casualmente tras el incidente ya no se presentó a laborar.
Un par de hombres fueron atacados a balazos alrededor de las 20:08 horas del 1 de agosto, mientras se encontraban en el interior de la tienda Smoke Shop 602, ubicada sobre la Avenida El Dorado y Felipe Ángeles de la colonia El Dorado Residencial, uno de ellos de aproximadamente 35 años, quedó sin vida en el lugar, y su compañero identificado como Juan Manuel Rodríguez Cruz, fue lesionado de bala en el costado izquierdo. Por ahora no hay detenidos y la sospecha del móvil se sigue investigando.
Luis Alejandro Becerra Vásquez, dueño del bazar Saldos Max, ubicado en la calle Cuauhtemotzin de la colonia Tomás Aquino, fue asesinado a balazos a las 11:51 horas del 2 de agosto.
El 4 de agosto, en la colonia Lomas Taurinas, en un operativo conjunto con elementos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana Federal (SSPCF) y la Guardia Nacional, elementos de la policía municipal de Tijuana le marcaron el alto a un vehículo Volkswagen color blanco, por no tener placas de circulación.
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Al aproximarse al automóvil, los oficiales descubrieron un arma de fuego tipo escuadra en el interior, lo que motivó la detención de los ocupantes identificados como Pedro Antonio “N”, Marco Antonio “N”, Geovanny “N” y José Marcos “N”, alias el Botas; éste último es sospechoso principal de Luis Becerra, pues, según testigos, el vehículo confiscado en este arresto coincide con el utilizado en el ataque del establecimiento.
El 7 de agosto, fue detenido por portar 32 envoltorios de heroína, Julio Enrique “N”, alias el Babelo, segundo sospechoso del homicidio de Luis Becerra, identificado como uno de los presuntos generadores de violencia en el área de Otay y la colonia Libertad, donde asesinó a un hombre el 30 de junio en una barbería.
Por ahora, el Botas y el Babelo permanecen detenidos por portación de arma de fuego y narcomenudeo, respectivamente, pero sin vincular al crimen contra el dueño de Saldos Max.
Sobre el móvil de la ejecución, fuentes compartieron que los detenidos manifestaron haber atacado Luis Becerra por supuestamente trabajar para el lado contrario, el Cártel de Sinaloa (CDS), aunque esto aún no se comprueba.
De acuerdo con testigos, el 2 de septiembre dos sujetos vestidos de negro con cascos del mismo color, se adentraron a un smoke shop ubicado sobre la calle Emiliano Zapata del Poblado Ejido Matamoros, y realizaron detonaciones contra dos jóvenes, que quedaron sin vida en el lugar, para después huir sobre una motocicleta negra. En este asunto tampoco hay detenidos y no se ha establecido una línea de investigación por parte de las autoridades.